José Luis Bonet ve cerca la venta de Freixenet
El presidente de Freixenet, José Luis Bonet, admite por primera vez que hay una oferta en firme por la compañía
Las tres ramas de Freixenet ya preparan el desembarco alemán en la compañía. Entre los que se quedan, José Luis Bonet, presidente del líder del cava, ya ve cerca el cierre de la operación. “Ya tenemos una oferta Henkell; la operación puede hacerse”, explica a Economía Digital. ¿Cuándo? “Eso hay que preguntárselo a la parte que ha decidido poner sus acciones a la venta”, despeja.
El directivo catalán recuerda que el interés germano en la cavista se remonta a hace dos años. “Lejos de enfriarse, ahora ha ido a más”, señala. El plan: hacerse con el 50,7% de la empresa propiedad de los Hevia (29%) y tres de los cuatro Bonet (22%). “Yo y mi tío –José Ferrer, representante del 42%– ya hemos dicho que no venderemos”, sostiene. Ahora el turno es para un acuerdo que se dilata más de lo esperado.
De este modo, Freixenet apura los últimos capítulos del mayor culebrón empresarial de los últimos tiempos en Cataluña. Después de que Enrique Hevia, presidente ejecutivo, y Pedro Ferrer, consejero delegado, viajaran a la sede de Henkell, en Frankfurt, el consejo celebrado el 15 de febrero sirvió para trasladar las conversaciones finales con la filial de dr. Oetker.
La venta valorará Freixenet en algo más de 500 millones de euros
Preguntado por este medio, un portavoz de Henkell declinó entonces realizar más comentarios por “motivos de confidencialidad”. En las cavas de Sant Sadurní se da por hecho que la multinacional tomará el control durante el ejercicio 2018/2019.
La venta valorará Freixenet en algo más de 500 millones de euros después de dos auditorías elaboradas por KPMG, en representación de la empresa alemana, y Deloitte, por la firma catalana. A lo largo del otoño, analistas de ambas empresas recorrieron las bodegas y viñedos del grupo con tal de fijar el precio del líder del cava. Una segunda batida tras la primera due dillgence que el grupo germano ya inició en 2016.
Freixenet multiplicó por cuatro los beneficios
En el ejercicio 2016/2017 la cavista multiplicó por cuatro los beneficios, que saltaron desde los 2,39 millones a los 8,4 millones de euros. Además, aprobó el pago de 5,87 millones de euros de dividendos tras dos años de contención.
Sin embargo, las ventas se mantuvieron estancadas con unos ingresos de 535,1 millones de euros, apenas el 1,1% más que los 529 millones de euros del año anterior. Freixenet espera que los canales de distribución de Henkell –filial del gigante Dr. Oetker– disparen los números.