Presión sobre Sánchez para que cancele la reunión con Torra
PP y Ciudadanos exigen al presidente del Gobierno que rectifique en sus planes de celebrar un encuentro con Quim Torra el 6 de febrero en Barcelona
La oposición ya ha comenzado a ejercer presión a Pedro Sánchez para que cancele su reunión con Quim Torra, programada para el jueves 6 de febrero en Barcelona, según anunció el Gobierno el martes. Tras el anuncio del president de la Generalitat de este miércoles, convocando elecciones pero sin anunciar aún la fecha, el Partido Popular y Ciudadanos han exigido a Sánchez que rectifique y cambie su agenda.
Asimismo, el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Montesinos, ha emplazado al líder socialista a no reunirse con el presidente catalán la próxima semana y que, en cambio, le diga «que se vaya a su casa porque no representa a todos los catalanes». «Esta reunión no debe producirse, el señor Quim Torra está inhabilitado por la justicia», ha añadido, en alusión a la sentencia no firme del TSJC por los lazos amarillos.
En ese sentido, Pablo Casado ha anunciado también que el PP presentará una querella contra Torra por «usurpación de funciones» y ha advertido de que «cualquier decisión que toma no tendrá valor jurídico». E igualmente ha criticado que Sánchez mantenga una reunión con él cuando «ya no es presidente de la Generalitat».
Casado ha recordado a Sánchez que el Gobierno dispone de mecanismos constitucionales para hacer que Torra cumpla la ley y pueda mandarle un «requerimiento», requisito previo a la puesta en marcha del artículo 155.
«Sánchez tiene que tomar la iniciativa»
Por su parte, el presidente de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha demandado a Sánchez no solo la anulación de la reunión, sino también el cese de Torra. «El separatismo quiere marcar los tiempos para decidir cuándo romper España», ha afirmado. «Sánchez tiene que tomar la iniciativa y cesar a Torra y convocar elecciones», ha subrayado, asegurando que «Sánchez tiene que tomar cartas en el asunto».
Sobre los tiempos que pretende marcar Torra –que tanto puede convocar elecciones en mayo o, si así le apetece, en octubre–, Carrizosa ha explicado que en Ciudadanos «queremos que los marque conforme a la ley el presidente de España». Por lo demás, el parlamentario naranja ha considerado que la convocatoria electoral «no ha llegado» porque Torra no puede hacer el anuncio en el tanto «no es presidente».
Por su parte, el PP entiende que después de las pasadas elecciones generales de noviembre Sánchez «se ha tenido que echar en brazos de aquellos que quieren acabar con la igualdad de los españoles, la soberanía nacional y la Constitución», y «por eso se va a reunir con Torra», un encuentro que a juicio de Montesinos «no se debería producir».
Los populares han avanzado que harán «una ofensiva legal y parlamentaria en defensa del interés general». «Si Sánchez no defiende a los ciudadanos, los vamos a defender nosotros en la justicia, en el Parlamento y en las instituciones; se trata de defender la Constitución», ha concluido Montesinos. «Esto no va de colores políticos sino de defender la Constitución y las instituciones y vamos a estar a la altura».
Iglesias defiende la reunión Sánchez-Torra
El discurso del Gobierno de Sánchez hasta ahora ha sido que Torra sigue siendo el president de la Generalitat porque la condición de ser diputado en el Parlament lo es únicamente para acceder al cargo en la Generalitat, no para mantenerse en el mismo. Tras el anuncio de Torra este miércoles, el Ejecutivo central parece mantener el mismo argumentario, a juzgar por las declaraciones del vicepresidente segundo.
El también ministro de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, ha defendido tras la declaración de Torra el «diálogo» como una «obligación de los políticos». A su juicio, la reunión entre Sánchez y el líder independentista debe mantenerse, y en diálogo no debe estar supeditado al ciclo electoral. «Si hay elecciones quizás haya un nuevo president o presidenta pero el Gobierno tendrá que dialogar con quien haya», ha afirmado.