Montoro manda el “impuesto Coca-Cola” al último cajón
El gobierno de Mariano Rajoy excluye el impuesto a las bebidas azucaradas de los Presupuestos Generales del Estado un año más
El gobierno de Mariano Rajoy parece haber desechado por completo la aplicación del impuesto a las bebidas azucaradas que había anunciado el año pasado. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha dejado fuera de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) la aplicación del impuestos a las bebidas azucaradas, más conocido como el impuesto Coca-Cola.
Montoro había anunciado que el gobierno estudiaría un impuesto a nivel nacional después de que algunos gobiernos autonómicos, entre ellos Cataluña, anunciase la aplicación de una tasa a las bebidas azucaradas que incluye a buena parte de los refrescos y también a algunos zumos y bebidas preparadas.
Pero, un año después del anuncio, el ministerio de Hacienda ha vuelto a descartar la incorporación del impuesto. La Asociación de Bebidas Refrescantes, Anfabra, ha explicado que el gobierno no ha llegado a desarrollar el impuesto prometido a las bebidas y al que se habían opuesto las patronales de la industria alimentaria, los distribuidores, los agricultores y hasta los hosteleros.
En diciembre de 2016, el ministerio de Hacienda había enviado a Bruselas un plan presupuestario que incluía la incorporación del impuesto a las bebidas azucaradas, con una recaudación prevista de 200 millones de euros. Pero el plan no llegó en 2017 ni en 2018. Y probablemente no llegue tampoco en 2019.
El gobierno reitió una propuesta presupuestaria a Bruselas con el impuesto al azúcar, pero ha quedado guardada en el último cajón
Ciudadanos se apuntó el logro de haber desechado el impuesto a las bebidas azucaradas en las negociaciones efectuadas para la aprobación de los presupuestos el año pasado. El gobierno del Partido Popular, sin embargo, aseguró que nunca se llegó a plantear la aprobación del impuesto de forma inmediata. Simplemente era una opción que finalmente no contempló.
Malestar por el impuesto catalán
La patronal de la alimentación y las bebidas FIAB manifestó su malestar por la aprobación del impuesto catalán al ministro Cristóbal Montoro, quien sugirió un impuesto único nacional y menos gravoso que el planteado por Cataluña.
La patronal Anfabra ha asegurado que uno de los motivos que han llevado al gobierno de Rajoy a desechar la propuesta impositiva ha sido el compromiso de la industria de reducir los contenidos en sales y azúcares en los alimentos procesados, un plan de acción que se ha sustentado en el Plan de Colaboración para la Mejora de la Composición de Alimentos y Bebidas 2017-2020.
El llamado “impuesto Coca-Cola” sigue vigente en Cataluña, donde la patronal FIAB estudia un recurso contencioso-administrativo contra la tasa. El gobierno de la Comunidad Valenciana también tiene prevista la aprobación de un impuesto similar.