Actualizado
La antigua Avidesa, heladera de Consum y Masymas, eleva un 26% su ingresos hasta los 237 millones
La compañía, que mantiene un fuerte pulso inversor, achaca las pérdidas a la inflación mientras espera "el restablecimiento del margen"
Más ventas pero todavía en pérdidas. Ice Cream Factory Comaker, la antigua Avidesa (heladera de Consum y Masymas y de una referencia de Mercadona), disparó un 26% sus ingresos en el último año fiscal (de 1 de septiembre de 2022 a 31 de agosto de 2023) hasta superar los 237 millones de euros de facturación mientras que las pérdidas las redujo un 44%, al pasar de los 14,3 millones a los 8 millones ya que mantiene un fuerte ritmo inversor.
El motivo de esta evolución, según explica la compañía en las cuentas depositadas en el registro mercantil, se debe al impacto de la inflación. De hecho, la compañía asegura: «Para ejercicios futuros, la sociedad continuará enfocada en equilibrar la cuenta de resultados a través del restablecimiento del margen (revisión de los precios de venta acorde con el crecimiento de los costes) y en seguir apostando por la innovación».
Ice Cream Factory Comaker asegura haber experimentado un «sólido y continuado crecimiento» lo que le convierte en «líder de marca distribuidor a nivel nacional e internacional» y «con presencia en la fabricación y distribución de helados en España con marca propia con Camy«.
La presencia de la histórica Avidesa en la marca de distribuidor se concentra principalmente en Consum mientras también tiene una importante presencia en Masymas. Además, también realiza el helado Hacendado de un litro de vainilla para Mercadona.
«El presente ejercicio se ha caracterizado por la consolidación del incremento de costes en el ámbito industrial como consecuencia de la situación geopolítica y el impacto en los indicadores macroeconómicos al mismo tiempo que la complejidad en la gestión de las nuevas inversiones a las que la sociedad está haciendo frente fruto de su continua inversión en nuevas maquinarias e instalaciones para el desarrollo de nuevos productos que reclama el mercado», explica la compañía, cuyas cuentas en pérdidas pese al incremento de la facturación supone una prueba de que el efecto de la inflación, en primer lugar, dinamita los márgenes del sector alimentación.
Además, la compañía apunta que «las inversiones llevadas a cabo han impactado negativamente en la cuenta de resultados por la renovación de maquinaria más especializada en los nuevos productos».
Reorganización empresarial
Durante el pasado ejercicio, Ice Cream Factory Comaker procedió a «restructurar su estructura societaria a través de una fusión de las sociedades españolas e italianas simplificando así la estructura global del grupo» de manera que se unieron las marcas que proceden de la firma valenciana Avidesa y las del grupo Ferrero.
Mientras tanto, los productos procedentes del Grupo Ferrero ha continuado apostando por el desarrollo de los helados y ha seguido invirtiendo en todas las áreas de negocio, realizando importantes inversiones para consolidar y seguir creciendo en las dos plantas que la sociedad dispone actualmente, ubicadas en Alzira (España) y Castel d’Ario (Italia).