Hawkers se une a Alibaba para dominar el sudeste de Asia
La empresa emergente de gafas de sol Hawkers estudia impulsarse de Alibaba para expandirse por cinco países del sudeste de Asia
Cinco meses después de llegar a China, Hawkers ha anunciado su expansión por cinco países del sudeste de Asia. Los destinos elegidos por la marca de gafas de sol ilicitana controlada por uno de los mayores contratistas del chavismo, Alejandro Betancourt, son Tailandia, Indonesia, Singapur, Vietnam y Filipinas.
Desde la compañía explican que la expansión por el continente ha sido muy positiva, ya que en marzo se convirtió en el séptimo país del grupo por volumen de facturación.
Para conseguirlo se ha necesitado adaptar su producto a la fisionomía asiática y lanzar una talla especial, la Asian Fit, con una nueva distancia entre las patillas, el ancho frontal y las almohadillas.
Aliado de Alibaba
Hawkers comercializa su producto a través de TMall Global, la plataforma de comercio digital más internacional de Alibaba. El éxito, dicen, ya se nota en los rankings: ha situado sus productos entre las 30 gafas de sol que más se venden en esta plataforma.
¿Por qué Alibaba? Asia, en general, y China, en particular, son territorios en los que la firma no puede aplicar sus conocimientos técnicos en redes sociales, a diferencia de otros mercados como Europa y América.
Pero la de Alibaba no es es la única vía que está por explorar. Otros medios con los que se estudia la venta directa es la plataforma WeChat –ya fueron pioneros en España con la venta a través de Twitter–, la aplicación de mensajería instantánea más utilizada en el país asiático.
A la espera de resultados
El anuncio de la firma de gafas de sol llega a la espera de conocer los resultados del pasado año, cuando se fijaron como objetivo una facturación de 100 millones de euros. Hasta el momento, la compañía fundada por cuatro jóvenes estudiantes de Elche (Alicante) no ha parado de crecer gracias, entre otros, al aterrizaje en el mundo de la venta física, con la apertura de una tienda en Madrid, y a la incursión en nuevos mercados, como el de la óptica.
En paralelo, el día a día en el funcionamiento interno de la compañía tampoco ha estado quieto. Tras el aterrizaje de Betancourt con una inversión de 50 millones de euros a través de su fondo O’ Hara Capital han ido produciéndose diferentes cambios.
Iñaki Soriano, uno de los fundadores, salió de la compañía para entrar en el mundo de los e-sports, y Hugo Árevalo, uno de los fundadores de Tuenti que entró como inversor en 2016, salió del accionariado en febrero después de que Betancourt reforzara de nuevo su posición como máximo accionista.