El Parlament obliga a Mas a crear un fondo de contingencia por ATLL
Mas-Colell y Vila deberán dar por segunda ocasión explicaciones ante el hemiciclo sobre el impacto económico de la polémica adjudicación
El Parlament de Cataluña ha obligado a Artur Mas a mover ficha en la guerra del agua. El hemiciclo ha aprobado por unanimidad varias mociones que fuerzan al Govern a prepararse para apartar a Acciona de la gestión de Aigües Ter Llobregat (ATLL).
La más destacada es la creación de un fondo de contingencia para hacer frente a las “eventuales consecuencias económicas de las resoluciones judiciales”, reza el escrito presentado por el Partido Popular y aprobada por mayoría (ICV-EUiA y las CUP han votado en contra).
Tribunal Laboral de Recursos Contractuales
También ha prosperado, esta vez por unanimidad, la propuesta de los populares de garantizar que la eventual resolución del contrato vigente no afecte ni a los casi cuatro millones de personas a las que da servicio la compañía –Barcelona y su área de influencia– ni a los empleados de ATLL.
El Govern se ha blindado, con el apoyo de ERC, ante el principal envite de la oposición: obligar al Ejecutivo a cumplir las resoluciones del Tribunal Laboral de Recursos Contractuales. Mas se resiste a dar su brazo a torcer y mantiene que puede hacer oídos sordos a las decisiones de este órgano cuyas facultades están decretadas y amparadas por la legislación europea y tiene carácter ejecutivo, tal y como le han recordado al President tanto el TSJC como el Tribunal Supremo.
Comparecencia de Vila y Mas-Colell
La guerra del agua propiciará que, por segunda ocasión, los consejeros de Territori i Sostenibilitat, Santi Vila, y el de Economia, Andreu Mas-Colell, deban dar explicaciones al Parlament sobre el “impacto económico de la adjudicación y la posible indemnización que la Generalitat deberá pagar a las compañías implicadas”, indica la moción presentada por Ciutadans.
El documento ha sido aprobado por unanimidad. Antes, se pactó con CiU.