Pinchazo de la economía valenciana: el PIB crecerá el 2,4%, menos de la mitad que en el 2022
A pesar de la ralentización de la economía comunitaria, las exportaciones gozan de buena salud y el ritmo de creación de empleo se ha mantenido
La economía valenciana ralentiza su ritmo de crecimiento: del 5,7% que había subido el PBI comunitario durante el 2022, este año habrá aumentado menos de la mitad, un 2,4%, revela un estudio de CaixaBank Research.
Según la entidad, el año pasado la economía tuvo el empuje del turismo doméstico y el tirón del consumo, “apoyado en el buen tono del mercado laboral”.
Además, la Comunidad Valenciana estuvo menos afectada de lo esperado “por los problemas de suministros en los mercados internacionales”, ha precisado el banco.
Un segundo semestre con turbulencias
Pero en cuanto a 2023, que vivió una primera parte con “una notable resiliencia”, se encuentra en un segundo semestre “ensombrecido por el debilitamiento de la demanda externa, que está afectando a la actividad industrial y a las exportaciones”.
Sin embargo, no todas son malas noticias para la Comunidad Valenciana: CaixaBank Research precisa que se sigue creando empleo “a buen ritmo, y el sector turístico recupera las cifras prepandemia”.
Precisamente, sobre el mercado laboral, el estudio indica que la Comunidad Valenciana ha tenido una mejor evolución que el conjunto de España, donde el aumento de los afiliados a la Seguridad Social, que en 2022 ha sido del 4,7%, ha superado en ocho décimas a la media española.
Aunque en octubre de este año ese crecimiento ha disminuido al 2,8%, la cifra de afiliados ha superado en un 9,8% al nivel de octubre (mientras que en España ha sido del 7,1%).
Entre las actividades que han sido más dinámicas en la generación de empleo están la educación, la hostelería y las actividades sanitarias.
En tanto la tasa de paro se sitúa en el 11,8% en el tercer trimestre de 2023, cifra que iguala la media española y que mejora los registros del cierre de 2019 (14,1%).
La industria, con el freno de mano puesto
El consumo en la Comunidad Valenciana ha sido mejor que la media española, con un aumento del 9,2% interanual (frente al 8% del promedio del país).
En cambio la producción industrial presenta «una evolución algo peor que el conjunto de España», ha observado CaixaBank Research.
Tras crecer en 2022 un 2,3%, apenas una décima por debajo de la media, el IPI retrocede un 3,0% interanual en enero-septiembre afectada por el debilitamiento de la demanda externa.
Una buena nota merece las exportaciones valencianas, que han crecido el 22,2% en el año, ligeramente por debajo de la media nacional, lideradas por las semimanufacturas -sobre todo las de productos químicos- y del automóvil.
En tanto el turismo, que tuvo una recuperación post pandemia más modesta que el sector en toda España, destaca por tener una menor dependencia de los visitantes internacionales comparado con otras regiones.