Sánchez corrige: vuelve la mesa de diálogo
Ante la presión de ERC y tras un encuentro con Gabriel Rufián, Pedro Sánchez rectifica y recupera la mesa de diálogo para antes de las elecciones catalanas
El Gobierno de Pedro Sánchez ha cedido a la presión de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Después de aplazar la mesa de diálogo entre el Ejecutivo central y el catalán para después de las elecciones autonómicas, ahora la Moncloa dice que sí que se celebrará antes de los comicios –aún pendientes de convocar por parte de Quim Torra–.
Este cambio de parecer respecto al diálogo con la Generalitat ha sucedido después de que el mismo Sánchez se reuniera con el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián. El encuentro ha tenido una duración de una hora y se ha celebrado justo antes de la rectificación del Gobierno, según han informado varios medios.
«Para descartar cualquier duda respecto a nuestra voluntad de dialogar, manifestamos nuestra disposición a celebrar la mesa de diálogo entre gobiernos acordada, antes de las elecciones catalanas», reza un comunicado de la Secretaría de Estado de Comunicación enviado este jueves por la tarde, tras una jornada de idas y venidas alrededor de la reunión.
Nueva posición
El Ejecutivo anunció por la mañana que posponía la relación bilateral con la Generalitat hasta después de las elecciones en Cataluña, a la vez que confirmó que Sánchez se reunirá con Torra el próximo 6 de febrero. La decisión del Gobierno enfadó sobremanera a ERC, que lo asumió como «un incumplimiento flagrante» del acuerdo con el PSOE para la investidura.
El Ejecutivo ha explicado ahora que, «dado el horizonte electoral» decidido por Torra, «no se dan las mejores circunstancias para iniciar el diálogo entre gobiernos, cuando uno de ellos ha puesto punto y final a la legislatura y el nuevo Govern no podrá constituirse hasta la celebración de las elecciones anunciadas», según recoge el documento de la Secretaría de Comunicación.
No obstante, rectifica ante los reproches de Esquerra. «A lo largo del día de hoy, hemos escuchado poner en duda nuestra voluntad de dialogar y nuestro compromiso de cumplir con los acuerdos pactados», ha admitido el Gobierno en el comunicado, argumentando que para no dar la impresión errónea a sus socios de ERC seguirá adelante con la mesa de diálogo.
El aviso de ERC
La mesa de diálogo «es un acuerdo suscrito, y si no se cumple, será considerado por ERC como un incumplimiento flagrante», avisó Esquerra este jueves por la tarde en respuesta al comunicado anterior del Gobierno. La formación de Oriol Junqueras también exigió que Sánchez y Torra fijen una fecha para crear la mesa en su reunión de la próxima semana.
Según ERC, «algunos no quieren la mesa porque no la sienten suya», en alusión a JxCat, y «otros no la quieren tampoco porque se han visto obligados» a crearla, en alusión al PSOE. Pero, han insistido, no se puede «perder el tiempo» y más cuando «quedan muchos meses para las elecciones y no tiene ningún sentido esperar a la constitución del nuevo Govern».
A juicio de los republicanos, «la vía política hay que abrirla ya, es urgente y es imprescindible».