Gedesco, en pleno concurso e investigación judicial, cierra su último local… que se convierte en discoteca

La caída y desintegración del Grupo Gedesco ha tenido en su último capítulo uno de los más simbólicos: el cierre y desmantelamiento del último local que el grupo financiero valenciano, que llegó a estar valorado en 1.000 millones de euros, mantenía abierto en su histórica sede de la Avenida de Aragón de Valencia.

El cierre de este último establecimiento que permanecía abierto como recuerdo de lo que un día fue la compañía dirigida por Antonio Aynat y Javier García-Escrivá, ambos investigados por el presunto desmantelamiento de la firma junto a otros miembros de su destituido consejo de administración y un listado de presuntos colaboradores, significa la bajada de persiana definitiva de la sede central de Valencia, que en su mayor parte ya fue desmantelada.

En concreto, la desaparición física de Gedesco, ahora inmiscuida en un concurso de acreedores que afecta tanto a su matriz como a cuatro de sus filiales, llegó cuando los gestores designados por el fondo de inversión JZ International (JZI) -máximo accionista de la compañía y denunciante del supuesto desvío del negocio de la financiera- tomaron oficialmente el control de la que fuera la quinta empresa por facturación de la Comunitat Valenciana, cuya actividad se centra en la financiación no bancaria, tras la destitución del consejo de administración por orden del titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Valencia.

Sin embargo, en vez de encontrarse con una compañía que en 2022 pretendía salir a bolsa con un valor de 1.000 millones de euros, se encontraron una cáscara vacía, un holding con la sede desmontada, los trabajadores en paradero desconocido y hasta una web corporativa que dejó de existir.

El emblemático edificio situado en la Avenida de Aragón número 2 de la capital valenciana ya no luce desde hace meses el enorme letrero que lo coronaba y que se codeaba con los de otras grandes compañías españolas e internacionales que se ubican en la zona. Además, los pisos que ocupaba el holding y sus diversas filiales se muestran vacíos también desde su desmantelamiento, con el nombre de Gedesco desaparecido, y sustituido por carteles de ‘Se alquila’.

Únicamente quedó, como testigo de la extinción del imperio Gedesco, un local situado en el bajo del edificio y que estaba dedicado al negocio de una de las filiales del grupo, Gedescoche, que se encuentra también en concurso de acreedores y que protagonizó la primera derivada que evidenció los efectos del derrumbe de este holding. Los clientes de la compañía de renting de vehículos y de concesión de créditos a cambio de la propiedad de los coches llevan meses moviéndose ante la indefensión e incertidumbre que viven.

Vehículos sin seguro, que no pueden pasar la ITV y consecuencias personales de todo tipo se repiten en incontables testimonios de los afectados.

Ahora, ese inmueble se encuentra ya también cerrado y desmantelado, tal y como ha podido comprobar ‘in situ’ este diario. Los coches y los pocos empleados que quedaban han desaparecido del local sin dejar rastro y ahora un enorme cartel cubre las obras del nuevo proyecto que ocupará este espacio y que se puso en marcha ya en 2022.

El nuevo negocio ocupa no solo el antiguo local de Gedescoche, en la parte del edificio que da a la avenida de Aragón, sino que se prolonga por toda la fachada, alrededor de la que fuera la puerta principal de Gedesco, hasta la otra cara del bloque, en la parte de la avenida del Puerto de la capital valenciana, donde antes se ubicaba un restaurante habitual para los empleados de la financiera y también para los propios Aynat y García-Escrivá.

El negocio que sustituirá a los bajos que antes ocupaban las firmas de Gedesco será un local de ocio nocturno, según ha podido saber Economía Digital, y, con más o menos intención, este proyecto ha utilizado un lema para publicitar su próxima apertura cargado de ironía, dada la actual situación de Gedesco y los procesos legales que lo envuelven. «Entre lo prohibido y…» se puede leer donde antes se exhibían los vehículos de Gedescoche, acompañado de un «Coming soon».

Así llega el final físico, el empresarial y judicial está por dilucidar, a la que fuera una de las grandes empresas de la Comunidad Valenciana y la primera financiera no bancaria de España, que incluso trató de convertirse en banco, salir al mercado bursátil y competir con las grandes financieras del país.

Los últimos pasos de la vía judicial del caso Gedesco

Los dos últimos grandes movimientos de este caso que tiene vías judiciales abiertas en diversos juzgados de lo Penal y de lo Mercantil de Valencia y Madrid han sido, por un lado, la extensión del embargo preventivo y urgente inicialmente cifrado en 47 millones de euros por los agujeros hallados en las tres principales filiales del Grupo Gedesco por parte del titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Valencia hasta alcanzar una cifra que ahora supera los 145 millones de euros.

El magistrado ordenó este embargo sobre Antonio Aynat, fundador y consejero delegado cesado por orden judicial de la dirección de la compañía, y sobre la empresa Toro Finance -cuya marca comercial es Bravo Capital-, de la que mantiene la gestión como consejero delegado, ante la «probable sentencia de calificación culpable» del concurso de las tres principales filiales del holding financiero: Gedesco Services, Gedesco Factoring y Pagaralia.

Tal y como adelantó este diario, la orden de confiscación de bienes en el caso de Pagaralia asciende a 47.184.874,15 euros, a lo que se suman 48.089.505,31 euros en el caso de Gedesco Factoring y 50.516.415,12 euros por Gedesco Services.

Por otra parte, el caso Gedesco mostró a finales del pasado ‘curso judicial’ una operación inusual por parte de un juzgado especializado en el área de Mercantil. En el mes de julio, la Policía Judicial procedió a la entrada y registro de la sede de Toro Finance -cuya marca comercial es Bravo Capital– en Valencia y se incautó de una ingente cantidad de información, pagarés, facturas y documentación relativa a la operativa del Grupo Gedesco y sus filiales.

En concreto, según la documentación judicial consultada y adelantada por Economía Digital, el administrador concursal de la matriz de la desintegrada financiera -hechos por los que se investiga penalmente a los fundadores de la compañía, Antonio Aynat y Javier García Escrivá, a miembros del consejo de administración destituido por orden judicial, como Miguel Rueda y Ole Groth y a presuntos colaboradores de todos ellos- se presentó acompañado de agentes de policía en la sede valenciana de Toro Finance y requisó archivadores con información sobre la actividad del grupo, cerca de 600 pagarés de la financiera, libros de registro de facturas, balance de situación, cuentas, balances de sumas y saldos, entre otra documentación.

La comitiva se llevó también de la empresa cuyo consejero delegado continúa siendo Antonio Aynat discos duros, se precintaron dos cajas con «documentación para destruir» así como otra caja con más documentación de interés. Según figura en la documentación consultada por este diario, la entrada y registró se prolongó durante cerca de diez horas en una primera jornada el 15 de julio, para proseguir al día siguiente.

Durante la extensa jornada de registro policial de la sede de Toro Finance, los abogados de Aynat Pablo Delgado -letrado también de Francisco Camps o del ex vicepresidente del Valencia CF, Miguel Zorío, entre otros- y Javier Roldán trataron, sin éxito, de lograr la impugnación de esta actuación autorizada por los juzgados de lo mercantil que están tramitando estos concursos de acreedores.

El juez dio el ‘ok’ a esta operación policial a petición del administrador concursal y ante la «completa y misteriosa desaparición» del «próspero negocio» que era Gedesco y sus infructuosos intentos por obtener la información necesaria por parte del ex administrador único de la sociedad, Antonio Aynat, porque las instalaciones y sedes del Grupo Gedesco «han sido vaciadas y abandonadas» y no se puede obtener ninguna información en ellas y porque existen «indicios reforzados» de que el negocio de la financiera ha sido «fraudulentamente trasvasado» hacia Toro por parte de Aynat.