El número de afectados por los ERTE-DANA se estabiliza en 19.000 tras volver Ford a trabajar

El problema del empleo por la DANA ya tiene una dimensión clara. Hay 19.000 trabajadores afectados por los ERTEs por fuerza mayor y ésta es la magnitud del problema laboral. Falta sólo saber cuánto durarán en este estado.

Desde el 29 de octubre, las empresas afectadas de manera directa o indirecta, ambas sin poder trabajar por fuerza mayor, decidieron suspender los puestos de trabajo que no podían realizar su función. Empezaron a presentar ERTE por fuerza mayor afectando hasta a más de 31.000 trabajadores, todos ellos aprobados con agilidad por parte de consellería de Empleo.

El número de expedientes de regulación de empleo presentados fue aumentando progresivamente hasta registrarse el pasado 15 de noviembre el pico de ERTE por fuerza mayor aprobados, con un total de 267.

Más de 4.000 empleados eran de Ford Almussafes, que tras solucionar los problemas que tuvo Industrias Alegre, arrasada por la DANA, pudo reactivar su producción a dos turnos el pasado 2 de diciembre. Ahí es cuando se abandonó el pico de afectados por los ERTE-DANA hasta acercarse a la situación actual.

Los expedientes de regulación de empleo por fuerza mayor se han presentado para afectar a un máximo de 31.000 empleados pero, tal y como confirma a Economia Digital el secretario autonómico de empleo, Antonio Galvañ, el uso real de las autorizaciones para suspender el empleo que se están aplicando actualmente asciende a 19.000 empleados.

La caída de 12.000 trabajadores menos en ERTE de fuerza mayor se debe, fundamentalmente, a que 4.000 empleados de Ford y su parque de proveedores más directo, han dejado de estar con este tipo de expediente al haberse podido reanudar la producción.

Además de esta importante bajada, el freno casi absoluto de los nuevos ERTEs solicitados permite a la conselleria de Empleo delimitar de una manera definitiva el alcance del problema. Ya no sé prevén aumentos signficativos del número de afectados y tampoco existen a la vista singularidades tan relevantes como la ocurrida en Ford como para pensar que en un breve espacio de tiempo el número de afectados por los ERTE por fuerza mayor pudieran verse reducidos.

El hecho de tener delimitido el problema permite también crear nuevas soluciones o diseño de ayudas en las que la conselleria de Educación, Universidades y Empleo, ya están trabajando.

Sobre lo que ya existe un desiquilibrio no corregido es en la diferencia que viven las empresas, que pueden acudir a los ERTE RED y suspender el pago a la Seguridad Social, y los autónomos para los que no existe exención el pago sino aplazamiento, lo que supone postponer el problema que se convertirá en el pago de dos cuotas de autónomos dentro de varios meses, momento para el cual no existe la certeza de una recuperación económica tan vigorosa como para poder asumir dicho incremento de los costes fijos.