Colau se echa en brazos de Trias para sacar las cuentas
Colau consigue superar el debate en comisión del presupuesto gracias a la reserva de voto de todos los grupos con la única excepción de los populares
La alcaldesa Ada Colau cede ante Xavier Trias en guarderías, top manta y transporte para que el grupo demócrata (Pdecat) facilite la aprobación de los presupuestos municipales mediante su abstención. El pacto entre Colau y Trias, entre comuns y exconvergentes, quedó en evidencia en la comisión de economía de este viernes en la que se ventilaron las alegaciones a las cuentas. Colau rompió con los socialistas de Jaume Collboni en noviembre y ahora se echa en los brazos de Trias. El republicano Alfred Bosch también está por la tarea de facilitarle los presupuestos aunque exponga mayores reticencias.
Colau superó este viernes el trámite de las alegaciones a los presupuestos en la comisión municipal de economía gracias a la reserva de voto de todos los grupos de la oposición con la única excepción del PP. Se han registrado once votos a favor por parte del equipo de gobierno de Barcelona en Comú, tres en contra de los populares y 27 reservas de voto del resto de grupos. Precisamente, las reservas de voto trasladan la votación definitiva de los presupuestos al pleno del 26 de enero.
La portavoz del grupo demócrata, Sonia Recasens, mostró su “desconfianza” con el gobierno de Colau, pero eso no le impidió reconocer que se plantean la abstención en los presupuestos. A cambio de permitir la aprobación de las cuentas, Colau se olvidará de la unión del tranvía por la Diagonal, una de sus grandes promesas, y perseguirá a los manteros. Hasta ahora los ha protegido. Recasens recordó que si quieren su abstención deberán reforzar la Guardia Urbana y lanzar una campaña de información para concienciar a los ciudadanos de que pueden ser multados si compran en el top manta.
El republicano Alfred Bosh indicó que ERC está entre el no y la abstención. Se mostró dispuesto a negociar hasta el último minuto. Desde Ciudadanos, PSC y PP se da por hecho de que se decantarán por la abstención después de que los comuns, la formación liderada por Colau, hicieron los propio para posibilitar que el parlamento catalán tenga un presidente republicano.
Colau ha pasado de gobernar con el PSC a apoyarse en el Pdecat
En su papel de socios despechados, la socialista Montserrat Ballarín recordó a Colau que “ha pasado de un gobierno de izquierdas a un pacto con Convergència” precisamente la semana en que ha trascendido la sentencia condenatoria por el caso Palau. Insistió en que “ha preferido pactar con Convergència para enterrar el tranvía por la Diagonal que hacerlo con el PSC para congelar las tarifas del transporte público”. Los socialistas calculan el importe de los acuerdos sellados entre Colau y Trias en 4,8 millones de euros, un o,2% del presupuesto. En su opinión, detrás del pacto hay un intercambio de favores relacionado con el conflicto político catalán.
Esta es la tesis de Carina Mejías, la líder municipal de Ciudadanos: con su abstención, el grupo demócrata y republicano devuelven los “favores” que les ha hecho Colau. Xavier Mulleras, del PP, subrayó que “los independentistas ahora tienen un jugador más” que es la alcaldesa Colau.
El voto del concejal no adscrito Gerard Ardanuy, de Demòcrates de Catalunya (la escisión independentista de Unió), puede ser clave en el pleno del próximo viernes. Hasta ahora no se ha definido.
Tal como recordó el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, los presupustos se aprobarán, ya sea en el pleno del próximo viernes o mediante una cuestión de confianza. Colau no quiere someterse por segunda vez a este trámite. No tiene ninguna duda que lo superaría por la imposibilidad que la oposición articule un candidato alternativo pero se visualizaría de nuevo su soledad. La alcaldesa se está empleando a fondo para que los independenti