Los Tarragó denuncian por lo penal a los Pujol por falsificar una nómina
Josep Maria y Jorge Tarragó presentan una nueva demanda contra su tío y su primo, Josep Maria y Xavier Pujol, por las pruebas que presentaron en la primera vista de los juicios laborales que están en curso
Las dos familias propietarias de Ficosa, los Pujol y los Tarragó, se verán próximamente las caras en un tribunal penal. Josep Maria y Jorge Tarragó presentaron la semana pasada una demanda penal contra su tío, Josep Maria Pujol, y su primo, Xavier, por una presunta falsificación de las pruebas aportadas en la primera vista del juicio laboral iniciado por Jorge Tarragó.
Según han informado fuentes judiciales a Economía Digital, los Pujol justificaron que su primo desempeñaba un cargo directivo en Ficosa presentando una nómina, sin firma del interesado, en la se catalogaba de “gerente” su trabajo en la multinacional. De esta forma, argumentan que no es un empleado de la factoría, sino uno de los propietarios de la empresa con cargo directivo.
En la demanda penal, los Tarragó aseguran que este documento fue manipulado. De hecho, lo demostraron durante la vista presentando ante la magistrada las nóminas de los últimos años de Jorge Tarragó. Unos documentos firmados y con el sello de la empresa donde queda claro su empleo como “ingeniero”, sin ninguna relación con la cúpula empresarial ni implicación en la toma de las decisiones estratégicas del grupo.
En la misma denuncia, la familia Tarragó afirma que los Pujol presentaron un testigo que mintió sobre la relación laboral del ingeniero con la multinacional. Fuentes de su entorno recuerdan que las vistas están grabadas y explican que esta será la principal prueba de la acusación.
Disputa por el control de Ficosa
Los Pujol han conocido el inicio de la nueva vía judicial este mismo martes, durante la primera vista del juicio laboral iniciado por Josep Maria Tarragó. Debido a una acumulación de causas en los Juzgados Sociales de Barcelona se ha aplazado un día, hasta la mañana del jueves.
Tanto él como su hermano quieren retomar el control de la multinacional que fundó su padre (fallecido en marzo de 2009) en 1949 con su suegro, Josep Pujol Sucarrats. El padre de Josep María Pujol Artigas. Desde los inicios ambas familias controlaban cada una el 45% de la propiedad de Ficosa y el 10% restante estaba en manos de minoritarios. Un reparto de acciones que se modificó a raíz de la adquisición de la factoría de Viladecavalls en 2010 por un movimiento societario de Josep Maria Pujol.
Dejó a su familia como accionistas mayoritarios y provocó el divorcio con sus sobrinos. Además, en julio Josep Maria y Jorge Tarragó fueron despedidos y expulsados de la factoría del Vallès Occidental “con formas vergonzosas y humillantes”, tal como afirmaba recientemente Josep Maria en una carta remitida a unos 70 proveedores y clientes.
En declaraciones a ED, Xavier Pujol ha asegurado que están “tristes” porque los desencuentros con sus primos hayan acabado en los tribunales. “Siempre hemos pensado que las disputas familiares se tienen que arreglar en casa, pero no entraremos en descalificaciones”.
Conflicto social
Además de lidiar con sus primos, los Pujol tienen abierto un conflicto laboral en Viladecavalls. Anunciaron que el martes presentarían un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afectaría al personal de las líneas de producción de Ficosa Electrónics, pero aún reúnen documentación para iniciarlo.
El comité de empresa ha rechazado de frente esta alternativa y el sábado salieron de nuevo a la calle para denunciar el expediente. Sin esta regulación, los directivos aseguran que el futuro de Ficosa está en entredicho.