El silencio de Casado irrita a los diputados del PP

El Partido Popular acaparó este miércoles todos los focos en el Congreso, pese a no salir a la tribuna a desvelar su voto en la moción de censura contra Pedro Sánchez presentada por Vox. Los discursos del resto de grupos parlamentarios y sus réplicas agotaron la sesión de ayer, miércoles, y no será hasta hoy cuando Pablo Casado defienda la postura de su partido y oficialice si se abstendrá o votará ‘no’ a la moción (tal y como pide la mayoría de pesos pesados del PP).

“Para nosotros es secundaria la moción de censura. No tiene ningún viso de salir adelante. Ni nos preocupa, ni nos ocupa ni es nuestra prioridad», reiteró este miércoles la portavoz popular Cuca Gamarra.

Para demostrar que la moción al PP le importa poco, el propio Casado se dejó fotografiar desde su escaño con unos papeles en los que estaba preparando la reunión telemática que tenía durante el debate con el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario del euro y diálogo social, Valdis Dombrovskis, al que trasladó su propuesta para que una autoridad independiente que gestione los fondos europeos como en Francia, Italia y Grecia.

Sin reunión para decidir el voto

“Hace días que está decidido el sentido del voto”, señalaron fuentes del entorno de Casado durante el debate. Se trata de una decisión personal del líder del PP y la orden entre los que conocen el veredicto se centra en no desvelarlo antes de hoy a mediodía, previsiblemente cuando Casado saldrá a la tribuna.

Esto ha generado también malestar entre algunos diputados que eran ‘asaltados’ por los periodistas a su entrada al hemiciclo. Algunos afirmaron que no ha habido durante este miércoles, como suele suceder normalmente, ninguna reunión del grupo parlamentario del PP para dirimir el sentido del voto. En esta ocasión, la decisión vendrá directamente desde Casado y no cabe el voto en conciencia, es decir que algún diputado o diputada rompa la disciplina de voto.

“No se va a romper la disciplina de voto”

Preguntado sobre esto, fuentes del PP consideran que “nadie la va a romper”, ni siquiera la que algunos apodan «díscola», en alusión a la exportavoz popular Cayetana Álvarez de Toledo. La diputada ya anunció que no comparte el voto en contra de la moción presentada por Vox. 

Todo ello después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, saliera a la tribuna y en su discurso dedicara tiempo para pedir a Casado que vote ‘no’ a la moción. Fuentes socialistas aseguraron a Economía Digital que “es más fácil si el PP vota ‘no’ porque demostraría que están dispuestos a dialogar con el Gobierno de coalición”.

Los diputados socialistas se refieren a que los populares serían proclives a sentarse a negociar la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) o, incluso, a pactar los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

El PP busca deliberadamente mantener el secretismo hasta el último minuto para alimentar las suposiciones a derecha e izquierda. Algún que otro diputado popular expresó su resignación ante los periodistas asegurando que “no tiene mucho sentido que en esta moción la noticia seamos nosotros y nuestro voto”.

La sorpresa del PP

El discurso de no-agresión por parte de Abascal contra el PP fue también motivo de sorpresa entre algunos diputados del partido de Casado. Sin duda, la referencia al PP por parte del líder de Vox fue lo más esperado de la moción. Abascal pidió respeto a los populares para su moción de censura y les ofreció construir un alternativa política, cultural, económica y territorial para que sean los propios españoles quienes rescaten a España.

«Nadie va a venir a salvarnos. A España sólo la pueden rescatar los españoles», recalcó el líder de Vox. Sin referirse explícitamente al PP pero sí mirando a la bancada popular, asumió que haya formaciones que consideren que la moción presentada por Vox es estéril e inoportuna y aseguró que respeta a quienes así lo crean.

A renglón seguido es cuando tendió la mano para realizar el ofrecimiento a construir una alternativa política, cultural, económica y territorial fundamentado en la convivencia, en la igualdad y en la diversidad de España. Una alternativa que consideró que es la mejor opción para salvar al país porque insistió en que sólo los propios españoles pueden hacerlo.

“Es una tomadura de pelo”

El argumento oficial de los populares es que “no salen los números” para decir ‘sí’ a la moción de censura. El secretario general de los populares, Teodoro García Egea, aseguró que “esto no es una moción de censura, esto es una tomadura de pelo. Su propia inutilidad la convierte en un espectáculo circense”, dijo en rueda de prensa.

“Para que la moción triunfe necesitarían los apoyos de ERC, Convergencia y Bildu”, recordó el popular quien continuó diciendo que “no se puede engañar, no hay alternativa a Sánchez y su gobierno Frankenstein. El verdadero patriotismo es decir la verdad”, zanjó. 

La sesión se interrumpió tras el turno del grupo republicano y este jueves se retomará a las 9 horas con el turno de Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia en común. Después, Vox, y Casado que despejará las dudas de los de Abascal, PSOE y también de los periodistas. Por último cerrarán el turno de esta moción los socialistas.