Los problemas económicos del Levante UD paralizan el inicio de la 2ª fase de renovación del estadio
Todas las inversiones del conjunto granota, no sólo la ciudad deportiva, se paralizan en espera de poder encontrar una solución a los problemas de tesorería que arrastra el conjunto levantinista
Pese a que la Generalitat aprobó en enero la modificación del Plan General de Valencia necesaria para que arranque la segunda fase de las obras, reduciendo la edificabilidad en la parcela del Ciutat, la situación económica del club, que a duras pensa llega para el pago de las nóminas de los trabajadores, tiene en standby un proyecto que estaba marcado en rojo para la directiva que hasta hace unos meses presidía Quico Catalán.
Esta modificación del PGOU era crucial para que el club pudiese ocupar parte de suelo público, algo que era necesario «para adecuar el estadio a la normativa de accesibilidad y seguridad», tal y como especificaba la la resolución de la Conselleria de Política Territorial y publicada en el BOP a principios de este 2023.
La segunda fase de remodelación del estadio Ciutat de València contemplaba la reorganización de todos los espacios de dentro del estadio, la parte deportiva, las cabinas de prensa, las zonas destinadas al público e incluso la parte comercial, con la única finalidad de modernizar el campo para poder obtener mayores ingresos por su explotación.
En la primera fase, que terminó hace dos años, se instaló la nueva cubierta en todo el estadio, los video marcadores gigantes y el nuevo sistema de audio, que permiten al club dar una imagen completamente renovada durante los partidos, y que ha tenido una buena acogida para los aficionados de club.
De momento, el que tiene que mover ficha es el club, ya que las instituciones no han recibido de momento ninguna comunicación sobre los planes que tiene la entidad granota respecto de los dos grandes proyectos que tiene a medias en la ciudad, el estadio y la ciudad deportiva, por lo que no pueden entrar a valorar algo que de momento, no se ha producido.
La ciudad deportiva, paralizada
Tal y como contó ayer Economía Digital, la ciudad deportiva del Levante UD también está paralizada. El club logró el pasado mes de mayo la licencia de obras para su nuevo especio de entrenamiento en la ciudad de Valencia, sin embargo, dicha licencia caduca ahora, sin que el Levante, que tenía pensado arrancar las obras el año pasado (incluso se habló en un primer momento de que arrancaran en 2019), haya hecho ningún movimiento al respecto.
Pese a que desde el club no valoran la situación en estos momentos al entender que tienen otras prioridades que abordar antes de hacerlo con las nuevas instalaciones junto al puerto, fuentes consultadas por Economía Digital, aseguran a este medio que el proyecto está paralizado y metido en un cajón, eso sí, con la intención de retomarlo en cuanto las condiciones económicas del club lo permitan, unas condiciones que podrían darse si el club lograse ascender de nuevo esta temporada.
El torbellino social que ha vivido club en las dos últimas temporadas, ha dejado en un segundo plano un proyecto que estaba llamado a ser la joya de la corona para los granotas. Sánchez y Danvila, tienen ahora la pelota en su tejado, y tendrán que ser ellos quienes muevan ficha para determinar los nuevos plazos de ejecución.
El proyecto se enmarcaba en el Plan Especial de la Zona Sur 1 del Puerto de Valencia o “Plan Natzaret”, por el que la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) destina para uso ciudadano 230.000 metros cuadrados (m2) de territorio portuario. De los 230.000 m2 destinados a usos ciudadanos, incluyendo los accesos, la ciudad deportiva ocupará unos 95.000 m2.