Ciudades virtuales y gemelos digitales o avances para evitar el cáncer: las posibilidades infinitas de la IA

En esta nueva edición del ValgrAI Scientific Council Forum se ha puesto en valor iniciativas como el Citicom.ai, donde la Comunitat Valencia es referente

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Diferentes personalidades del campo de la inteligencia artificial han abordado todas las oportunidades que pueda brindar esta herramienta como puede ser la elaboración de un gemelo digital de la ciudad de Valencia para interactuar de mejor manera con todos los servicios o avances científicos gracias a la IA que podrían llegar a evitar el cáncer. Todo ello se ha expuesto en el III Foro del Consejo Científico ValgrAI 2024, celebrado en Valencia.

Como apertura, el director del Instituto Universitario Valenciano de Investigación en Inteligencia Artificial (ValgrAI), Vicent Botti, que lleva más de 30 años investigando en este campo, ha destacado que la Comunitat Valenciana y la ciudad de Valencia son «uno de los referentes europeos por la calidad de nuestros investigadores a nivel internacional».

De hecho, Valencia fue elegida por la Comisión Europea para ser la sede social del Consorcio Europeo de Infraestructuras Digitales y Citiverso, en lo que Botti ha considerado “una oportunidad muy grande para impulsar el sector tecnológico y facilitar en gran medida la vida de las personas que vivan en el territorio”.

Un ‘gemelo virtual’ de Valencia

Una de las ponencias más interesantes de la jornada y que se está desarrollando de manera pionera en la Comunitat Valenciana es todo lo relacionado con los conceptos de «ciudades inteligentes».

El jefe de Servicio de Ciudad Inteligente y Gestión de Datos en el Ayuntamiento de Valencia, Ernest Faubel, ha explicado que un gemelo virtual es «como tener una copia digital de una ciudad real que nos permite ver cómo funcionan los edificios, las calles y los servicios, ayudando a planificar y resolver problemas antes de que ocurran. Es como tener una bola de cristal que nos muestra cómo mejorar nuestra ciudad para que funcione de manera más eficiente y sea un lugar mejor para vivir».

Sobre los efectos que podría tener la plena implantación en cinco años del programa Citicom.ai, donde Valencia recibirá un presupuesto total de 7 millones (cofinanciado al 50% por la UE), Faubel ha afirmado que las empresas están “locas” por encontrar personas formadas en estas herramientas y no las encuentran: “Es una gran oportunidad para ser un polo de atracción empresarial, pero sobre todo de talento”.

Por su parte, la experta en Transformación Digital en la empresa Nunsys, Patricia Tamarit, que participa en este proyecto europeo, ha afirmado que las ciudades europeas «necesitan soluciones avanzadas que les permitan prever y aplicar diversas posibilidades».

Por este motivo, la herramienta ToolBox Project proporcionará un mercado creativo con algoritmos eficientes y todo tipo de soluciones capaces de resolver necesidades urbanas como el tráfico o la contaminación: «Prever las posibilidades que queremos aplicar en la ciudad y también preguntar a los ciudadanos es muy importante», ha asegurado .

Dirigiéndose a los desarrolladores, que eran la gran mayoría del público presente, ha destacado la importancia de la caja de herramientas gemelas del líder local, en la que se pueden controlar diferentes parámetros de una ciudad.

«Las empresas están locas por encontrar personas formadas en estas herramientas»

Jefe de Servicio de Ciudad Inteligente y Gestión de Datos en el Ayuntamiento de Valencia, Ernest Faubel

«No estamos reinventando la rueda, pero estamos aportando mucho valor nuevo, un nuevo nivel de conjuntos de datos y características que ofrecen varias oportunidades para desarrolladores, empresarios e investigadores», ha explicado. Un ejemplo destacado es la creación de una base de datos que caracterizará cada edificio en Europa, desde el hogar de una persona mayor hasta las oficinas de empresas, lo que puede ayudar, por ejemplo, a saber si una persona dependiente ha sufrido algún accidente.

Por último, Tamarit ha puesto como ejemplo de avance que la herramienta también ayudará a entender los costos de reconstrucción en caso de desastres como podría ser el Incendio de Campanar, utilizando inteligencia artificial y visión satelital para estimaciones precisas. «Podemos identificar un vecindario, un área específica, y obtener exactamente la ubicación y clasificación de los diferentes edificios», ha enfatizado. Esto, asegura, permitirá una respuesta rápida y eficiente ante catástrofes como inundaciones o terremotos.

Cambiar el rumbo hacia una tecnología «más social»

Más allá de los diferentes expertos, los estudiantes que están en los cursos de doctorado o postdoctorado en ValgrAI también han mostrado los diferentes avances que han logrado en sus investigaciones con la IA. Algunos de los ejemplos han sido juegos más interactivos con realidad aumentada, reparación de instalaciones submarinas con robots o, especialmente, utilizar la innovación tecnológica para que las personas mayores puedan tener más autonomía.

Por ejemplo, en 2050, el número de personas mayores de 60 años se habrá duplicado, por lo que estudiantes como Isabel Ferri, ganadora del primer premio ValgrAI al mejor Máster o la profesora de investigación en el Instituto de Robótica (CSIC-UPC), Carmen Torras, ya están abordando esta problema en sus respectivos ámbitos.

Asimismo, Torras apuesta por utilizar robots sociales, diseñados para interactuar y comunicarse con las personas mayores. Pueden ofrecer una compañía constante, reduciendo la sensación de soledad y aislamiento.

«La robótica asistencial es un campo de rápido crecimiento destinado a ayudar a los profesionales sanitarios de hospitales, centros de rehabilitación y residencias infantiles, así como a capacitar a las personas con movilidad reducida en casa, para que puedan realizar de forma autónoma sus actividades de la vida diaria», ha explicado Torras.

El problema, ha matizado, es que es necesarios que estos asistentes robóticos tengan interfaces amigables, sean adaptables y que además puedan manejar materiales deformables.

«Necesitamos invertir en los servicios sociales, porque las personas cada vez serán más y ya estamos viendo como de complicado es gestionar toda esa cantidad de población. No debemos quedarnos atrás y hacer que estas personas puedan ser más autónomas», ha concluido.

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Ismael Cirujeda

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