De Acciona a Gestamp: las víctimas invisibles de la crisis de Nissan
El cierre de la fábrica de la Zona Franca dejará a miles de empleados de subcontratas sin trabajo, por lo que ya comienzan a organizarse
Los más de 2.600 trabajadores de Nissan son solo la punta del iceberg. El cierre de la fábrica de Zona Franca (Barcelona) dejará un reguero de víctimas anónimas que oscilará entre las 20.000 y 30.000 personas, según las fuentes consultadas. Empresas del IBEX como Acciona, Gestamp y clásicos del sector de la automoción como Calsonic, Faurecia y Valeo serán algunas de las firmas más afectadas por el adiós de la compañía japonesa.
Por ello, ya comienzan a organizarse. El pasado viernes, unas 500 personas, según datos de la Guardia Urbana, se concentraron frente a la instalación catalana para dar voz a «lo invisibles» cuyo trabajo depende directamente de la automovilística. Los manifestantes reclamaron que se les reconozca también como empleados equiparables al resto de afectados -unos 3.400 empleados- para poder negociar las condiciones de su ERTE con las respectivas administraciones y con la patronal.
Según explican fuentes internas de la fábrica de la Zona Franca, la principal afectada sería Acciona. La empresa tiene a 523 personas que prestan servicios en el interior del planta barcelona. Son la principal partida de trabajadores externos frente al alrededor de 2.400 personas que ocupan el centro bajo un contrato firmado con la propia Nissan. El segundo proveedor en importancia dentro de las instalaciones es Calsonic, que se encarga de los tubos de escape y el frontal, con alrededor de 150 implicados.
No llegan al medio centenar de trabajadores destinados a la fábrica compañías como Tachi-S, dedicada a ensamblar estructuras de asientos; Magna, también centrada en las butacas; Snop; Howa Tramico, que colabora con los revestimientos y los techos; y MMM, centrada en tubos de escape y frenos.
Sin embargo, la lista de afectados no se limita a las organizaciones que prestan servicios directamente en el interior de la instalación barcelonesa. El resto de los proveedores del fabricante nipón también se verán afectados, aunque aquí la factura ya se difumina más y es así como se eleva hasta las entre 20.000 y 30.000 personas. Afectados: Faurecia –el protagonista del incendio que paralizó la fábrica de Seat el pasado noviembre–, la cotizada Gestamp, Valeo, Sumitomo, Hutchinson o Flexngate.
El Gobierno sale al rescate del automóvil
Tras el golpe del cierre de Nissan y el tsunami del coronavirus, el Gobierno salió este domingo a defender el sector del automóvil. El presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez anunció un plan de ayudas por 3.750 millones de euros que se presentará con detalle este lunes.
El dirigente lo hizo público en la rueda de prensa posterior a la decimocuarta videoconferencia con los presidentes autonómicos. El programa incluye la financiación para la renovación del parque automovilístico, con incentivos especiales para los vehículos eléctricos. También habrá ayudas dirigidas al sector de I+D y a la formación profesional, a la vez que atiende temas primordiales como la transición ecológica y la emergencia climática.
De esta manera, el Ejecutivo asume las múltiples peticiones de ayudas de la industria de la automoción, que se encuentra en un “momento crítico” al ser impactado de lleno por la crisis del coronavirus. La pandemia supuso el cierre de fábricas y un mercado en crisis, con mínimos históricos de matriculaciones en los dos últimos meses. Ambos factores completan el abanico de golpes de la mano de la clausura de la planta de Zona Franca.