Mazón contenta en el reparto de subvenciones a Navarro (CEV), Baño (Cámara) y Boluda (Jaume I)

El reparto de subvenciones de Mazón no se convertirá en un punto adicional de conflicto a las tiranteces que se han señalado entre la CEV y Cámara Alicante y su relación con la Generalitat. De hecho, las cuentas destilan que hay respaldo hacia los empresarios.

Tanto Salvador Navarro como Carlos Baño salen bien parados del proyecto de presupuestos de la Generalitat Valenciana para 2025 en un contexto en el que la priorización del gasto por la DANA y la negociación con Vox podía haber perjudicado especialmente a las subvenciones que la patronal y los sindicatos reciben al a vez.

La CEV y los sindicatos percibieron en 2024 un total de 7,45 millones de euros mientras que para 2025 serán 8,95 millones. La principal partida, que es la ayuda a sindicatos por los resultados sindicales, se mantiene en los 3,5 millones de euros.

También están congeladas las partidas de planes de igualdad (50.000 euros para la CEV, 100.000 para UGT y 100.000 para CC OO), de prevención de riesgos laborales (100.000 para la patronal y 200.000 para cada uno de los sindicatos) y la subvención por participación institucional (750.000 CEV y 400.000 tanto para UGT como para CC OO).

Además, la subvención de colaboración institucional sube desde los 500.000 euros hasta los 800.000 mientras que las actividades de formación para la negociación colectiva y el diálogo social avanza desde el millón de euros hasta el 1,2 millones. También aparece una nueva partida de un millón de euros para realizar actividades de prevención riesgos laborales.

Leve retroceso para el conjunto de las Cámaras

El balance para el conjunto de Cámaras de Comercio de la Comunidad Valenciana es de ligero retroceso. En 2024 tuvieron unas ayudas de 3,27 millones de euros mientras que para 2025 está previsto que sean 3,19 millones.

Hay dos partidas que se mantienen, que son la de «mantenimiento de la estructura de personal y gastos de funcionamiento» de las Cámaras de Comercio de Orihuela y Alcoy, con 90.000 euros cada una y la de 370.000 euros para el mismo motivo pero para el el Consejo de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de la Comunitat Valenciana.

Los recortes llegan en otras tres partidas. La subvención al Consejo de Cámaras para la «innovación y la mejora de la competitividad en la empresa comercial» tiene 300.000 euros y el año pasado eran 322.500. La ayuda para «mantenimiento de la estructura de personal y gastos de funcionamiento de la oficina PATECO y desarrollo y oficina técnica del Plan de acción territorial del sector comercio de la Comunitat Valenciana (PATSECOVA)» pasa de 540.000 euros a 430.000 mientras que las «acciones de formación y asesoramiento para la consolidación y crecimiento empresarial» tenían 360.720 euros en 2024 mientras que este año tendrán 318.000.

El incremento de líneas llega por la Dirección General de Energía y Minas, que crea una línea de 100.000 euros para la «elaboración de informes, supervisión de documentación o tareas similares dirigidos a la implantación de las instalaciones de energía renovables en la Comunitat Valenciana».

Al margen de estas líneas generales, la partida más cuantiosa que reciben las Cámaras de Comercio en la Comunidad Valenciana es que llega a la de Alicante, presidida por Carlos Baño, que por segundo año consecutivo recibe 1,5 millones de euros para el centro de formación que está levantando en Alicante.

La Fundación Premios Jaume I mantiene el apoyo

Al margen de la patronal autonómica y la Cámara de Comercio de Alicante, el podio de voces empresariales lo completa la Asociación Valenciana de Empresarios. El lobby de Juan Roig y Vicente Boluda no tiene subvenciones directas como tampoco el proyecto #QuieroCorredor, que ha mantenido su independencia al financiarse con fondos privados. Esto les ha permitido mantenter la independencia ideológica que les caracteriza.

Otra cuestión distinta, aunque íntimamente ligada ya que Vicente Boluda es el presidente de AVE y de la Fundación Jaume I es el funcionamiento de la segunda. Ahí hay patrocinios privados, destacando el de Mercadona, pero también hay sustento público. El hecho que la última edición no tuviera ninguna mujer como premiada abrió el debate sobre si los patrocinios públicos se mantendrían.

Natalia Enguix (Ens Uneix), vicepresidenta de la Diputación de Valencia, pidió la retirada de la subvención a la Fundación Jaume I, una cuestión que ocurrió una vez ya había dado el respaldo a los presupuestos provinciales en la que se contempla el respaldo para 2025. Con todavía menos capacidad de éxito, ya que está en la oposición y con las cuentas de Maria José Catalá ya aprobadas en el ayuntamiento, estuvo también la propuesta de Papi Robles (Compromís) de quitar el respaldo a Vicente Boluda dentro de la Fundación Premios Jaume I.

La primera decisión política que se toma al respecto ha sido la de Carlos Mazón, que ha incluido de nuevo las dos subvenciones que ya otorgó en 2024 a la Fundación Jaume I. Tiene 365.0000 euros para la «realización del programa anual de asistencia prestada por la Fundación Premios Rey Jaume I» a los que se suman otros 65.000 para «la realización de los gastos de personal y funcionamiento de la Fundación Premios Rey Jaume I». La cantidad es la misma que la del año anterior.