El juez imputa al ex consejero delegado de DIA por alterar las cuentas
La Audiencia Nacional acepta la petición de Anticorrupción y cita a declarar a Ricardo Currás
La justicia estrecha el cerco sobre el ex consejero delegado de DIA, Ricardo Currás, y la antigua cúpula de la cadena de supermercados. La Audiencia Nacional acaba de aceptar la solicitud de la Fiscalía Anticorrupción y ha citado a declarar como investigados a exconsejeros de la firma española como Armando Sanchez Falcón y Luis Martínez Gallardo, entre otros. De acuerdo al auto consultado, el juez también declara como investigado al auditor KPMG, que revisó las cuentas de DIA que ahora se investigan.
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“El resultado final del plan trazado y ejecutado conllevó que las cuentas individuales de DIA en el ejercicio 2017 ofreciesen una imagen que no se correspondía con la real de la matriz, lo que se trasladó a las cuentas consolidadas del ejercicio, así como tuvo reflejo en la proyección de objetivos para el ejercicio 2018″, explica la documentación consultada.
En el auto se expone cómo DIA alteró su resultado durante el 2018 porque no se lograba alcanzar la cifra de objetivos. Pero se inició una investigación interna, que inicialmente se centró en España, para descubrir las causas y, tras su averiguación, se volvió a formular el resultado.
Tras un análisis de las cuentas de DIA, la justicia ha encontrado cinco prácticas habituales: previsión de ingresos no justificados procedentes de negociación con proveedores, incorrecta contabilización de ingresos, eliminación no justificada de la provisión de facturas pendientes de recibir, pago de bonus y gratificaciones al personal no provisionados y retrasos en la contabilización y pago a proveedores.
Currás y sus órdenes en DIA
La figura de Ricardo Currás se ha puesto en cuestión desde su abrupta salida de DIA. Economía Digital reveló que la cadena de supermercados revisó su finiquito tras detectar irregularidades que apuntaban a que en 2017 simuló que la empresa obtendría 20 millones de euros de beneficios más.
Currás, que dirigió a la empresa desde 2013, se quedó sin apoyos entre sus propios consejeros. Los miembros del consejo de administración y gran parte de la cúpula directiva acordaron como estrategia común culparle como responsable de los malos resultados.
La justicia no duda ahora en señalarle. El auto que acepta la imputación de Currás señala al entonces máximo responsable de DIA de dar directrices para alterar las cuentas. «Todos los ejercicios, el Consejo de Administración del Grupo DIA establece una serie de indicadores y ratios para fijar la cantidad a pagar al consejero delegado (Currás en ese momento) y a otros altos directivos, en función de la consecución de los objetivos fijados con base a los mismos», dice el juez.
La provisión de esas cantidades, desde un punto de vista contable, con independencia de cuando se paguen, han de ser provisionadas en el ejercicio en que se producen y afecta a la cuenta de resultados, pues — al igual que los salarios fijos de toda la plantilla— constituyen un gasto para la empresa.
Pero Currás, con el propósito de que no se plasmase esta merma de resultados, impartió órdenes para que no se realizaran tales provisiones, de forma que la cantidad asociada a las mismas no minorase la cuenta de resultados. Y ello pese a ser conocedor de su concurrencia y cuantía. «Finalmente, tales cantidades (813.943 euros) fueron pagadas en marzo de 2018, momento en que se dejó constancia del gasto, pero afectando éste a las cuentas del ejercicio 2018 y no del 2017», explica la documentación judicial.