Dónde es más probable que tengas un accidente laboral en la Comunitat Valenciana
Los accidentes laborales en el territorio valenciano no han dejado de subir desde 2015
Los accidentes laborales siempre han sido causa de preocupación para trabajadores y empresarios. En los últimos datos de siniestralidad laboral elaborados por el Institut Valencià de Seguretat i Salut en el Treball (INVASSAT), se confirma una tendencia clara: se vuelve a superar el máximo histórico con un total de 63.597 incidentes, un 114% más desde que se tienen registros en 2015.
Con un total de 63.597 incidentes, la provincia de Valencia es la más afectada, con un total de 34.964 accidentes, lo que representa aproximadamente el 54.96% de todos los incidentes en la región. Comparativamente, Alicante reportó 19.650 accidentes (30.89%), mientras que Castellón registró 8.983 accidentes (14.15%).
Si se compara con los ocho años anteriores, las cifras presentan la misma tendencia con Valencia a la cabeza. Las razones de este liderazgo se deben a un mayor concentración de población laboral en comparación con las otras dos provincias, según la última EPA, y con mayor número de infraestructuras logísticas propensas a ser más peligrosas.
En términos de gravedad, Valencia también encabeza la lista con 256 accidentes graves, seguida por Alicante con 156 y Castellón con 50. Los accidentes mortales también fueron más frecuentes en Valencia (42 muertes), en comparación con 33 en Alicante y 1 en Castellón. Por suerte, este tipo de sucesos no llegan a representar ni el 1% del total.
Según la base de datos, suelen tratarse de objetos que se desprenden y caen encima del trabajador, normalmente en el área de la construcción, o de caídas fatales en el sector servicios. También destacan los infartos o derrames mientras se está trabajando o ser aplastado por un objeto en movimiento.
Los servicios y la construcción en el punto de mira
El sector servicios fue el más afectado con 38.796 accidentes, destacando como el sector más peligroso en términos absolutos. La industria le sigue con 12.894 accidentes, mientras que la construcción, con 8.905 accidentes, destaca por la gravedad de los incidentes reportados. El sector agrícola registró 3.002 accidentes, lo que sugiere un riesgo considerable en zonas rurales.
Dentro de estos sectores, la sección de Administración Pública y defensa en el sector servicios, y las actividades de construcción especializada en construcción, fueron áreas con alta incidencia de accidentes. En la industria, la fabricación de productos de caucho y plásticos fue una de las divisiones más afectadas.
Los accidentes catalogados como «resto traumáticos» dominaron el panorama con 55.593 casos, lo que refleja la naturaleza de los trabajos que involucran esfuerzos físicos y posibles riesgos de lesiones mecánicas. Los accidentes de tráfico representaron 7.920 casos, subrayando el riesgo inherente al transporte y la movilidad dentro del entorno laboral. Los accidentes no traumáticos, aunque menos comunes, sumaron 84 casos.
Trabajadores de Mediana Edad y Hombres, los más afectados
El análisis por rango de edad muestra que los trabajadores de 45 a 49 años sufrieron el mayor número de accidentes (9.746), seguidos por aquellos en el rango de 40 a 44 años (8.987 accidentes). Estos datos sugieren que los trabajadores de mediana edad, probablemente debido a su mayor responsabilidad y exposición prolongada en el entorno laboral, son los más vulnerables a sufrir estos sucesos.
Curiosamente, la incidencia de accidentes en los trabajadores menores de 18 años es mínima, con solo 141 casos registrados, lo que refleja posiblemente una menor participación en trabajos peligrosos o una mayor supervisión en estos casos. Por sexos, los hombres son los que más probabilidad tienen de tener una accidente laboral en 7 de cada 10 ocasiones, mientras que las mujeres representan alrededor del 20% de los incidentes.
De Ahogamientos a Amputaciones
Los datos revelan una variedad de formas de lesiones sufridas, siendo el ahogamiento en líquidos una de las formas más comunes, especialmente en sectores como la construcción y los servicios.
Sin embargo, las amputaciones y seccionamientos de miembros también fueron reportados, principalmente en actividades relacionadas con la industria manufacturera y con bastante concentración en Alicante por la cerámica.
Las lesiones menos graves, aunque más frecuentes, incluyen torceduras, fracturas y contusiones, mientras que las lesiones fatales, aunque menos comunes, subrayan la necesidad de mejorar la seguridad en sectores de alto riesgo.
Desde 2015, los valencianos han sufrido 503.000 incidentes, la mayoría leves. Con Valencia como la provincia más afectada, y con los sectores de servicios y construcción en el punto de mira, es crucial que las políticas de seguridad sigan mejorándose para reducir el número de accidentes, especialmente aquellos que resultan en graves lesiones o muerte.