El BCE mejora sus previsiones para la zona euro
Christine Lagarde prevé que la caída del PIB este año sea del 8% en la eurozona, frente al 8,7% esperado en junio
El Banco Central Europeo (BCE) arroja un poco de luz en la crisis económica originada por el coronavirus. El organismo ha mejorado este jueves su previsión de contracción económica de la zona euro para este año: del 8,7% que pronosticó en junio hasta el 8%.
“Los últimos datos sugieren un fuerte repunte de la actividad económica», ha asegurado su presidenta Christine Lagarde. Pero también ha recordado que el nivel de la actividad económica se sitúa muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
La institución prevé que, de cara a 2021, el crecimiento sea del 5%, levemente por debajo del 5,2% que estimó en junio, y del 3,2 % en 2022, una décima menos. En cuanto a la inflación, mantiene la pronosticada antes del verano en los casos de 2020 (0,3%) y 2022 (1,3%), pero mejora la del año que viene: la subida de precios en 2021 pasaría del 1% al 0,8% previsto hace tres meses.
Lagarde insiste en que deben ampliarse los estímulos monetarios
La presidenta del BCE hizo hincapié en que es necesario un amplio grado de estímulos monetarios para apoyar el crecimiento de la zona del euro. Y es que la actividad en el sector manufacturero ha continuado mejorando, pero el auge del sector servicios se ha ralentizado recientemente.
«La fortaleza de la recuperación está rodeada de una incertidumbre significativa y sigue dependiendo mucho de la evolución de la pandemia»
«La fortaleza de la recuperación está rodeada de una incertidumbre significativa y sigue dependiendo mucho de la evolución de la pandemia y del éxito de las políticas aplicadas», ha indicado Lagarde. De hecho, el BCE también ha anunciado que va a mantener su programa de compra de activos por 1,35 billones de euros para hacer frente a la crisis.
La demanda interna de la zona del euro ha registrado una «significativa recuperación desde niveles bajos», según la presidenta del organismo europeo, pero la incertidumbre todavía se nota en el gasto del consumidor y las inversiones de las empresas, ha recordado.
Las previsiones para España no son optimistas
En los próximos días se espera que el Banco de España dé a conocer también sus previsiones. Los últimos indicadores no son optimistas. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió este martes que la economía española se había descolgado del proceso de recuperación que viven el resto de países de Europa, lo que podría provocar una nueva ralentización.
Antes de los meses estivales, la OCDE alertó que, en caso de rebrotes, el PIB se desplomaría hasta un 14,4%, la peor caída de todos los países de la UE en ese escenario. Un porcentaje ligeramente más positivo que el del organismo que preside Pablo Hernández de Cos, que situó el desplome en el 15%.
De no prolongarse la crisis sanitaria y sobrevivir a las fases de la desescalada, el informe semestral de la OCDE indicó un descenso del 11,1% en 2020.
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) también revisa a la baja estas estimaciones. Sus analistas adelantaron la semana a Economía Digitial que los rebrotes que iban a provocar una revisión a peor tanto de las estimaciones de PIB, como del déficit.
María Jesús Fernández Sánchez, economista senior de la fundación, reconoció que, de cara a 2021, falta visibilidad y que es probable que las estimaciones difieran dependiendo de la fecha en la que los analistas pronostiquen la existencia de una vacuna. «Si llega en primavera, la evolución de la economía no va a ser la misma que si se retrasa a otoño», explicó esta experta.