Podemos y nacionalistas dictan los 10 mandamientos a Sánchez
Pablo Iglesias y Pere Aragonès transmiten sus demandas a Sánchez: desde más impuestos hasta retomar el diálogo con el independentismo
Podemos y los nacionalistas tienden la mano a Pedro Sánchez, a cambio de que escuche y asienta ante su lista de diez mandamientos para la legislatura que empezará a coger forma en las próximas semanas. Piden, entre otras cosas, más impuestos, un esfuerzo para entablar el diálogo y acogerse a la declaración de Pedralbes.
Pese a que, según el CIS, un gobierno del PSOE y Podemos es la opción preferida entre los españoles, los socialistas rechazan hablar de una «coalición». El partido de Sánchez sí que abre la puerta a incorporar a miembros de Podemos al Gobierno, pero bajo otro concepto que no sea el de coalición.
Pablo Iglesias insistió, este viernes, en que un Ejecutivo con miembros socialistas y de su formación «sería bueno para España, para las empresas y para Cataluña», y transmitió su lista de mandamientos para dar seguimiento a la agenda social puesta en marcha junto con Sánchez en los últimos meses.
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Podemos pide más impuestos
Iglesias exige a Sánchez derogar la reforma laboral de 2012 «para crear un marco laboral de contratos indefinidos» y «una prestación mínima garantizada de 600 euros al mes», además de una «semana laboral de 34 horas sin reducción salarial» Estas tres reivindicaciones las exclamó ante empresarios catalanes, el viernes.
Los preceptos de Unidas Podemos también pasan por la reducción del impuesto de sociedades del 25% al 23% para pymes que facturen menos de un millón de dólares, así como subidas del IRPF para los que ganen más de 100.000 euros, impuesto de patrimonio y un impuesto a la banca.
Iglesias afeó a Iglesias acercarse a Ciudadanos en los últimos días e insistió en que es fundamental pactar un programa y cómo desarrollarlo, asegurando que no será un problema abordar qué ministerios asume cada uno. «¿La cuestión de los ministerios? Esto es lo de menos», aseguró Iglesias.
«No se trata de pedir sillones, sino de comprometerse con la necesidad de reformas, y eso es lo que nosotros queremos: empujar esas reformas desde el Gobierno», agregó.
El independentismo recuerda la declaración de Pedralbes
Además de los siete mandamientos del líder de la formación morada, a Sánchez le llegan otras tres exigencias desde los frentes nacionalistas. La primera de ellas se transmite desde el Govern de la Generalitat, pues el vicepresidente catalán y conseller de Economía, Pere Aragonès, pidió al PSOE retomar el diálogo y acogerse a lo pactado en Pedralbes.
Los gobiernos catalán y español se reunieron en el Palau de Pedralbes el 20 de diciembre de 2018, donde firmaron una declaración que, según Aragonès, es un instrumento para trabajar en una solución política para el conflicto catalán. Los gobiernos catalán y español tienen la «obligación de vencer el inmovilismo, salir de la zona de confort», dijo.
«Los independentistas estamos dispuestos a salir (de la zona de confort), yo lo estoy, y creo que recíprocamente el Gobierno del Estado también lo tendría que hacer», manifestó. Según Aragonès, Gobierno y Generalitat tienen «la obligación» de resolver políticamente un problema que es político, ya que las soluciones penales «no lo harán».
Diálogo, salir de la zona de confort y, claro, un nuevo modelo de financiación. La triada de demandas del nacionalismo acaba con la negociación de otro modelo de financiación, pero Aragonès advirtió de que «no puede ser sustitutorio» de la negociación política para encontrar una «salida democráctica» al conflicto catalán.
