Competencia da la cara por MásMóvil contra Orange y Vodafone
La CNMC defiende la existencia de un cuarto operador frente a las voces que claman por fusiones en el sector de las telecomunicaciones
MásMóvil no debería ser un candidato a entrar en el baile de fusiones que claman los grandes operadores de telecomunicaciones. Así lo ha expresado el presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, quien dirige el organismo encargado de autorizar este tipo de operaciones. Su posicionamiento llega semanas después de que los operadores de telecomunicaciones, especialmente Orange y Vodafone, hayan intensificado sus llamamientos a una mayor consolidación de operadores en Europa.
Estos dos operadores, muy castigados por lo que en el mercado se considera ya como efecto MásMóvil, apoyan su reivindicación en el inminente esfuerzo inversor que supondrá el 5G, ya que en el viejo continente hay 450 compañías frente a las 4 de EEUU o las 3 de China.
En la apertura de un acto en Madrid para presentar un informe en Madrid sobre el sector en 2017, Marín Quemada ha destacado el crecimiento experimentado por el llamado “cuarto operador”, el grupo MásMóvil, propietario de marcas como Yoigo, Pepephone, LlamaYa y ahora Lebara, que cuenta ya con un 5% de cuota de mercado de la banda ancha fija y casi un 11% de la telefonía móvil.
Marín Quemada califica la existencia de MásMóvil como positiva para el buen funcionamiento del mercado
El presidente de la CNMC ha señalado que puede “entender” que haya “quien no se siente cómodo” con esta situación y que considere que “no hay espacio para tanto operador”. A su juicio, no obstante, desde la óptica del buen funcionamiento del mercado y la competencia y desde la capacidad de elección de consumidores y empresas, se trata “de una buena noticia”.
Dardo a Vodafone y Orange
Sus palabras van dirigidas a los dos operadores que más sufren la presencia de MásMóvil, de acuerdo a los apuntes de los analistas: Orange y Vodafone. Al operador francés, que paradójicamente se alimenta del auge de MásMóvil, no le ha temblado la voz para afirmar recientemente que la presencia del operador amarillo es un dolor de cabeza.
No hay más que ver el saldo de portabilidades. Mientras el operador naranja y azul han vivido una sangría en clientes móviles que han saltado a la competencia en los últimos años, el operador amarillo ha seguido justo la tendencia contraria, batiendo récords de líneas importadas mes a mes.
Ambos operadores, no obstante, han hecho esfuerzos en el segmento del bajo precio para contrarrestar el auge de MásMóvil. Vodafone ha lanzado ofertas agresivas a través de su segunda marca, Lowi, mientras que Orange lo ha hecho apoyándose en una estrategia multimarca, con Jazztel, Amena y Simyo. El operador francés además ha comprado recientemente la compañía República Móvil para reforzarse en este segmento.
Tampoco se ha quedado atrás Telefónica, que ha dado luz en los últimos meses a su marca O2. No obstante, el posicionamiento de la compañía presidida por José María Álvarez Pallete, mucho más centrada en los clientes de valor, ha provocado que el efecto MásMóvil no haya hecho tanta mella en su base de clientes.
Y tirón de orejas por la subida de precios
Además de enfriar esos de deseos de consolidación, Marín Quemada ha lanzado otros mensajes a los operadores, como que, según los datos de Eurostat, los precios ofertados en España por los operadores han aumentado en los últimos trimestres, mientras caen en Europa, sobre todo lo que se refiere a telefonía fija empaquetada.
También ha destacado que los paquetes que agrupan distintos servicios, tanto de conectividad como audiovisuales, “preocupan”. Este tirón de orejas sigue al que el propio Marín Quemada pegó en junio, cuando ya afirmó que en otros países «no existe el empaquetamiento que se produce en España».
En ese sentido, ha destacado que, según datos correspondientes al primer semestre de 2018, 8 de cada 10 hogares que experimentaron una subida de precios asociados a mejoras de servicios (más por más) hubiera preferido mantener el precio anterior y no beneficiarse de esas mejoras que no siempre creen necesitar.
Ha abogado por que “se reflexione” sobre ello y ha recalcado que desde la CNMC están atentos a que los consumidores cuenten con servicios de calidad, a precios adecuados y a que cada uno contrate “lo que necesita y no más de lo que necesita”.