El temor al boicot de Cayetana pone a prueba el liderazgo de Casado
El PP se prepara para el peor escenario: que Vox haga candidata de la moción de censura a Cayetana Álvarez de Toledo
La destitución de Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz del Partido Popular en el Congreso se esperaba en la calle Génova desde hace días, pero lo que pocos tenían previsto era que la diputada ofreciese inmediatamente después una rueda de prensa para hacer pública su oposición total a Pablo Casado. La sed de venganza que la marquesa de Casa Fuerte dejó al descubierto con sus declaraciones ha puesto en modo alarma al entorno del líder popular, que pone a prueba su liderazgo iniciando una «nueva etapa política» con un cambio de fachada parlamentaria y con temor ante los planes secretos de su exportavoz.
No se esperan sorpresas este jueves en la reunión de la junta directiva del PP que Casado convocó de forma urgente este pasado lunes tras su estrepitosa despedida de Álvarez de Toledo. La nueva portavoz, a propuesta del líder de la formación, será Cuca Gamarra, la vicesecretaria general de política social que encabezó la comitiva del PP en la manifestación del 8M. El alcalde madrileño José Luis Martínez-Almeida será el nuevo portavoz nacional, en relevo de Pablo Montesinos, que hace tan solo una semana defendía que Álvarez de Toledo era una «magnífica portavoz» y que realizaba un trabajo «imprescindible».
Otro cambio que han confirmado fuentes del PP y que Casado propondrá a la junta directiva este jueves es que Ana Pastor se haga con la vicesecretaría de política social que dejará vacante Gamarra. La expresidenta del Congreso y exministra de Sanidad ha cobrado protagonismo durante la pandemia al elegirle Casado como portavoz popular en la comisión para la reconstrucción económica y social, donde cerró con el Gobierno acuerdos de sanidad y relativos a la Unión Europea. De hecho, su fichaje para la comisión —impulsada por el PP— habría alimentado la tensión con la portavoz, que quedó al margen de las negociaciones.
Aunque no serían necesariamente cambios sorprendentes, hay fuentes populares que esperan más movimientos de Casado este jueves. En jaque está la continuidad de Alfredo Timermans, hasta ahora jefe de gabinete de Álvarez de Toledo y, al igual que la ahora exportavoz, miembro de la FAES de José María Aznar. Hay que recordar que el conflicto entre Cayetana y Casado se disparó, en parte, por el cese de Gabriel Elorriaga, asesor nombrado por la dirigente popular. La diputada Pilar Marcos también ha entrado en las quinielas de los movimientos que puede hacer el líder del PP, dada su estrecha relación con Álvarez de Toledo.
El futuro inmediato de Cayetana en el Congreso
Con estos cambios, se despojaría de responsabilidades al sector crítico de Teodoro García Egea, el número dos del PP, quien ha sentido vulnerada su autoridad ante la autonomía con la que solía operar Álvarez de Toledo en el Congreso, algo que la misma exportavoz confirmó en su controvertida rueda de prensa del lunes. Pasada la página de hacer efectiva la remodelación, será el momento de entrar en el próximo capítulo: el de la paranoia por la dimensión de la venganza de los cesados. ¿Qué va a hacer Cayetana?, se preguntan los unos a los otros en la sede del PP, donde ya tienen varias teorías y se preparan para el peor escenario.
La exportavoz aseguró el pasado lunes que aún no había tomado una decisión respecto de qué hará a continuación. No confirmó ni negó su salida del PP o una eventual renuncia al acta de diputada. Eso sí, sus declaraciones tras informarle el partido de su cese como portavoz han llevado a la fácil conclusión de que no se siente cómoda en el PP de Casado, dejando la puerta abierta a su dimisión. Pero fuentes populares dicen estar convencidas de que Álvarez de Toledo seguirá en el Congreso, así sea como diputada independiente, en otro partido o bien liderando el bloque anticasadista y afín a las FAES dentro de la misma formación.
Cualquier conjetura sobre su salto a Vox —cuyos dirigentes se deshacen en halagos hacia Cayetana— es desestimada por haber sido la marquesa muy dura con el partido de Santiago Abascal en el pasado, comparándole incluso con Podemos. La hipótesis de una aproximación a Ciudadanos ha sido señalada después de que el vicepresidente naranja de Castilla y León, Francisco Egea, dijese que le provoca «tristeza» su destitución y que no le «importaría» compartir espacio político con la dirigente. Cayetana votó a Cs cuando abandonó el PP en 2015, ha defendido la coalición España Suma y suele hablar maravillas de Inés Arrimadas.
Pero, más que posibles saltos, lo que verdaderamente preocupa al PP es la moción de censura que Vox presentará en septiembre y para la que Abascal busca una candidatura. Los populares se burlaron de la iniciativa desde el primer momento y anunciaron su rechazo. Pero hay quien habla, y desde antes de su destitución como portavoz, de la supuesta apuesta de Abascal para que Álvarez de Toledo sea la candidata a sustituir a Pedro Sánchez. Y es que, ante el «no» del PP, Vox recuperó en julio un tuit en el que Cayetana defendía una moción de censura a Quim Torra para ganar, no «numéricamente», sino en «autoridad política y moral».
Vox asegura que ni Abascal ni Casado serán en ningún caso candidatos a la moción de censura. Lo suyo, alega, sería buscar a un «profesional de prestigio» que pueda «concitar consensos» y ser del agrado del PP y Cs. La formación también opina que la imputación a Podemos debería hacer recapacitar a Casado sobre su negativa a sumarse a la moción. Y entre estas declaraciones y su adulación a Álvarez de Toledo, que tiene un pie fuera del PP pero se resiste a abandonar el Congreso, se han encendido todas las alarmas en Génova. ¿Será esta la venganza de Cayetana?, dudan, con una cuenta atrás para septiembre que no cesa.