Daniel Lacalle: «La culpa de la inflación no la tiene Juan Roig, la tienen los políticos imprimiendo dinero»
El economista Daniel Lacalle fue tajante en su diagnóstico durante su participación en el Día de la Auditoría, un evento organizado por el Colegio Oficial de Censores Jurados de Cuentas de la Comunitat Valenciana.
El economista Daniel Lacalle fue tajante en su diagnóstico durante su participación en el Día de la Auditoría, un evento organizado por el Colegio Oficial de Censores Jurados de Cuentas de la Comunitat Valenciana. «La inflación no es culpa de Juan Roig ni de los supermercados; es resultado directo de la creación descontrolada de dinero por parte de los políticos y bancos centrales», afirmó, criticando duramente las políticas monetarias expansivas de los últimos años.
En su intervención, Lacalle ofreció un análisis exhaustivo del nuevo entorno monetario, subrayando cómo estas decisiones han distorsionado los mercados y afectado la economía global. Con un tono crítico pero didáctico, exploró temas como la expansión monetaria, el impacto de la tecnología y los desafíos de competitividad en Europa.
Los bancos centrales imprimen dinero para gobiernos que lo gastan como marineros borrachos
Daniel Lacalle
La inflación: un problema de política monetaria
Para Lacalle, la inflación no tiene su origen en las empresas ni en factores externos como la guerra de Ucrania, sino en la emisión descontrolada de dinero. «En 2020, se creó en Alemania más dinero en seis meses que en toda su historia previa. Los gobiernos han gastado como marineros borrachos, financiados por bancos centrales que imprimen sin medida», explicó.
El economista destacó que esta situación ha generado un exceso de liquidez que desestabiliza los mercados y deprecia las monedas. «La inflación no es otra cosa que la pérdida de poder adquisitivo de la moneda, y eso solo ocurre cuando se imprime dinero sin respaldo«, subrayó.
En ese sentido, Lacalle advirtió que en 2025 los bancos centrales tendrán que absorber esta «basura monetaria», un proceso que podría generar inestabilidad y dificultar la recuperación económica. No obstante, aseguró que no debe haber «ningún temor» con respecto a caer en otra crisis económica, ya que los tipos de intereses van a estar relativamente elevados y la economía continuará estando boyante.
Las expectativas de bajadas de tipos: un espejismo optimista
Lacalle también analizó las expectativas de bajadas de tipos de interés, calificándolas de «irrealmente optimistas»: «Se habla de 200 puntos básicos de bajada el próximo año, pero la inflación sigue siendo alta y la cantidad de dinero en el sistema es enorme», afirmó. Según él, estas expectativas podrían llevar a decisiones empresariales precipitadas y a una asignación ineficiente de recursos.
El economista instó a las empresas a prepararse para escenarios adversos: «Hay que estar listos para lo peor, porque solo así podremos generar lo mejor». Además, recordó que una reducción limitada de tipos podría ser insuficiente para contrarrestar el impacto de años de políticas expansivas.
La tecnología es la única via de progreso y Europa no va bien
En un giro positivo, Lacalle destacó el papel de la tecnología como una de las pocas herramientas capaces de contrarrestar los efectos negativos de las políticas monetarias. «La inteligencia artificial y la digitalización son el presente, no el futuro. Los países más digitalizados tienen tasas de desempleo significativamente más bajas que aquellos que no han incorporado estas herramientas», afirmó.
El economista lamentó que Europa esté perdiendo mucho terreno en esta revolución tecnológica. «Estamos como avestruces con la cabeza bajo tierra mientras otros lideran. Europa necesita presentarse a esta batalla, pero seguimos aferrados a modelos obsoletos «, criticó. Según Lacalle, la falta de innovación y digitalización está condenando a Europa a una posición secundaria en la economía global.
Monedas digitales: un riesgo para las libertades individuales
Otro de los temas centrales de la intervención de Lacalle fue el análisis de las monedas digitales emitidas por los bancos centrales. Para él, estas herramientas representan una amenaza directa a las libertades individuales. «Las monedas digitales no son dinero electrónico. Son programables, lo que significa que los gobiernos podrían decidir cuánto puedes gastar, en qué y cuándo«, advirtió.
Lacalle explicó que el diseño actual de estas monedas está pensado para obligar a su adopción, eliminando la neutralidad y la fungibilidad del dinero. «Este modelo no tiene nada que ver con el progreso. Es un intento de controlar a los ciudadanos y mantener sistemas económicos insostenibles», señaló.
Europa: una región en declive competitivo
El economista dedicó una parte significativa de su discurso a analizar el papel de Europa en el contexto global, calificándolo de «preocupante». «Mientras Estados Unidos lidera en tecnología, libertad económica y competitividad, Europa sigue atrapada en una maraña de burocracia y altos impuestos«, afirmó.
Lacalle criticó que Europa y España aplauda tasas de crecimiento del 3% mientras su deuda crece al 7%. «Estamos perdiendo la batalla económica porque no priorizamos lo que realmente importa: innovación, competitividad y sostenibilidad fiscal», subrayó.
Además, hizo un llamado a reformar las políticas industriales y tecnológicas para evitar que Europa siga siendo un «zoológico de dinosaurios». «Nuestra bolsa está llena de empresas dinosaurio. Necesitamos apostar por startups y sectores emergentes si queremos tener un futuro», afirmó.
Europa está perdiendo la batalla tecnológica mientras se aferra a modelos prehistóricos
Desafíos globales: una economía en transformación
Lacalle también abordó los desafíos globales, desde los riesgos geopolíticos hasta la polarización política y económica. «El liderazgo de Estados Unidos no se puede cuestionar siendo más débiles que ellos y Europa, en el fondo, lo sabe. La clave es competir con mejores políticas, no intentar desplazar su modelo», explicó.
El economista destacó que la tecnología y la desintermediación están redefiniendo las reglas del juego económico. «Blockchain, inteligencia artificial y otras herramientas están eliminando intermediarios y cambiando la dinámica de muchos sectores. Los estados están perdiendo cada vez más poder y esto no ocurrirá en 30 años, está pasando ahora», enfatizó.
Un mensaje claro: actuar con responsabilidad y visión
En sus conclusiones, Lacalle insistió en que los problemas actuales no son insuperables, pero requieren decisiones responsables. «Hay que dejar de culpar a factores externos y centrarse en lo que podemos controlar: mejorar nuestras políticas, adoptar la tecnología y fomentar la libertad económica», concluyó.
El discurso de Daniel Lacalle en el Día de la Auditoría dejó un mensaje claro: el futuro económico dependerá de nuestra capacidad para adaptarnos a un entorno en constante cambio, abordando los desafíos actuales con realismo y aprovechando las oportunidades que ofrece la innovación.