Todas las fugas empresariales del trimestre negro catalán
Cuarenta firmas de renombre han sido protagonistas de la fuga empresarial que ha vivido Cataluña por la crisis independentista
Más de 3.000 empresas han salido de Cataluña en los últimos tres meses. Es la herencia de la crisis independentista que saltó todas las alarmas a principios de octubre, días después de celebrarse la consulta del 1-O. La tensión desencadenada llenó el futuro económico de incertidumbre y, consecuentemente, empujó fuera de la región a las grandes cotizadas, entidades financieras, así como empresas referentes en la tecnología, la alimentación, el turismo y la construcción. Estas fueron las principales firmas que protagonizaron el éxodo empresarial.
Alimentación
PASTAS GALLO. Trasladó su sede social desde Granollers (Barcelona) a El Carpio (Córdoba), localidad donde se ubica una de sus principales fábricas. El grupo empresarial de la familia Espona Massana justificó la mudanza en la necesidad de “garantizar la seguridad jurídica y los intereses de los consumidores, clientes, empleados y accionistas”.
SAN MIGUEL. La cervecera propiedad de Mahou trasladó su domicilio social a Málaga, ciudad en la que cuenta con un centro de producción –el más importante de Andalucía y en el que ha invertido 32 millones de euros en los últimos diez años– desde 1966.
BIMBO. Puso rumbo a Madrid el 11 de octubre. Concretamente, se instaló en el Parque Empresarial Las Mercedes, lugar desde el que dirige el negocio en Europa, África y Asia. La panadera que ahora está en manos mexicanas tomó la decisión un año después de amagar con hacer las maletas.
NATURHOUSE. “Cataluña será una república suramericana”, así abrió la veda Fèlix Revuelta, propietario de Naturhouse y empresario combativo con el independentismo, tras pasar de las oficinas del barrio barcelonés de Les Corts a la calle Claudio Coello de Madrid. El dueño de la franquicia del sector dietético matizó que en la capital se encuentran la presidencia y las direcciones operativas de la compañía y que es allí donde el consejo de administración se reúne «habitualmente».
IDILIA FOODS. El fabricante de Cola-Cao, Nocilla y otras marcas como Okey se marchó a Valencia y dejó Barcelona, donde llevaba afincado más de 70 años. La empresa controlada por la familia Ferrero advirtió en varias ocasiones de que tomaría esta decisión.
CODORNÍU. El cava catalán hizo las maletas después de que el consejo de administración de Unideco, matriz del grupo Codorníu Raventós, acordara trasladar su sede social desde Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona) hacia Haro (La Rioja). La empresa más antigua de España y una de las principales de capital catalán ya abrió la puerta a un posible cambio antes del 1-O.
Banca
CAIXABANK. El mayor banco catalán tomó la decisión el primer viernes de octubre, gracias al decreto del Gobierno en el que se permitía cambiar la sede social sin contar con el visto bueno de la junta de accionistas. Eligió Valencia, donde tiene las oficinas del absorbido Banco de Valencia, mientras que La Fundación Bancaria La Caixa y Criteria pasaron a Palma de Mallorca. Un mes más tarde hizo lo propio con sus filiales pero, en este caso, las sedes tenían dirección Madrid.
BANC SABADELL. Fue la primera IBEX en dar el paso. Optó por Alicante y, al igual que Caixabank, eligió la sede de una de las entidades que compró durante la crisis: la CAM. Repitió la jugada con el despacho oficial del presidente Josep Oliu, que pasó a estar en Madrid.
BANCO MEDIOLANUM. La junta de la filial italiana de Banco Mediolanum decidió irse a Valencia «como medida para garantizar los intereses de sus clientes, mantener la máxima normalidad y asegurar un marco estable para el desarrollo de su actividad», siempre en el ámbito de supervisión del Banco Central Europeo (BCE). Este cambio, unido a los de Caixabank y el Sabadell, situó a Valencia como la nueva city española.
ARQUIA BANCA. La cooperativa de crédito mudó su sede social de Barcelona a Madrid, donde tiene la dirección de finanzas y de banca privada. Conocida anteriormente como Caja de Arquitectos, cuenta con 25 oficinas, 119.000 clientes en España y cerró 2016 con un beneficio neto de 8,7 millones. Los responsables de la firma trasladaron que mantendrán, por el momento, su actual estructura operativa y de servicios. Harán lo mismo con los los empleados de sus actuales centros de trabajo.
Aseguradoras
ZURICH. La aseguradora con más de 130 años de recorrido en España hizo la mudanza a Madrid por motivos de «seguridad jurídica» en una operación que, según comentaron, no supuso “ningún cambio en el modelo de negocio, ni tampoco en los centros de trabajo”. El traslado, el 18 de octubre, llegó un día después de anunciar que además dejaba de ser la compañía encargada de las negligencias médicas en la sanidad pública de Cataluña, donde lo hacía desde 1992.
ALLIANZ. El consejo de administración comunicó el 27 de octubre que la firma trasladaría a Madrid tanto la sede social como la fiscal. La filial de la alemana quiso “velar por los intereses de clientes, empleados, mediadores y accionistas” en un momento en el que el número de fugas ascendía a 1.681 empresas, según los datos facilitados por el Colegio de Registradores.
AXA. Pasó el domicilio social de Axa Vida y Axa Pensiones a Bilbao un día después de escuchar la comparecencia del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que proclamó la independencia de Cataluña para suspenderla ocho segundos después. El grupo de Jean Paul Rignault envió un mensaje de «tranquilidad y normalidad», además de justificar que lo hacia «por la necesidad proteger los intereses de los clientes, mediadores, accionistas”.
MGS SEGUROS. Se mudó el 9 de octubre su sede de Barcelona a Zaragoza. El grupo facturó 273,7 millones en primas y emplea a más de un centenar de personas es los servicios centrales de la calle Entença de Barcelona. Ahora, su domicilio social está en el Paseo María Agustín.
Turismo
VOLOTEA. La aerolínea de los fundadores de Vueling, Carlos Muñoz y Lázaro Ros –consejero delegado y director general, respectivamente–, trasladó su domicilio social de Barcelona (Travessera de Gracia, 56) a Asturias. La compañía de bajo coste quiso «garantizar el desarrollo de su actividad en el marco y bajo la supervisión de las autoridades aeronáuticas europeas», según informó en un comunicado.
HOTUSA. El mayor grupo turístico catalán presidido por Amancio López trasladó el pasado 9 de noviembre su domicilio social a la calle Xaurado (Madrid). La noticia saltó la misma semana que se conoció la magnitud del golpe de la crisis catalana al turismo: la confederación Cehat apuntó una caída de la facturación de los hoteles de Barcelona del 13% durante octubre, mientras que la patronal Exceltur afirmó que la bajada del sector sería del 30%.
EDREAMS. La plataforma de viajes online pasó su sede de Barcelona a Madrid, a la calle López de Hoyos 35. El grupo presidido por Dana Dune y cuya sede central se encuentra en Luxemburgo tiene una cartera de clientes de 18 millones de personas en 44 países. Además, cuenta con cuatro marcas principales: Edreams, Go Voyages, Opodo y Travellink. Su valor bursátil ronda los 260 millones de euros.
Químicas y tecnológicas
ORYZON GENOMICS. La biotecnológica con sede en Cornellà de Llobregat fue la primera iniciar la estampida –lo comunicó la noche del martes 3 de octubre– y argumentó que necesitaba “optimizar sus operaciones y la relación con sus inversores”, algo que no veía posible en Cataluña. Puso rumbo hacia Madrid y un día después se disparó en bolsa.
EURONA. La operadora de telecomunicaciones también eligió Madrid y, a diferencia de la mayoría de las mencionadas, desvinculó su decisión de cuestiones políticas. Sus motivos, se debían única y exclusivamente a aspectos operativos, puesto que compró varias empresas madrileñas el año pasado. Su valor en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) asciende a 51 millones.
LLEIDA.NET. El consejo de administración de la tecnológica decidió por unanimidad el lunes 10 de noviembre el traslado de su domicilio social, que pasó de Lleida a Madrid, donde ya contaba con oficinas. La compañía especializada en certificación y notificación electrónica y que saltó al parqué del MAB en 2015 explicó que buscaba reducir los “riesgos”, así como esquivar la “pérdida de estatus de operador europeo”.
STADA. La farmacéutica anunció el lunes 30 de noviembre el traslado de la sede fiscal de su filial española de Barcelona a Madrid para «mantener la operativa normal y proteger los intereses de clientes, empleados y accionistas». Stada, centrada en la prestación del servicio y el abastecimiento de medicamentos a farmacias y centros hospitalarios, está en España desde 1997 y cuenta con más de 11.000 empleados en todo el mundo.
INDUKERN. La salida del grupo químico que se había declarado como “empresa familiar catalana y española” llegó el 10 de octubre tras una decisión “obligada”. La firma que dirige Raúl Díaz Varela pasó a tener su sede social en Madrid, y no en El Prat de Llobregat. En 2016, Grupo Indukern obtuvo un ebitda de 56,6 millones de euros y una facturación de 725 millones.
Construcción y servicios
CEMENTOS MOLINS. Su nueva sede social dejó de ser Sant Vicenç del Horts —la localidad del exvicepresidente Oriol Junqueras— y pasó a localizarse en Madrid, concretamente el número 38 de la Calle Espronceda. El cambio del grupo cementero afectó a la matriz, Cementos Molins SA, y a su holding inversor, Cemolins Internacional S.L.U., pero no a las sociedades industriales o fabriles, Cementos Molins Industrial, Promsa y Propamsa.
COLONIAL. Cataluña se quedó sin su mayor socimi el viernes 9 de octubre, cuando la CNMV publicó un hecho relevante en el que se explicaba el traslado de su sede social a la capital de España. La tensión creciente precipitó los hechos. La decisión se tomó en un consejo ordinario el día antes de confirmarse, jueves, por lo que desde la inmobiliaria de Pere Viñolas optaron por no hacer ninguna declaración.
CESPA. El 18 de octubre, la filial de la cotizada Ferrovial (IBEX) aumentó la sangría. La empresa de recogida y tratamiento de residuos pasó de tener su sede en la avenida de la Catedral de Barcelona a tenerla en Madrid. Cespa emplea a 8.415 personas España y obtuvo una facturación de 505 millones de euros en 2016. Además, es titular de uno de los cuatro contratos de basuras que mantiene activos el ayuntamiento de la capital catalana.
Energía y Agua
ENDESA DISTRIBUCIÓN. La filial del grupo energético ha sido la última empresa de renombre en abandonar Cataluña, una vez celebradas las elecciones del 21-D y en plena recomposición del nuevo gobierno de la Generalitat. La eléctrica, controlada por la italiana Enel, tramitó formalmente el cambio de sede social antes de conocer el resultado de los comicios, si bien desde la firma prefirieron no hacer comentario alguno sobre los motivos del traslado.
GAS NATURAL. La compañía que preside Isidro Fainé se marchó a Madrid, ciudad en la que está su mayor centro corporativo. La gasista explicó que tomaba la decisión “ante los sucesos sociales y políticos que están ocurriendo en las últimas semanas en Cataluña” y matizó que se trataba de una medida temporal. Su valor en bolsa es de 18.000 millones de euros.
NEXUS. La comercializadora de electricidad y gas natural Nexus Energía se mudó a a Madrid. El grupo, que logró una facturación de 835 millones de euros y un ebitda de 4,5 millones en 2016, explicó que la decisión sería definitiva en función de “la evolución del escenario”.
AGBAR. El consejo de administración del grupo Suez, al que pertenece la Sociedad General de Aguas de Barcelona (SGAB), del que depende Agbar, decidió irse a Madrid «de forma temporal».
Otras empresas
LA BRUIXA D’OR. La administración de lotería ‘La Bruixa d’Or‘ de Sort (Lleida), la que más factura de España, salió de Cataluña el 17 de octubre. «Amo Cataluña y me siento español. No estoy a favor de la independencia», explicó días antes en redes sociales su propietario, Xavier Gabriel. La empresa trasladó la sede social a Navarra y la fiscal a Madrid.
ABERTIS. La concesionaria eligió las oficinas del Paseo de la Castellana de Madrid. El grupo que preside Salvador Alemany reunió a su consejo de administración a las tres de la tarde del lunes 9 de octubre para debatir su cambio de sede ante la posibilidad de que un día después se proclamara la independencia. Detrás de esta junta se celebró la de Cellnex, en la que se decidió lo mismo –comparten a Francisco Reynés en las direcciones y tiene a Abertis como principal accionista (34%)–.
MRW. El grupo de mensajería urgente decidió cambiar su sede de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) a Valencia. La firma, propiedad de la familia Corrales, nació en 1977 y es actualmente una líder del sector a nivel nacional e internacional. Asimismo, realiza una media de 45 millones de envíos anuales, cuenta con más de 10.000 personas en más de 550 franquicias y con 47 plataformas logísticas repartidas entre Andorra, España, Gibraltar y Portugal.
PIRELLI. La filial española de la marca de neumáticos puso rumbo a Valencia el 5 de diciembre. Tramitó esta operación la misma semana que la cárnica Argal, que movió su sede de Lleida a Zaragoza; la marca de hoteles Axel, que se pasó a Madrid; o el grupo de consumo AC Marca, propietaria de Norit, Lactovit y Cey, que también hizo las maletas hacia la capital.
PLANETA. Su salida hacia la capital se comunicó minutos después de escuchar la proclamación e inmediata suspensión de la DUI. El conglomerado multimedia presidido por José Crehueras facturó 2.363 millones de euros y ha tenido su fundación en Barcelona desde 1949.
DOGI. La textil de la familia Domènech anunció el jueves 8 de octubre su marcha a Madrid para “optimizar sus operaciones y la relación con sus inversores». El mercado le premió con una subida del 6,9%. Vale en bolsa 260 millones de euros.
APPLUS. El grupo de inspección, ensayos y certificación acordó por unanimidad el cambio de su sede social la tarde del 11 de octubre. Applus contaba en ese momento entre sus asesores con David Madí, uno de los hombres clave del procés y que fue expulsado recientemente tras conocerse su implicación en un juicio por facturas falsas.