El coronavirus sacude las UCI: 10 comunidades superan el 25% de ocupación
La Rioja y Aragón ya tienen ocupadas más de la mitas de las plazas de las Unidades de Cuidados Intensivos por pacientes graves de Covid-19
La segunda ola de coronavirus está poniendo en jaque el sistema de salud en toda España. La presión hospitalaria ha forzado a las comunidades autónomas a incrementar sus restricciones para evitar un colapso de los hospitales como el que se produjo en la primavera. Diez regiones han alcanzado ya una ocupación del 25% en las camas de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), la última esperanza para los pacientes más graves. Dos de ellas tienen más de la mitad de sus plazas utilizadas por pacientes de Covid-19.
Antes de comenzar el fin de semana había un total de 2.863 enfermos con un cuadro grave de la enfermedad hospitalizados en la UCI. Representan casi un 30% de las plazas disponibles en todo el país, que deberá decidir si pone en marcha un confinamiento domiciliario para evitar que la crisis sanitaria se descontrole. En apenas dos semanas, estas unidades han soportado un aumento de 832 pacientes y la ocupación se ha disparado más de siete puntos porcentuales.
La Rioja tiene el récord con un 55% de ocupación en la UCI
La Rioja es la comunidad autónoma que mayor ocupación ha alcanzado en las Unidades de Cuidados Intensivos. El 55% de las camas alojan a pacientes de coronavirus, después de que la curva de contagios se haya disparado. Con apenas 33 pacientes ingresados en estas áreas, el sistema de salud de la región muestra su escasa capacidad y parece abocado a pedir ayuda externa si la situación no se normaliza en las próximas semanas.
El Gobierno autonómico fue uno de los primeros en tomar medidas para frenar la nueva ola de contagios de Covid-19. Al cierre perimetral de la región, se han sumado medidas excepcionales en puntos como Logroño o Arnedo que han cerrado todos los establecimientos de hostelería con el objetivo de evitar la expansión del virus.
Aragón supera la barrera del 50% de ocupación
La crisis sanitaria en Aragón se ha ido acrecentando por momentos hasta ponerla en el centro del foco de la pandemia en España. Con 114 pacientes graves ingresados en la UCI, la autonomía ya supera la barrera del 50% de ocupación. Son casi ocho puntos más que hace dos semanas, cuando empezaron a ponerse en marcha las primeras medidas.
El Gobierno de Javier Lambán ha ido endureciendo paulatinamente las restricciones en los últimos días. Los bares y restaurantes solo pueden operar en las terrazas, pero deben cerrar sus puertas a las ocho de la tarde, lo que deja prácticamente paralizada la hostelería. Centros deportivos interiores y locales de apuestas también están clausurados.
Castilla y León, Cataluña y Navarra ya han alcanzado el 40%
La situación también es preocupante en tres comunidades que han superado el 40% de pacientes de coronavirus en las UCI. Dos de cada cinco camas de las unidades han sido ocupadas por enfermos de la pandemia en Castilla y León, Cataluña y Navarra, poniendo en serios problemas el tratamiento de otras patologías.
Castilla y León ha movido hoy una nueva ficha y ha decidido prolongar el cierre de sus fronteras hasta el próximo 23 de noviembre para limitar al máximo la movilidad de sus ciudadanos. Tienen 215 pacientes con un cuadro grave de coronavirus en los hospitales que representan el 42% de las plazas disponibles. Son 54 más que hace dos semanas.
Cataluña también ha aumentado sus restricciones esta semana tras alcanzar una ocupación en las UCI del 42%. La Generalitat mantendrá el toque de queda al menos hasta el próximo 23 de noviembre. Además de prolongar el cierre de la hostelería, las actividades culturales o los comercios de más de 800 metros cuadrados.
Por su parte, Navarra cuenta con 60 pacientes graves en los hospitales que representan un 40% de las plazas disponibles. El Gobierno de María Chivite también fue uno de los primeros en sumarse a la corriente de confinamientos perimetrales y del cierre de la hostelería para tratar de contener la pandemia.
La presión hospitalaria de Asturias se dispara por las nubes
Asturias ha experimentado uno de los mayores incrementos de la presión hospitalaria en las últimas dos semanas. Ha pasado de ser un territorio con una situación relativamente controlada a alcanzar cifras peligrosas que la sitúan cerca de la primera ola. En 15 días la ocupación de la UCI ha pasado del 15% al 39% hasta llegar a un total de 111 enfermos graves.
El Gobierno asturiano fue uno de los que realizó una petición expresa de llevar a cabo un confinamiento domiciliario total para frenar los contagios de la Covid-19. Una medida que fue descartada inicialmente en la reunión del Consejo Interterritorial de Salud pero que deberá evaluarse de nuevo esta semana.
Madrid reduce su ocupación pero sigue en un 37%
La Comunidad de Madrid ha logrado reducir ligeramente la presión hospitalaria de las Unidades de Cuidados Intensivos en las últimas dos semanas en casi dos puntos hasta situarse en el 37%. Hay 469 pacientes graves todavía en estas áreas.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso saca pecho de su gestión de la pandemia e incluso el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha reconocido el éxito de las restricciones. Sin embargo, los profesionales sanitarios del sector siguen arrojando dudas sobre la falta de personal para hacer frente a la pandemia.
Andalucía, Castilla La Mancha y País Vasco se cuelan en la lista.
Territorios que hace dos semanas no eran el foco de preocupación, ya han empezado a incrementar notablemente sus ingresos en cuidados intensivos. Andalucía, Castilla La Mancha y País Vasco superan ya el 27% de ocupación.
Andalucía cuenta con 454 pacientes graves ingresados. Son 203 más que hace 14 días. El incremento ha llevado al presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, a decretar hoy nuevas restricciones. Todas las actividades no esenciales deberán cerrar antes de las seis de la tarde. Mientras que el toque de queda se adelanta a las diez de la noche.
En el País Vasco hay 98 enfermos graves y la ocupación se ha disparado un 5% en las últimas dos semanas. El lehendakari, Íñigo Urkulli, también ha declarado el cerrojazo de la hostelería y ha obligado a los vecinos a recluirse en sus casas pasadas las diez de la noche.
Castilla La Mancha suma 109 pacientes en las Unidades de Cuidados Intensivos. Son 23 más que hace 14 días. El Gobierno autonómico ha declarado el nivel dos de alerta por coronavirus y ha reducido el aforo en bares, restaurantes, cines y teatros. Las visitas a las residencias de la tercera edad se han suspendido.