Los negocios inmobiliarios del CEO de Grefusa: más de 28 millones en patrimonio neto

A pesar de un año sin ventas, la empresa de la que es presidente reduce su endeudamiento y mantiene una sólida autofinanciación

Agustín Gregori, CEO de Grefusa

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Agustín Gregori, actual CEO de Grefusa y nieto del fundador de la compañía valenciana, participa junto a otros miembros de esta familia desde el 2004 en Greland SL, una socimi -inmobiliarias cotizadas con un régimen fiscal singular, que invierten en inmuebles en alquiler- gestionada por el grupo Inbest Real Estate, que le ha permitido acumular un patrimonio neto valorado en 28.721.738 millones de euros.

En la cuenta de resultados del último ejercicio disponible, las del año 2022, consultada por Economía Digital, se puede observar que se trata de una empresa pequeña, con sede en Alzira (Valencia). A pesar de no haber registrado ningún tipo de venta inmobiliaria en 2022, la empresa logró un resultado neto positivo de 99.588,82 euros.

Más allá del propio CEO, que figura como presidente de la sociedad limitada, en el órgano de administración aparecen diferentes miembros de la familia Gregori como Mercedes Gregori Soler, la cual ha sido nombrada recientemente como representante de la firma Inbest.

Pese no haber registrado ninguna venta en 2022, la empresa ha logrado un resultado neto positivo que roza los 100.000 euros

Por lo que respecta a los bienes y recursos económicos que se prevé que en el corto plazo se conviertan en efectivo (activo total), la empresa mostró una disminución del 3,36% en su activo en comparación con 2021, alcanzando los 31.581.321,55 euros. Esta disminución fue más pronunciada en el activo no corriente, que se redujo un 10,88%. El activo no corriente incluye bienes y derechos que la empresa espera mantener a largo plazo, como propiedades y equipos.

Su Ebitda fue de 109.494,97 euros, lo que indica que la empresa generó beneficios operativos antes de deducir los gastos financieros y fiscales. Sin embargo, el EBIT fue negativo, con -76.873,35 euros, mostrando pérdidas después de deducir los costos operativos.

Aun así, la empresa presidida por el dueño de Grefusa mantiene una sólida estructura de autofinanciación, con un patrimonio neto que representa el 91,01% del total del pasivo. El patrimonio neto refleja los fondos propios de la empresa y es un indicador de solidez financiera. Además, la empresa logró reducir su endeudamiento en un 10,91% en el pasivo no corriente, que son las deudas a largo plazo.

Fachada de las oficinas de Grefusa

Esa reducción del activo se explica en parte por un descenso del patrimonio neto del 2,55%, pero principalmente por la disminución del endeudamiento en un 10,91%. En contraste, el activo total de la empresa creció un 2,37% entre 2020 y 2021, impulsado por un aumento del activo no corriente del 13,67%.

En resumen, la patrimonial de la familia Gregori enfrentó una disminución en sus activos y presentó un EBIT negativo en 2022, pero mantiene una sólida estructura mediante una gestión financiera prudente y un enfoque en la sostenibilidad a largo plazo.

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