Ford reúne en Tánger a los proveedores de Marruecos en busca de piezas para Almussafes
El alcalde de Almussafes remarca que el coste logístico desaconseja fabricar en África mientras Vicente Boluda incide en el retraso que tiene el tramo Almería-Granada para que el Corredor Mediterráneo una Algeciras con Francia
Ford ha reunido en Tánger a decenas de empresas ubicadas Marruecos para que se conviertan en proveedores del nuevo vehículo que Almussafes lanzará en el segundo trimestre de 2027. La reunión se produjo la semana pasada, al día siguiente de presentar las líneas básicas del vehículo híbrido que se montará en la planta valenciana.
Según explican las fuentes de la automoción que Economía Digital tiene en Marruecos, hubo overbooking en la reunión de Valencia y algunas multinacionales con presencia en el norte de África estuvieron en esta segunda cita. En ella, Ford invitó a la industria de la automoción instalada en el norte de África a participar en las RFQ (request for quotation/peticiones de presupuestos) que se espera que empiecen entre el próximo mes de septiembre y enero de 2025.
Tal y como se puede comprobar en fotografías a las que ha tenido acceso este periódico con el compromiso de no publicarlas, la explicación en Tánger del vehículo que se ensamblará en Almussafes la realizó Werner Puetz, vicepresidente de compras de Ford Europa. En primera fila estuvo Fernando Acebrón, director de relaciones institucionales de Ford España, y enlace tanto con la administración autonómica como central en España.
A nivel de la administración local, el interés de Ford de contar con proveedores del norte de África provoca rechazo. Toni González, alcalde de Almussafes, explica a este medio de comunicación que la preocupación de que la multinacional americana opte por proveedores africanos en vez de valencianos ya se puso encima de la mesa de Rebeca Torró. «Se lo comuniqué a la Secretaria de Estado hace mes y medio». apunta González.
El alcalde de Almusssafes duda que compense los costes logísticos de producir en África mientras cifra entre 200 y 250 euros al mes las nóminas en Marruecos, lo que supone «como mínimo seis veces menos que en España». Además, recuerda que están «los problemas que hubo hace unos años en el norte de África» de manera que «no sé hasta que punto la estabilidad el Magreb es interesante a día de hoy».
De todos los factores que apunta el alcalde socialista, el coste logístico es el que más puede cambiar en el próximo lustro. De hecho, iniciativas como el «Puente de Marruecos» de Maersk, concentrando su carga en el puerto de Tanger Med para evitar el pago de los impuestos de los ETS que se cobra en los puertos europeos y trabajando la multimodalidad para la redistribución de cargas, cambia el escenario logístico notablemente. Empresas como Baleària ya han elevado notablemente su negocio con Marruecos aprovechando el auge de su industria.
Mientras se producen estos temores en la automoción, que hace una década eran que el Corredor Mediterráneo permitiría la llegada de mercancías por el norte, en referencia a la competencia de Europa del Este, mientras ahora se teme por el sur, por Marruecos, el movimiento encabezado por Vicente Boluda y AVE mantiene firme su reivindicación de esta infraestructura.
De hecho, ayer el naviero enfatizó en el problema que hay en el tramo Almería-Granada, al que tildó como el «más retrasado del Corredor Mediterráneo» dentro de chequeo de las obras que desde el movimiento #QuieroCorredor realizan cada seis meses y que tiene como objetivo unir todos los puertos españoles entre Algeciras y la frontera con Francia.
Por otra parte, desde la administración autonómica, Carlos Mazón en la carta que envió a Pedro Sánchez enfatiza en la necesidad de «abordar la situación» que vive la factoría de Ford Almussafes «desde la colaboración, el consenso y la lealtad».
Por ello, Mazón le describe a Sánchez que «los agentes sociales, económicos, la Generalitat Valenciana y los representantes de la factoría de Almussafes, coincidimos en la necesidad de trabajar, desde el consenso y la lealtad institucional, en la búsqueda de fórmulas que garanticen la continuidad de un sector clave para la economía y para la riqueza, no sólo de la Comunitat Valenciana, sino de toda España y que ofrece empleo a miles de familias en nuestro país».
Nueve años buscando proveedores y más de un siglo de negocio en Marruecos
La intención de que Marruecos se convierta en un socio de referencia para las fábricas de Ford en Europa no es nueva. En 2015, Ford amplió su presencia en el norte de África estableciendo una nueva oficina regional en Casablanca, pero también convirtiéndose en el primer fabricante de automóviles extranjero en establecer una oficina de compras en Tánger. Esta oficina estaba destinada, tal y como comunicó la compañía, a apoyar la mayor competitividad de las operaciones de fabricación en las plantas europeas de Ford, incluidas Valencia en España y Saarlouis y Colonia en Alemania.
El actual responsable de innovación y transformación de Ford Almussafes, Carlos Moliner, era el director de compras locales para el norte de África en 2018, cuando en una nota de prensa de Ford dijo: «Marruecos juega un papel importante en la estrategia de abastecimiento de componentes automotrices de Ford a medida que continuamos ampliando nuestra base de proveedores para obtener componentes para nuestra gama de vehículos producidos en Europa».
De hecho, Marruecos siempre ha sido un destino predilecto para Ford. De hecho, durante la compañía americana lleva más de un siglo prestando servicios a sus numerosos clientes en Marruecos, a través de su importador-distribuidor local SCAMA (Société Chérifienne d’Automobile et de Materiel Agricole), filial del grupo Auto-Hall, sobre la base de un contrato de concesión. firmado en 1920 por el propio Henry Ford.