Pfizer saca ventaja a los ensayos de Moderna y Astrazeneca
Pfizer espera obtener los primeros resultados de la fase III de su ensayo clínico en octubre, pero algunos expertos critican un atajo en su investigación
El ensayo de la vacuna contra el coronavirus diseñado por la estadounidense Pfizer y su socio alemán Biontech les permite averiguar antes que sus rivales si su remedio contra la Covid-19 funciona. Estas empresas se han decantado por una especie de atajo para llegar a esta conclusión: mientras que las investigaciones que llevan a cabo Moderna y Astrazeneca requieren que la mayoría de los pacientes tengan dos o más síntomas para para juzgar la eficacia de la vacuna, el ensayo de Pfizer profundiza en pacientes con casos levemente sintomáticos, como fiebre o dolor de garganta.
De esta forma, Pfizer pretende anunciar resultados concluyentes en octubre, ha adelantado Bloomberg. Aunque, según Airfinity, una firma de análisis británica que rastrea los ensayos de vacunas, ninguno de los fabricantes de medicamentos sabrá si sus vacunas reducen las hospitalizaciones hasta febrero. De hecho, Moderna explicó que hasta la primavera de 2021 no podría determinar si su antídoto contra el virus funcionaba.
Los documentos secretos que revelaron recientemente estas dos farmacéuticas -con la intención de ganarse la confianza de la población ante las presiones de Donald Trump por aprobar una vacuna- muestran que cada una de ellas tiene su propio enfoque para definir qué síntomas cuentan y cuándo contarlos.
“Esto podría permitir a Pfizer contar los casos más rápido, pero también podría significar un resultado temprano basado principalmente en casos leves”, explica en declaraciones a Bloomberg Rasmus Bech Hansen, director ejecutivo de Airfinit. «Realmente deberíamos tener hospitalizaciones o muertes como puntos finales porque, en última instancia, queremos evitar que las personas se enfermen gravemente», añadió.
“La prisa por los resultados puede dificultar obtener respuestas claras sobre qué tan bien funcionan las vacunas”
Si en efecto, el mes que viene la investigación de Pfizer anunciara unos buenos resultados en una primera evaluación –de momento se han acumulado solo 32 infecciones por coronavirus en su ensayo masivo de 44.000 personas, según Bloomberg– su vacuna podría recibir una autorización de emergencia cuando los pacientes habrían tenido menos de dos meses de seguimiento.
“La prisa por los resultados puede dificultar obtener respuestas claras sobre qué tan bien funcionan las vacunas”, indicó Eric Topol, editor en jefe de Medscape, un sitio web que ofrece información clínica para profesionales de la salud y director del Instituto Scripps de Investigación.
«Queremos saber que esta vacuna tiene una fuerte eficacia -continuó- y eso significa dos cosas: que funciona en la mayoría de las personas y que previene infecciones graves, no dolores de garganta o dolores musculares».
Pfizer tiene cuatro oportunidades para obtener un resultado preliminar
Además, Pfizer se ha dado cuatro oportunidades para obtener un resultado preliminar, por lo que algunos expertos han asegurado que la compañía parece estar buscando una ventaja para ser el primero en dar con la vacuna. “Nunca he visto un ensayo donde hubo cuatro análisis provisionales; ese puede ser el récord olímpico», indicó Topol. «Es obvio por qué se está haciendo: así que puedes seguir mirando los datos para intentar ganar una carrera», agregó.
Donald Trump ansía la autorización de una de las vacunas y Pfizer es su favorita, según sugirió este lunes. El presidente de los Estados Unidos volvió a anunciar que esta compañía podría obtener la aprobación en las próximas semanas. Además, añadió que la vacuna de Johnson & Johson podría llegar poco después.