El ansia de Galán por Electropaulo (o 3.250M que no se pueden escapar)
Iberdrola sabe que Electropaulo reforzará su encaje en Brasil y ya ha hecho números para saber si debe mejorar su oferta
Ya van 28 días desde que Iberdrola y Enel se metieron de lleno en un pulso por Electropaulo. La eléctrica vasca, conocedora del encaje estratégico que tendría la distribuidora brasileña en su consolidación como líder energético del país, ha movido cielo y tierra, acudiendo incluso a organismos de arbitraje, para ganar el tiempo necesario que despeje las dudas sobre si es necesario superar la oferta de su máximo rival.
El primer calendario fijado por el regulador del país marcó el 24 de mayo como fecha máxima para conocer si un tercero entraba en la puja. Si no lo hacía, las últimas ofertas se conocerían a las 19.00 horas de esa misma tarde y todo quedaría visto para sentencia. Pero finalmente no será hasta el 4 de junio, 11 días más tarde de la primera previsión, cuando todo se resuelva.
Las posiciones son las mismas sobre el tablero. Tras la jornada frenética que se vivió a finales de abril con ofertas y contraofertas de última hora, la apuesta más fuerte sigue siendo la de la italiana Enel, que ofrece 32,20 reales por acción, frente a los 32,10 reales de Neoenergía.
Los números que justifican la compra
Los resultados de Electropaulo y Neonergía, participada al 52% de Iberdrola –los otros dos accionistas son el estatal fondo de pensiones Previ (38,21%) y el Banco do Brasil (9,34%)–, demuestran que la suma de ambos reforzaría el liderazgo que ahora mismo Iberdrola tiene en Brasil.
La filial obtuvo unos ingresos brutos por más de 2.058 millones de euros (2.400 millones de dólares) –lo que en términos porcentuales representa el 12% de todo el grupo–, mientras que las de Electropaulo fueron de 1.239 millones de euros (1.445 millones de dólares).
Suma de Neoenergía y Electropaulo: 50M de población abastecida y 650.000 kilometros de líneas de distribución
El otro motivo que avala la compra es el encaje geográfico. Neoenergía y Electropaulo operan en zonas cercanas a Sao Paolo, lo que permitiría combinar más facilmente sus redes de abastecimiento y distribución en una de las áreas más ricas del país.
Todo ello se traduciría en 20,8 millones puntos de suministro, 50 millones de población abastecida y 650.000 kilometros de líneas de distribución, según refleja la información que Iberdrola aportó ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Una carrera judicializada
Iberdrola no quiere dejar pasar la oportunidad y para frenar a sus rivales no ha dudado en meter por medio a instancias superiores. Primero fue en Europa, donde denunció las prácticas de su competidor Enel de competencia desleal, puesto que el Estado italiano (accionista del 25% de la firma) es, a ojos de su competidor, un aliado en las inversiones.
El siguiente recurso fue contra la propia Electropaulo. Neoenergía consideró que la firma brasileña, al aceptar la entrada de Enel, incumplía el primer acuerdo que firmaron a principios de abril. En dicha alianza se estableció una ampliación de capital para hacerse con el 30% de Electropaulo para después lanzar una opa que completara el restante 70%.
La última maniobra llegó el pasado jueves 24 de mayo, cuando un auto del tribunal empresarial y de conflictos de arbitraje del Foro Central de la Comarca de Sao Paulo determinó que las condiciones establecidas para que apareciese un nuevo rival.
¿El motivo? El organismo de arbitraje del país dictó que tanto Enel como Iberdrola contaban con desventaja al no ser conocedores de la posición de un tercero. Ahora, en cambio, quien quiera sumarse a la pugna deberá mostrar un interés público antes de la subasta definitiva.