Les Corts aprueban la supresión del impuesto de sucesiones en la Comunitat Valenciana
La rebaja fiscal sobre las herencias y las donaciones tendrá carácter retroactivo desde el 28 de mayo y entrará en vigor de forma inminente
Les Corts han aprobado el proyecto de ley por la que se regula el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y restantes tributos cedidos, para introducir una nueva bonificación del 99 % en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones para los familiares más allegados.
El objetivo de esta medida, que fue uno de los primeros acuerdos adoptados por el Consell que preside Carlos Mazón y una de las promesas de campaña, es reducir la carga impositiva y acabar con un impuesto “anacrónico, injusto e insolidario”, tal y como ha destacado la consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino.
Esta bonificación del 99 % sobre la cuota a pagar, que entra en vigor con efecto retroactivo desde el 28 de mayo, se aplicará a parientes directos: hijos y otros descendientes; padres y otros ascendientes; y cónyuges.
El objetivo es reducir la carga impositiva y acabar con un impuesto “anacrónico, injusto e insolidario
Ruth Merino, consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública
«La bonificación está planteada para que todos nuestros allegados puedan disfrutar de las herencias sin que se vean obligados a renunciar o a pagar cuantías muy elevadas«, ha destacado la responsable de Hacienda, quien rechaza que la bonificación vaya a beneficiar a los contribuyentes de mayor renta.
La Generalitat estima que dejará de ingresar 231 millones de euros con una medida de las que se van a beneficiar más de 20.000 valencianos, que no tendrán que hacer frente al llamado «impuesto a la muerte».
Para el PSPV esta medida «beneficia únicamente a 20.000 valencianos y supone una bajada de la recaudación de 393 millones de euros», por los 231 que considera el Consell, mientras que Compromís ha calificado la medida como «un nuevo regalo a la gente que menos lo necesita» y una «amnistía a los más poderosos de la Comunitat».
El 95 % de contribuyentes ya no tendrá que pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones
Con esta rebaja fiscal, el 95% de contribuyentes ya no tendrá que pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones y se estima que beneficiará cada año a alrededor de 15.000 personas en el caso del Impuesto de Sucesiones y 3.000 en el caso de Donaciones en la Comunitat Valenciana, tomando como referencia los declarantes de 2022. A ello hay que que sumar las más de 5.000 renuncias a herencias por varias causas para no pagar impuestos.
La bonificación se aplica sobre la cuota tributaria en las adquisiciones mortis causa y percepciones de cantidades obtenidas por los beneficiarios de seguros de vida que se añadan al caudal hereditario efectuadas por parientes del causante a descendientes y adoptados, cónyuges, ascendientes y adoptantes.
También podrán beneficiarse de la reducción del impuesto las adquisiciones por donación u otros actos lucrativos inter vivos celebradas en favor del cónyuge, padres, adoptantes, hijos o adoptados del donante, nietos y abuelos.
Igualmente, disfrutarán del mismo beneficio las adquisiciones por personas con discapacidad física o sensorial con un grado de discapacidad igual o superior al 65 % o por personas con discapacidad psíquica con un grado de discapacidad igual o superior al 33 %.
Reducciones en transmisiones intervivos
Para el cálculo de la base liquidable del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, en las transmisiones inter vivos se aplicará una reducción de 100.000 euros, más 8.000 euros por cada año menos de 21 que tenga el donatario, sin que la reducción pueda exceder de 156.000 euros, si las adquisiciones se realizan por hijos o adoptados menores de 21 años.
En el caso de que las adquisiciones se realicen por hijos o adoptados de 21 o más años, por el cónyuge, padres o adoptantes, se asignará una reducción de 100.000 euros; en las adquisiciones por nietos se fijará una reducción de 100.000 euros si el nieto tiene 21 o más años, y 100.000 euros, más 8.000 euros por cada año menos de 21 que tenga el nieto, sin que, en este último año, la reducción pueda exceder de 156.000 euros, mientras que en las adquisiciones realizadas por abuelos, las reducciones serán de 100.000 euros.
En las adquisiciones por personas con discapacidad física o sensorial, con un grado de discapacidad igual o superior al 65 %, y con discapacidad psíquica, con un grado de discapacidad igual o superior al 33 %, se aplicará una reducción a la base imponible de 240.000 euros.