El Puerto de Valencia pisa el freno: exporta 100.000 coches menos que el año pasado

El motor en los puertos valenciano no arranca. Según el último boletín estadístico de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), que incluye el Puerto de Valencia, el de Sagunto y el de Gandia, se han dejado de exportar 110.036 coches respecto al año pasado en estos siete meses. Además, este último mes de julio el producto que más ha descendido de entre todos los sectores han sido los vehículos en régimen de mercancía en más de un 9% .

Excepto el mes de enero, que consiguió repuntar un 3%, los otros seis meses posteriores los coches han ido perdiendo fuelle y afectando así a la tendencia anual, que ya se va rebajando alrededor de los seis puntos. Respecto al mismo mes del 2023, se han sacado al exterior un 39% menos de estos productos de alto valor añadido.

Las razones de esta caída están directamente relacionadas con el descenso productivo de las principales plantas de automóviles en España, siendo la fábrica de Ford en Almussafes la más afectada, con una disminución del 30,3%. En el caso valenciano, el fin de la producción de la furgoneta Transit Connect ha dejado a la planta con solo un modelo disponible para la exportación, además de toda la incertidumbre generada por el modelo eléctrico.

De igual manera, el informe mensual del Ministerio de Economía muestra cómo la crisis en Almussafes ha impactado hasta tal punto que pasa a tener un déficit considerable. Es decir, la provincia de Valencia está importando vehículos por un valor superior al de sus exportaciones, a pesar de contar con una fábrica en su territorio.

Los datos de junio lo confirman: Valencia exportó automóviles por valor de 367,6 millones de euros, mientras que las importaciones ascendieron a 387,1 millones, lo que resultó en un saldo negativo de 19 millones de euros. No obstante, en el acumulado de los primeros seis meses de 2024, la balanza comercial se mantiene positiva, con un superávit de más de 197 millones de euros.

Eso si, el escenario que se empieza a vislumbrar con el anuncio de la Comisión Europea de establecer aranceles a los fabricantes chinos podría afectar al número de importaciones, siendo el primer socio comercial de la APV con un incremento del tráfico del 22%.

Es importante recordar que la planta de Almussafes ha atravesado múltiples desafíos, incluyendo un cambio hacia la fabricación exclusiva del modelo Kuga, lo que ha provocado reducciones en la plantilla y la implementación de un cuarto Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

Este tipo de ajustes subraya la vulnerabilidad del sector automovilístico, que, aunque puede ser un motor para la economía española como el segundo mayor productor europeo, también puede convertirse en un lastre si se enfrenta a cambios adversos, cómo informó Economía Digital.

A finales de junio, este sector fue el que más redujo sus exportaciones en comparación con el año anterior, con una caída superior al 11,4%, en marcado contraste con el crecimiento acumulado del 1,2%, lo que podría indicar una tendencia hacia la desaceleración.