El entorno de Sánchez lanza tres alternativas para la investidura
Ninguna de las alternativas que plantea el entorno de Pedro Sánchez pasa por un acuerdo con Unidas Podemos o Ciudadanos
El pasado 11 de julio, Pedro Sánchez ya se imaginaba lo que iba a suceder en el pleno de investidura en el Congreso de los Diputados. Dos semanas antes de perder la votación y de protagonizar una dramática seguidilla de negociaciones desafortunadas con Unidas Podemos –incluso desde la misma cámara–, el presidente del Gobierno de funciones señaló que el problema del bloqueo político en España aguarda una solución que rebasa las posibilidades de la propia investidura.
El líder del PSOE reclamó entonces reformar el artículo 99 de la Constitución, en vista de que «no funciona», según dijo en una entrevista de TVE. Sánchez ofreció a los demás partidos su «primer acuerdo de país»: buscar, entre todos, «un mecanismo que permita una investidura» y «que impida coaliciones negativas que, precisamente, pueden abocar a la repetición sistemática electoral», como podría suceder este mismo año. Sánchez repitió esta idea durante su discurso de investidura.
Sánchez se pelea con el modelo electoral proporcional
La propuesta que Sánchez trasladó a Podemos, pero también al Partido Popular y a Ciudadanos, era «garantizar la gobernabilidad». «Pongamos encima de la mesa, como primera medida, la reforma constitucional del artículo 99, para que esto sea la última vez que ocurra en todo proceso de investidura futura», dijo en aquella entrevista el presidente en funciones. Ahora, tras la investidura fallida, su entorno se enamora cada vez más de la idea y de ella desprende tres escenarios para la investidura.
El presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), José Félix Tezanos, en un artículo en la revista de la que es director, Temas, profundiza en tres alternativas al sistema proporcional que durante cuatro décadas ha ayudado a conformar gobiernos. Todo ello, sin matizar el imposible que supone reunir una mayoría cualificada –necesaria para reformas en el bloque constitucional– en un contexto en el que el candidato a la investidura más votado –Sánchez– obtuvo apenas 124 votos a favor.
Lo cierto es que el entorno del secretario general del PSOE está peleado con el artículo 99 y con el modelo electoral proporcional de la democracia española, y cada semana que pasa desde las elecciones del 28-A el malestar es más evidente. «El problema no se limita únicamente a la mera elección formal del Presidente del Gobierno, sino que concierne a toda la gobernabilidad», afirmó Tezanos. «Frente a estos problemas, lógicamente, no hay una única solución, sino varias posibilidades», añadió.
Las tres alternativas de Tezanos para la investidura
Después de explicar las razones por las que no cree válido el sistema proporcional para los tiempos que corren, Tezanos –conocido informalmente como el chef de la cocina del CIS, por los cambios implementados en las encuestas que tienden a favorecer al PSOE– ofrece tres caminos para que las próximas sesiones de investidura no sean tan lacerantes para los electores como las tres más recientes y como podría terminar siendo la de septiembre si cesa el fuego en la guerra PSOE-Podemos.
La alternativa «más sencilla» es la vía de Grecia, donde el partido con más votos automáticamente se hace con 50 escaños adicionales que vendrían espléndidos en la investidura, sin importar si la diferencia con respecto a la segunda fuerza es de tan solo un voto. Eso sí, el mínimo de sufragios para tener representación es el 3%. Por ejemplo, tras el 28-A el PSOE se hizo con 123 escaños, y con una reforma como esta habría llegado a los 173, con lo que solo necesitaría negociar tres apoyos para abrirse paso a la Moncloa.
Si esto no gusta a los españoles ni a sus partidos con representación (que son los que deben votar para conseguir alguno de estos cambios), Tezanos propone un plan B: «cambiar los modelos de investidura de los presidentes, de forma que en una segunda vuelta se garantice que es elegido el candidato o candidata que tenga más votos positivos, sin considerar los negativos y las abstenciones». En ese caso, habría ganado el PSOE, aunque una candidatura apoyada por PP, Cs y Vox también podría haber tenido más escaños a favor.
«Otra fórmula es, simplemente, prescindir del requisito inicial del voto mayoritario para investir Presidente del Gobierno», escribió Tezanos. Bajo este sistema, «las decisiones se pueden tomar por las mayorías realmente existentes; es decir, por el voto de la mayoría-minoritaria». Y, en ese caso, el escenario también beneficia al PSOE en su forma actual, sin una mayoría pero siendo la formación que más escaños tiene a su nombre.
Tezanos lleva al CIS la reforma constitucional
Un día después de la publicación del artículo de Tezanos, el CIS publicó su barómetro correspondiente a julio, que da al PSOE el liderazgo en la intención de voto y prevé una caída de Ciudadanos en los próximos comicios.
Este barómetro también recoge una pregunta sobre este tema que tanto interesa a Tezanos y al entorno de Sánchez. «¿Cree usted que habría que reformar la Constitución española, para prescindir del requisito de la mayoría absoluta, para elegir el presidente del Gobierno en el Parlamento español?«, preguntaron los encuestadores a inicio de julio.
Casi 3.000 personas respondieron, de las cuales el 49,9% afirmó que habría que reformar la Constitución para prescindir de este requisito, mientras que un 27,1% dijo que no habría que reformarla. El 20,4% de los entrevistados admitió que no sabía, y el 2,6% decidió no contestar.