Funcas ve vital prorrogar los ERTE para evitar una crisis mayor
La institución retrasa hasta 2023 la recuperación de los niveles de PIB y empleo que tenía España en 2019
Raymond Torres, director de coyuntura y análisis internacional de Funcas, se ha sumado este jueves a las voces –banca, sindicatos y empresas– que piden que los ERTE se prolonguen más allá del estado de alarma para evitar que el impacto de la crisis económica que está generando la pandemia del coronavirus sea todavía mayor.
Funcas cree que estos expedientes son claves para impedir una tasa de desempleo más elevada y, por tanto, una crisis económica más profunda y una recuperación más lenta. Torres entiende que el presupuesto destinado es necesario, aunque vaticina que los más de 17.000 millones presupuestados por el Ejecutivo en el plan remitido a Bruselas la semana pasada se podrían quedar cortos.
Funcas calcula que en el segundo trimestre del ejercicio se alcanzará una tasa de paro del 19,9%, pero que ascendería hasta el 34% si se tiene en cuenta a todos los trabajadores que se encuentran afectados por un expediente temporal de regulación de empleo. Para finales de 2020, anticipa que el número de trabajadores afectados por el parón se haya reducido hasta el 22,4%, con una proporción mucho menor de ERTE, pero mayor de desempleados, ya que pronostica que la tasa de paro alcanzará el 20,5% en diciembre.
«Los ERTE van a durar al menos hasta octubre», ha apuntado el economista de Funcas, que no descarta que en los sectores más afectados, como el turístico, sea necesario prorrogarlo más y recomienda que también se incluya a los trabajadores temporales.
«Si los ERTE se ligaran a la duración del estado de alarma claramente se producirían cierres de empresas», ha añadido. Torres cree, no obstante, que es lógico que para la prórroga se planteen condicionalidades, como el mantenimiento del empleo, pero también entiende las dudas que genera este punto ene los empresarios. «Hay sectores que ya pueden empezar a abrir, pero no saben cuál va a ser su actividad, por lo que recuperar todo el empleo puede ocasionarles un problema de tesorería. Lo lógico sería prolongarlos para una parte de la plantilla», reflexiona.
Funcas anticipa que la economía española no volverá a ser la misma en términos de PIB hasta 2023; ejercicio en el que también se recuperaría la tasa de desempleo de 2019. BBVA Research, hace unas semanas, adelantó este mismo escenario.
Un plan de reducción de déficit estructural
La crisis del coronavirus va a impulsar con fuerza tanto el endeudamiento como el déficit de España, que, según la AIReF se verá abocada a poner en marcha ajustes que lo reduzca a lo largo de los próximos años. La autoridad fiscal cree que es imprescindible que el Gobierno se ponga a trabajar con rapidez en un plan de reequlibrio.
Raymond Torres insta a que ese ajuste, vía gasto o vía ingresos, debe ser paulatino y atacar el déficit estructural de España. La crisis sanitaria se ha producido tras un largo periodo de exceso de déficit que ha ido pensando en el endeudamiento. Una de esas medidas que colaborarán a incrementar el desajuste será justo la renta mínima vital; que el Gobierno quiere hacer permanente, con un coste total de unos 5.500 millones, en el que se incluirían las aportaciones de las comunidades autónomas.