Sánchez mete el miedo a elecciones a sus ministros para cerrar filas
El presidente pide a los ministros "unidad" para afrontar los Presupuestos y así evitar el adelanto electoral para 2021 que, según él, augura Pablo Casado
Pedro Sánchez llegó al primer consejo de ministros después de sus vacaciones de verano con un aviso a su equipo de Gobierno: el Partido Popular trabaja con el escenario de un adelanto electoral en 2021. Estas serían las previsiones de Pablo Casado, según el jefe del Ejecutivo, que ha aprovechado esta información para hacer un llamamiento a la «unidad» entre los dirigentes del PSOE y Unidas Podemos para que los augurios de los populares no lleguen a cumplirse.
Así lo han confirmado varios ministros en declaraciones recogidas este miércoles por El País. Vienen «meses muy duros», habría transmitido Sánchez en la reunión de este martes, en la que también explicó la oferta a las comunidades autónomas de declarar por cuenta propia el estado de alarma si lo consideran necesario, la cual después anunció en una rueda de prensa. Al igual que en esa comparecencia, el líder socialista aseguró que la coalición está intacta.
La información que Sánchez dice manejar del PP pasa por una negociación fallida de los Presupuestos Generales del Estado y el fin prematuro de la legislatura. El presidente del Gobierno ha defendido que no será así, porque está convencido de que las cuentas finalmente serán aprobadas, pese a que echa de menos certezas en torno a si para ese acometido se asociará con Esquerra Republicana de Catalunya o Ciudadanos.
En público, Sánchez ha apelado nuevamente a Casado para conseguir el apoyo a las cuentas, algo que desde Génova califican casi de quimera. Los recientes cambios del líder del PP en el partido se acompañaron de rumores en clave de la aproximación al Gobierno, en parte alimentados por la exportavoz parlamentaria Cayetana Álvarez de Toledo. Pero los populares han matizado todas estas conjeturas y han recordado que lideran la oposición.
Fuentes del PP han difundido en algunos medios de comunicación tanto la convicción de que Sánchez logrará aprobar sus primeros Presupuestos con la ayuda del PNV y Cs, como la teoría de que puede haber elecciones en 2021. Estas fuentes se contradicen sobre la hoja de ruta de Casado, pero eso no ha evitado que el presidente del Gobierno se hiciese eco frente a sus ministros del presunto calendario de los populares que marca elecciones el próximo año.
Enfado con Podemos
El mensaje de «unidad» que ha querido enviar Sánchez a su Gobierno se vio interrumpido por las declaraciones del grupo parlamentario de Unidas Podemos a la prensa. Mientras se reunía el consejo de ministros, los morados cargaron contra la titular de Educación, Isabel Celaá, por su «ausencia de liderazgo» ante la vuelta a clases. Una queja que ni Pablo Iglesias ni los demás titulares de Podemos trasladaron en la reunión, y que enfadó a los socialistas.
Según cuenta también El País, los dirigentes del PSOE se enteraron de las críticas de Podemos al acabar el consejo de ministros y afearon el conato de división en un momento en el que el presidente les ha pedido «unidad». No obstante, el ambiente no llegó a ser tan tenso como en la última reunión, a principios de agosto, cuando Iglesias hizo saber a Sánchez su malestar por no haberle informado de la salida de España del Rey emérito Juan Carlos I.
No obstante, tanto socialistas como morados aseguran que la coalición está blindada y preparada para hacer frente a la batería de ataques de la oposición que le esperan a partir de septiembre, en medio de una crisis económica que obligará a dar pasos arriesgados. Si finalmente salen adelante los Presupuestos, Sánchez e Iglesias se quitarán un peso de encima y se dirán fuertes para llegar al final de la legislatura, según sus planes.
