Las medidas de Mazón tras la DANA: ayudas al alquiler, rehabilitación y financiación a empresas
El plan incluye medidas en vivienda, infraestructuras, empleo, medio ambiente y atención social, destacando la movilización de recursos extraordinarios para los 90 municipios más afectados
La Generalitat Valenciana ha puesto en marcha un plan de reconstrucción tras la devastadora DANA de octubre, que ha dejado graves daños materiales y sociales en la provincia de Valencia. Con un presupuesto de más de 350 millones de euros para liquidez financiera y acciones coordinadas entre distintas consellerias, el programa incluye ayudas directas, rehabilitación de infraestructuras, y medidas de atención a los afectados, abordando tanto la emergencia inmediata como la recuperación a medio y largo plazo.
50 millones en ayudas al alquiler y 6.005 inspecciones de viviendas dañadas
El Grupo de Edificación de la Unidad Básica de Evaluación de Daños ha inspeccionado hasta la fecha 6.005 viviendas, de las cuales 160 requieren demolición. Además, se han activado ayudas al alquiler por un valor de 50 millones de euros para propietarios e inquilinos, con un máximo de 800 euros mensuales durante un año. A la fecha, ya se han recibido 400 solicitudes.
Paralelamente, la oficina de gestión de realojos, en coordinación con los servicios sociales, trabaja para garantizar una reubicación ágil de las familias desplazadas. Hasta ahora, los esfuerzos han permitido habilitar albergues como el Centro de Emergencias de Burjassot (con 98 plazas) y el antiguo Hospital La Fe, que acoge a personas con necesidades de alojamiento temporal.
Plan financiero para el tejido industrial
El Institut Valencià de Finances (IVF) ha destinado 200 millones de euros a una línea de financiación a coste cero para empresas afectadas, complementada por otros 150 millones dirigidos específicamente a autónomos. Estas medidas incluyen hasta tres años de carencia y condiciones excepcionales, cubriendo los intereses con fondos públicos.
Por otro lado, se han aprobado deducciones fiscales, como exenciones en el IRPF y bonificaciones del 100% para la reposición de bienes dañados. Estas iniciativas buscan aliviar la presión financiera sobre las empresas, especialmente en sectores clave como comercio, turismo e industria.
Plan de choque de 75 millones para carreteras y limpieza de residuos
En materia de infraestructuras, la Generalitat ha reabierto 17 de las 18 carreteras dañadas, destinando 75 millones de euros a obras de emergencia. Además, se han habilitado 25 rutas de autobús sustitutivas para garantizar la movilidad en áreas donde Metrovalencia aún no ha restablecido su servicio por completo.
En paralelo, se han retirado más de 250.000 toneladas de residuos a través de cinco puntos de transferencia distribuidos en Alfafar, Manises, Quart de Poblet, Catarroja y Picassent. Este esfuerzo también incluye la gestión de lodos y el despeje de polígonos industriales, con la limpieza ya completada en San Francisco y Beniparrell.
Atención a la salud mental y servicios sanitarios reactivados
En el ámbito sanitario, por parte de la Generalitat se han rehabilitado 57 centros afectados por las inundaciones. Además, la Conselleria de Sanidad ha movilizado a 80 profesionales de salud mental para ofrecer atención psicológica en 13 puntos específicos, incluyendo apoyo a familias de víctimas.
Se ha reforzado la vacunación contra la gripe y el COVID con 11 equipos extraordinarios y emitido 511.000 recetas complementarias para garantizar el acceso a medicamentos a los pacientes de zonas afectadas.
La solidaridad también ha sido un pilar central. Más de 20.000 voluntarios, coordinados por el centro Som Solidaritat, han colaborado en la limpieza, distribución de alimentos y otras labores esenciales. Hasta el momento, se han gestionado 2.500 toneladas de ayuda por parte de la Generalitat, incluyendo bienes básicos y alimentos.
Rehabilitación ambiental y agrícola: 100 millones para depuradoras y 20 millones para caminos rurales
Sobre la gestión ambiental y agrícola, la administración valenciana ha destinado 100 millones de euros para reparar las 123 depuradoras dañadas, de las cuales 117 ya han sido rehabilitadas. En el ámbito rural, se han invertido 20 millones en la recuperación de caminos agrícolas y ganaderos, priorizando áreas críticas para salvar cosechas.
En L’Albufera, un plan en tres fases trabaja para retirar residuos flotantes y restaurar la calidad del agua, mientras que un «gemelo digital» permitirá monitorizar el estado del lago en tiempo real. De este modo, se podrán evitar de una manera más eficaz y rápida diferentes situaciones catastróficas como las que se han sufrido.
El plan de la Generalitat para afrontar los daños de la DANA quiere combinar medidas urgentes con iniciativas estratégicas a largo plazo. Desde la rehabilitación de infraestructuras hasta el apoyo financiero, la Generalitat busca no solo reparar los daños, sino también fortalecer la resiliencia de la Comunidad Valenciana frente a futuros desastres climáticos.