Goirigolzarri (CaixaBank) advierte que el auge del proteccionismo de EE UU y China daña a Europa

Goirigolzarri defiende en la asamblea de la CEV el sello valenciano de Caixabank y se compromete con el crecimiento de la Comunidad Valenciana

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

José Ignacio Goirigolzarri, presidente de CaixaBank, mandó ayer un mensaje de apoyo hacia lo local y de advertencia de los riesgos que nos llegan por la coyuntura global. Ante los empreasarios del patronal autonómica valenciana CEV advirtió que el mundo ha virado hacia el proteccionismo y hacia que cada país mire sólo a sus propios intereses antes que los del conjunto. Y esa forma de ver el mundo perjudica, especialmente, a Europa, según los datos que maneja el presidente de Caixabank.

El discurso de Goirigolzarri se juntó, como es habitual en él, con una férrea defensa de la condición de entidad valenciana que tiene Caixabank y con el interés de ser aliado de referencia del crecimiento económico de la Comunidad Valenciana. En paralelo, Goirigolzarri dió también un espaldarazo a la CEV, de la que forma parte desde sus primeros momentos en Bankia y que reafirmó ayer clausurando la jornada de la patronal de la Comunidad Valenciana en el Caixabank Forum de Valencia instalado en el edificio Ágora de la emblemática Ciudad de las Ciencias de Valencia.

Para explicar esta visión económica, Goirigolzarri se remontó 80 años con los acuerdos de Bretton Woods para, en síntesis, poner de manifiesto que aquel espíritu se ha difuminado hacia un creciente proteccionismo tanto desde China como de Estados Unidos «que empezó con Trump y continúa con Biden».

Apuntó que la llegada de China a la Organización Mundial de Comercio permitió un «equilibrio razonable» en la que se logró que el multilateralismo tuviera respaldo. Sin embargo, con la llegada de la pandemia y la invasión de Ucrania «se ha puesto en cuestión las cadenas de suministros y el concepto de globalización, que hay que redefinir atendiendo a la seguridad y a la afinidad política».

Este análisis tiene un efecto especialmente grave en Europa porque, apuntó Goirigolzarri, «si sumamos la exportación e importación de Europa supone el 50% del PIB, lo que es el doble que en Estados Unidos». Además, «el conflicto de Ucrania nos ha dejado desprotegidos de energía, tecnología y defensa«.

Además, apuntó que el crecimiento en los últimos 15 años en Estados Unidos es del 33% mientras que en Europa sólo del 13%. Y centrado en el sector financiero, lamentó que la fragmentación afecta al sector ya que «no tenemos unión bancaria». Como dato, recordó que en 2008 el mayor banco europeo era el HSBC «que tenía la misma capitalización que JP Morgan mientras que ahora tenemos que sumar ocho o nueve bancos europeos para empatar con el primer banco americano».

En clave nacional, advirtió de que en el medio plazo pueden darse tasas de inflación no tan bajas como en el pasado por varias razones, entre ellas el populismo, la desglobalización y la demanda de experiencias personales tras la pandemia mientras insistió en un «plan riguroso de disciplina fiscal» y reformas para mejorar la productividad.

Comenta el artículo

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Deja una respuesta

Ahora en portada
Mercadona sube un 8,5% el sueldo a toda su plantilla