Pedro Sánchez asume el lenguaje independentista para ser presidente
Retorno a Pedralbes: el líder socialista afirma que los "conflictos políticos" requieren diálogo dentro de la "seguridad jurídica"
Pedro Sánchez ha situado el debate nuevamente en lo recogido en la declaración de Pedralbes que firmó junto con Quim Torra en diciembre de 2018. Consultado sobre el avance de las negociaciones ante la investidura, el presidente del Gobierno en funciones afirmó este viernes que los «conflictos políticos» requieren diálogo «en el marco de la seguridad jurídica que emana de las leyes democráticas», un lenguaje que sitúa el desafío catalán en los mismos términos que en aquel encuentro.
La concepción de un «conflicto político» que requiere diálogo dentro de la «seguridad jurídica» era interpretado por el Ejecutivo socialista como un punto de partida respetuoso de la Constitución, mientras que el Govern de la Generalitat lo interpretó como una ventana que permitía abrir una brecha para «superar» la carta magna. Sánchez, este viernes, en plena negociación con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), ha apelado a una «seguridad jurídica que emana de las leyes democráticas».
En una rueda de prensa en Bruselas, el presidente en funciones ha dado continuidad al relato del vicepresidente del Govern, el republicano Pere Aragonès, que en septiembre pasado apostó por abrir una mesa de diálogo «sin vetos» a los temas que se pueden tratar, garantías de cumplimiento y votación en un referéndum, que son parte también del paquete negociador de ERC con el PSOE para buscar un punto de encuentro que facilite la investidura de Sánchez, que requiere de su abstención.
Sánchez ha evitado poner fecha a la sesión de investidura y precisar si podrá ser antes del 31 de diciembre, mientras desde la Moncloa insisten en que las negociaciones con ERC «avanzan». El secretario general del PSOE ha explicado que su intención es cumplir con lo previsto en el Estatut catalán, que prevé que las inversiones en la comunidad sean equivalentes a la aportación de la comunidad autónoma al PIB español, a la vez que ha apostado por la reforma de la financiación autonómica.
Quim Torra y Oriol Junqueras
Las diferencias con respecto al diálogo entre el Gobierno central y el autonómico persisten. Tras anunciar Sánchez una ronda de contactos con los presidentes autonómicos, Torra ha desdeñado sus intenciones. «Me llama la atención que quien reclama diálogo critique el diálogo con él y con el resto de presidentes autonómicos», ha lamentado el socialista, añadiendo que su voluntad de acercamiento es «inclusiva y no excluyente».
Sobre la situación judicial de Oriol Junqueras, en vísperas de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se pronuncie, el próximo jueves, sobre el alcance de su inmunidad tras ser elegido en los comicios europeos de mayo, Sánchez ha afirmado que «siempre respetamos las resoluciones judiciales y la vamos a respetar». El presidente en funciones ha dejado claro que no ha tenido ninguna conversación sobre este asunto con el presidente de la Eurocámara, David Sassoli.