La valenciana Vestel Ingenieros lleva electricidad renovable hasta una comunidad rural de Honduras
La ingeniería valenciana participa en un proyecto solidario en el país centroamericano
Placas solares instaladas por Vestel Ingenieros
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Vestel Ingenieros ha participado en el desarrollo de un sistema innovador que ahora proporciona energía limpia para satisfacer las necesidades domésticas y agrícolas de los 500 residentes de la comunidad rural de Torrecilla, en Honduras.
Anteriormente, los habitantes dependían de generadores eléctricos privados o de la leña para cocinar. Según el equipo técnico, el nuevo sistema no solo mejora esta situación, sino que también tiene un impacto ambiental significativo, evitando la emisión estimada de entre 62 y 121 toneladas de CO2 al año en comparación con alternativas contaminantes como el diésel o la conexión a la red eléctrica primaria.
El proyecto ‘Microred Inteligente Híbrida de Energías Renovables para Solucionar el Trilema Agua-Alimentación-Energía en una Comunidad Rural de Honduras‘ ha contado con la colaboración del Instituto de Investigación en Ingeniería Energética de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), Genia Bioenergy y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
Energía renovable monitorizada en tiempo real
Juntos, han instalado una microrred que combina tres plantas solares fotovoltaicas, un gasificador de biomasa, un banco de baterías, un gestor de red, una red trifásica de distribución y un sistema de adquisición de datos para la monitorización en tiempo real.
Manuel Suárez Vázquez, director del área de energía en Vestel Ingenieros, destaca la importancia de este proyecto: «Estamos realmente orgullosos de haber contribuido a este esfuerzo. Hemos aplicado nuestra experiencia para beneficiar a una comunidad necesitada y hemos ayudado a construir un presente y un futuro más sostenibles».
El impacto del proyecto va más allá de proporcionar electricidad, ya que ha mejorado significativamente la calidad de vida en Torrecilla, impulsando así el desarrollo económico local y reduciendo la huella ambiental.
Además, la formación proporcionada por la UPV y las empresas participantes ha facilitado que la comunidad aprenda sobre la gestión sostenible y el mantenimiento de la microrred a largo plazo.
