Un fundador de Hawkers peleará con Telefónica por 500 millones

Iñaki Soriano se bajaba del barco de Hawkers el 25 de febrero. Seis meses después, uno de los fundadores de la firma controlada por el mayor contratista del chavismo aterriza en la industria del videojuego tras comprar el equipo promesa del deporte electrónico, X6tence. El objetivo es claro: desbancar a Telefónica, la compañía que más ha apostado por un sector que calca al mundo del fútbol y mueve 500 millones de euros.

La operadora fundó en enero el club profesional Movistar Riders. En paralelo, anunció un acuerdo con Electrónic Sport League (ESL) para emitir todos los partidos a través de un nuevo canal exclusivo, Movistar eSports, y cuatro meses después comunicó el lanzamiento de un portal especializado.

Soriano, por su parte, prepara cambios para su equipo. El traspaso de poderes de la compañía conllevará la salida de los fundadores, en tanto que la participación se repartirá entre el joven alicantino (90%) y el jugador estrella e imagen visible del proyecto, Flipin (10%).

Un negocio millonario en pañales

El deporte electrónico es todavía una incógnita. Mueve alrededor de 500 millones de euros al año en España y congrega a miles de personas en los diferentes campeonatos, pero despierta dudas.

Los eufóricos vaticinan un incremento del 30% en la facturación global para finales de este año. Otros, en cambio, son más cautos ante la inmadurez del sector, dado que la mayoría de los fieles se sitúan entre los 14 y los 35 años. 

Los eSports emulan al fútbol: hay desde ruedas de prensa hasta mercado de fichajes

Soriano, partidario del primer pensamiento, explica que el funcionamiento del mercado calca al del deporte rey. Quizá por ello defiende su nuevo escudo con tanta pasión: «X6tence es club histórico con afición y no un producto creado por una marca para entrar en un sector interesante”, explica en relación a su principal rival. 

Aquí no solo hay equipos, sino toda una estructura: campeonatos, entrenadores, ruedas de prensa, árbitros, derechos televisivos, mercado de fichajes y hasta psicólogos que se encargan de mantener motivados a los jugadores.

Sobre la planificación de la temporada, el exdirectivo de Hawkers cuenta que todavía no prioriza el lucro. «Podría hacer rentable al equipo desde el día cero, pero mi objetivo deportivo es ser el mejor club, por lo que voy a destinar todos los recursos necesarios», confirma convencido.

Mirando a Corea del Sur y los Estados Unidos

En este mundo, los Estados Unidos y Corea del Sur juegan en otra liga. Allí, las organizaciones son mucho más sólidas, el número de participantes es infinitamente mayor y los jugadores son reconocidas como auténticas estrellas.

Para hacerse una idea, el jugador surcoreano Fakker, bautizado como el Messi de los videojuegos, gana 2,5 millones de euros al año. El sueldo no es tan astronómico si se compara con el del crack argentino, pero es similar al de notables jugadores de élite.

El Messi de los videojuegos gana 2,5 millones de euros al año

Mientras, en España el grueso de jugadores se contenta con el dinero que reportan los campeonatos. En el mejor de los casos llegan a tener sueldos superiores a los 25.000 euros anuales.

Las grandes empresas entran en juego

De lo que no duda nadie es del potencial de la industria. Por ello, Telefónica fue la última en plantar batalla y unirse al resto de grandes operadoras, como Vodafone y Orange.

La compañía naranja capitanea la organización de la Superliga Orange, creada a partir de un acuerdo con la Liga de Videojuegos Profesional (LVP), propiedad de Mediapro. La competición en la que participan ocho equipos se reanuda cada octubre y ha introducido este año la segunda división, así como ha ampliado el número de eventos.

Vodafone retransmite cada día un informativo centrado en los eSports

Vodafone emite desde el pasado junio un canal especializado a través de la plataforma de streaming Twitch, en manos de Amazon desde desde 2012. Allí retransmite cada día un informativo diario de tres minutos centrado única y exclusivamente en el mundo gamer.