El Govern conocía las irregularidades de Acciona en ATLL
La concesionaria subrogó una parte de su actividad a dos filiales de Acciona, una de ellas sin trabajadores, sin la autorización de la Generalitat
La Agència Catalana de l’Aigua (ACA), ente público dependiente de la conselleria de Territori de la Generalitat, conocía las irregularidades cometidas por Acciona con la gestión de las aguas catalanas. La compañía, socio principal del consorcio que se adjudicó el abastecimiento de agua a 4,5 millones de catalanes, subrogó parte de la actividad de ATLL a dos filiales suyas sin la imprescindible autorización administrativa.
Así lo recoge un informe de la Oficina Antifraude, realizado después de la denuncia del sindicato CGT hecha en abril de 2015. Antifraude constata que se subrogó parte de la actividad a Empresa Operadora ATLL, con contratos que sumaron 7,5 millones de euros.
La CGT denunció esta situación, que se produjo en 2013, y que esta sociedad no tenía trabajadores, por lo que no podía ofrecer este servicio. A raíz de esta denuncia, Acciona cambió la sociedad a la que subrogaba la actividad y empezó a facturar a Acciona Agua, por valor de 5,9 millones de euros a partir de 2014.
Sin autorización y a precios altos
Después de estudiar estos hechos, Antifraude ha decidido remeter un informe a la Fiscalía Superior de Cataluña, según han confirmado a Economía Digital fuentes de la CGT y del Govern.
El informe ve diversas irregularidades en esta subrogación. La primera de ellas, es que no contó con la autorización de la administración catalana, lo cual supone una violación del pliegue de condiciones de la adjudicación. De hecho, el miembro del ACA en ATLL no asistía casi nunca a las reuniones del consejo de administración.
Antifraude también considera que no está justificada la subrogación, y que podría haberse pagado por encima del precio de mercado. Por ello, cree que estos contratos podrían esconder la voluntad de subir el precio del agua artificialmente.
Hechos meramente societarios
El informe también ha llegado al ACA y a las consellerias de Economia y de Territori i Sostenibilitat. La portavoz del Govern, Neus Munté, ha admitido este martes que «estos hechos ya habían sido detectados por el ACA como consecuencia de una auditoría», y ha añadido que la Agència Catalana de l’Aigua «los puso en conocimiento de la Agencia Tributaria» en 2015.
No obstante, el Govern considera estos hechos meramente «societarios». Munté ha asegurado que no han afectado al servicio ni han provocado una subida de precios. Sobre si el ejecutivo podría tomar alguna decisión, la portavoz no se ha mojado: «Se estudiarán las medidas a tomar».
Falta de inversión
El funcionamiento de ATLL desde su concesión ha distado mucho de ser modélico, algo que el Govern conoce. Además de estas actuaciones, una auditoría realizada por BAC Engineering para la Generalitat revelaba opacidad y falta de mejoras en la concesionaria.
Cómo avanzó Economía Digital, Acciona sólo ha invertido una quinta parte de lo comprometido en el pliegue de condiciones en los años 2013, 2014 y 2015. Concretamente, 5,67 millones de los 30 millones comprometidos.
La presencia de un fondo en ATLL
A pesar de estos hechos, Acciona se ha hecho fuerte en el seno de ATLL, con la compra de la participación del banco brasileño BTG Pactual. Sin embargo, un fondo londinense, Pioneer Point Partners, afirma ser socio de la concesionaria a través de Aigües de Catalunya Limited (AdC), sociedad a través de la cual BTG vehiculaba su participación.
Ni Acciona ni BTG han aclarado la presencia de este fondo en ATLL y la compañía que preside José Manuel Entrecanales no ha especificado qué porcentaje controla de la concesionaria después de la salida del banco brasileño. AdC está controlada por dos sociedades radicadas en Bermudas y Caimán, considerados paraísos fiscales.