DIA: el juez sospecha sobre KPMG y su colaboración con Currás

Fue durante más de una década el auditor de DIA y ahora mismo está bajo la lupa de la justicia. KPMG no solo debe entregar en la Audiencia Nacional toda la información cruzada sobre las auditorías de 2017 y 2018 sobre las cuentas de la cadena de supermercados, sino también detalles sobre las personas que trabajaron en ellas y el papel que desempeñaron.

Así lo ha considerado el juez Alejandro Abascal, que ha elevado la presión sobre la compañía auditora, una de las cuatro big four. Hasta ahora, el papel de KPMG no había sido tan señalado en la investigación sobre las irregularidades contables de DIA, que ascendían a 51 millones ficticios de facturación que se simularon, presuntamente, para cumplir con los objetivos y que la cúpula cobrara la retribución variable.

De hecho, el informe forensic de EY, el encargado de analizar al detalle y de manera imparcial qué ocurrió durante los últimos años en la compañía, solo culpaba al entonces consejero delegado, Ricardo Currás, a quien señalaba de ocultar información de manera deliberada.

Pero ahora, tras las peticiones de la Plataforma de Abogados de DIA, dirigida por el despacho de abogados Gesico, el juez quiere saber al detalle qué relación existía entre el ex consejero delegado de DIA y KPMG. Todo ello «con el fin de tratar de tener mayores elementos de prueba documental y de conocimiento entre las personas investigadas y en relación a los hechos objeto del procedimiento», reza la documentación consultada.

El informe ‘forensic’ de EY exculpó a KPMG y señaló únicamente a Currás

El magistrado quiere analizar todos los detalles: el listado de trabajadores que participaron en la auditoría de DIA, los documentos de trabajo utilizados para validar las cuentas anuales a fin de comprobar su diligencia, los criterios utilizados y las comunicaciones cruzadas entre auditora y cadena de supermercados. 

De acuerdo a la providencia emitida el pasado 17 de junio, el juez Abascal solo descarta solicitar el número de horas dedicadas por cada trabajador y su curriculum vitae, porque, a su parecer, «resultan innecesarias y carentes de justificación».

Hasta el momento la compañía auditora no ha sido imputada, pero sí la persona que trabaja para ella y se encargó de revisar las cuentas de DIA: Carlos García Peregrina. Se trata de un directivo de peso en la auditora en España, donde presta servicio desde hace más de 30 años trabaja como responsable del sector de consumo e industria en Madrid.

La CNMV y los analistas ya señalaron a KPMG

La de Abascal no es la primera voz que pone en duda el papel del auditor. En la junta del pasado mayo de 2018, recordada por ser la cita clave en la que el magnate ruso Mikhail Fridman tomó el control de la compañía, fueron distintos los accionistas los que reprocharon a KPMG su labor.

La casa de análisis PIRC, dedicada al asesoramiento sobre el derecho de voto derivado de la titularidad de acciones en sociedades cotizadas, fue una de ellas. Dio un tirón de orejas a la consultora y recomendó oponerse a su reelección como auditora.

La reelección de KPMG como auditora fue contestada por parte de los accionistas de DIA 

Su opinión influyó en parte de los asistentes a la junta general de accionistas, puesto que la reelección de KPMG como consultora fue la segunda medida que más votos en contra cosechó de todos los puntos propuestos.

KPMG también recibió reproches desde la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tras conocerse las irregularidades en DIA. El organismo dirigido por Sebastián Albella, que acusó de «falta de diligencia» a los consejeros que formaban parte de la Comisión de Auditoría de la firma, también vio «indicios de disconformidad» en la actuación de KPMG a la hora de auditar las cuentas de DIA y no detectar ninguna práctica irregular.