Moción de censura: Sánchez acusa a Vox de «sembrar odio entre los españoles»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, critica a Abascal por no hacer propuestas y acaba preguntándose: "¿Qué es lo que hacemos aquí?"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respondido al candidato de la moción de censura, que este miércoles se presenta en el Congreso, Santiago Abascal, que este tipo de iniciativa parlamentaria debe ser «constructiva», en alusión a que no ha logrado atar los votos suficientes para que su moción prospere. Constatado esto, Sánchez ha acusado a la formación que lidera Abascal de «sembrar odio y discordia entre los españoles» para provocar la «confrontación» y «distraer las energías» que deberían dedicarse a resolver los problemas del país.
El jefe del Ejecutivo podía haber interrumpido en cualquier momento, según dicta el Reglamento del Congreso, pero prefirió esperar a su turno para subir a la tribuna y defenderse de todos los ataques proferidos por los verdes. «No veo que Europa sea semejante a China o a Hitler, como ha venido a decir en su intervención», dijo dirigiéndose a Abascal.
El jefe del Ejecutivo defendió el Estado autonómico y el papel de la Unión Europea frente a las propuestas del diputado Ignacio Garriga y el propio Abascal. Asimismo, Sánchez pidió superar crisis como la catalana: «No se me ocurre tarea más noble y más patriótica que legar a nuestros hijos un país en concordia».
Pedro Sánchez: «Quieren dividirnos»
Con un tono sosegado, Sánchez se dirigió a Abascal y aseguró que «quieren dividirnos, provocarnos, enfrentarnos, esa es la razón última de la moción. Ha medido mal sus fuerzas, ha subestimado la fuerza de la democracia. El candidato puede hacer lo que ha hecho, aprovecharse de las reglas de la democracia. Cree que puede utilizar el Parlamento como un gran plató para su lucimiento. En esta Cámara está representada la España real, como es, no como quiere usted que fuese», criticó el jefe del Ejecutivo.
Sánchez dedicó su discurso a responder sobre el impacto global que ha tenido la pandemia y enumera los desafíos de España. «Deberemos continuar con una política económica expansiva y solidaria». El presidente cita de nuevo a la transición digital y económica como «vectores de modernización».
Sánchez: ¿Qué es lo que hacemos aquí?
«No ha habido ninguna propuesta en su intervención. Bueno, cómo tienen que ir sus señorías vestidos. Luego dirá que Vox no es fascismo, es estilismo, pero es lo único que se le ha escuchado en toda la mañana. Señor candidato, sabe que no tiene la menor posibilidad de obtener la confianza mayoritaria. Por el tono bronco y lo inquietante del contenido expuesto no parece que le interese mucho obtener la confianza. La pregunta que hemos escuchado durante horas es si esta iniciativa no pretende sustituir al Gobierno, ¿qué es lo que hacemos aquí?», preguntó Sánchez al líder de Vox.
«Hay quien dice que se dirige contra el PP, para ocupar el espacio de la derecha. Tal vez, lo ignoro. Otros dicen que convertir al Parlamento en un gran plató es su fin último, con usted como protagonista. Hemos asistido a un despliegue de propaganda que no beneficia a la nación que dice defender, sino a sembrar la discordia y a distraer energías», continuó el jefe del Ejecutivo.
Pero el aplauso más largo de la bancada socialista a Sánchez fue por decirle a Abascal que «además de padecer, sufrir y soportar el terrorismo, el PSOE hizo algo más. Fue un Gobierno socialista quien derrotó definitivamente a ETA. A estas alturas no va usted a reescribir la historia».
Pide el ‘no’ de Casado
Sánchez pidió el no de Casado en la votación: «Le invito a cortar con la ultraderecha. Le pido formalmente que vote no en esta moción, que proclame que la derecha española no tiene nada que ver con la ultraderecha», se dirigió Sánchez a Casado.
El presidente se giró hacia el resto de grupo y les pidió que no se dejen arrastras por la provocación de Vox. «Mañana vamos a votar y usted va a comprobar que los españoles rechazan su propuesta de odio, furia y choque. Invito a los portavoces que no nos dejemos arrastrar por la provocación. Será edificante ver cómo se cierra el paso a su proyecto de odio, furia y choque. El resultado debe ser constructivo».
Ya en el segundo turno de réplica, Sánchez mantuvo el tono pero no el discurso. El presidente del Gobierno atacó donde más podía doler al líder de Vox: el terrorismo. Así aseguró desde la tribuna que se queja de la actual política penitenciaria pero, comentó, que no lo vio tan crítico cuando ETA atentaba y gobernaba el PP.
“Usted ya utilizaba el terrorismo como indigna arma política. Que lo siga utilizando ahora, cuando hace 9 años que ETA dejó de matar da una idea de lo que es en política: un depredador sin valores y sin ningún tipo de escrúpulos”, dijo Sánchez a Abascal, que ha sido víctima de la banda terrorista.