Francia, Italia, Grecia: ¿cómo controlan la llegada de turistas?
Varios países de Europa ya realizan test de forma sistemática para evitar la importanción de casos del exterior y proteger su sector turístico más afectado
El descontrol de los rebrotes en España y la falta de medidas más estrictas de comprobación en los aeropuertos de manera centralizada están llevando al país a una situación crítica respecto al turismo, que termina eligiendo otros destinos alternativos. Hasta el día de hoy se han sobrepasado los 280.000 casos y los 300 brotes.
Otros países, como Francia, Grecia o Italia, controlan más los accesos en los aeropuertos con medidas más exhaustivas a los turistas que llegan al país (test, cuarentenas,…), que están resultando efectivas.
Francia, por ejemplo, evita la importación de casos de Covid-19 realizando de forma sistemática pruebas diagnósticas de Covid-19 a los pasajeros que llegan a sus aeropuertos procedentes de los países de “riesgo”, es decir, aquellos con una “mayor circulación” del virus.
Concretamente, el país ha realizado una lista de 16 países «rojos», cuyos ciudadanos deben pasar por la prueba de coronavirus. Esta se realiza antes de su viaje o una vez que llegan a los aeropuertos franceses. Estados Unidos, Brasil, Panamá y Perú están entre estos países más afectados por el virus.
El país francés está viviendo —a la par que España— un aumento de los casos en las últimas semanas que ha llegado a sobrepasar los 1.000 diarios. Esto ha llevado a las autoridades a lanzar mensajes de alerta a la población por una relajación en las medidas de seguridad. Desde el comienzo de la desescalada en mayo, se han identificado cerca de 600 focos, aunque solo un centenar siguen estando supervisados porque el resto se consideran cerrados. Desde el inicio de la crisis han habido 183.804 contagios en el país vecino y 30.223 fallecimientos.
En algunas regiones italianas —como la región de Lazio— también han decidido hacer test de coronavirus a los pasajeros de algunas zonas de riesgo, como Bangladesh. Además de las pruebas, todos los turistas que llegan al país fuera de la zona Schengen deben guardar 14 días de cuarentena. La sanidad del país ha planteado también hacer test a todos los turistas a su llegada.
El país transalpino ha registrado más de 600 brotes desde que se inició la desescalada. En Bolonia se identificó el pasado jueves un brote en una residencia de ancianos, con 21 enfermos. También el jueves se descubrió un nuevo foco en Molise (centro), después de que siete venezolanos de una misma familia dieran positivo. Desde el inicio de la pandemia se han registrado 246.488 contagios y 35.123 fallecimientos en Italia.
Pruebas de detección también en Grecia
Grecia, a pesar de no sufrir brotes como tal y de tener una incidenca baja del virus —4.279 contagios y 203 muertes desde el inicio de la pandemia— ha decidido imponer pruebas de detección del virus también a aquellos lugares que considera que tienen una incidencia alta (como Reino Unido o Suecia); y en su única frontera terrestre para todos los que quieran entrar (la de Promachonas, en la linde con Bulgaria).
Con esta medida, el Gobierno del conservador Kyriakos Mitstotakis pretende hacer frente al aumento de casos importados, sin por ello tener que restringir el turismo, el gran motor de su economía. Desde el comienzo de la pandemia, han sido detectados en Grecia 3.803 casos de coronavirus y 193 muertes.
Sin embargo, por el momento, en España las medidas están más rejaladas —sin test ni cuarentenas por países—. Desde que se abrieron fronteras el pasado 22 de junio, las medidas se quedan en camaras de control de temperatura en aeropuertos o relleno de formularios.
Por ello, el consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha vuelto a solicitar que se exijan pruebas de diagnóstico PCR en origen, «con 48 o 72 horas previas al vuelo», a los viajeros que entren por el aeropuerto de Barajas. Falta por ver si llegan las medidas a nivel nacional o si cada aeropuerto y comunidad autónoma toma sus propias decisiones.