BBVA ve un «disparate» el impuesto a la banca y espera tumbarlo: «A lo mejor es ilegal y tienen que devolverlo»
Desde Banco Santander lamentan que "la necesidad de que la banca sea rentable no permea en la sociedad"
BBVA considera el recientemente aprobado impuesto permanente a la banca un «disparate» y cree que «sí hay visos de tumbarlo en los tribunales», por lo que «a lo mejor es ilegal» y el Gobierno «lo va a tener que devolver» a las entidades financieras.
Así lo ha manifestado este jueves en Valencia Jorge Sicilia, economista jefe del Grupo BBVA y director de BBVA Research, durante su intervención en la XII Jornada del Sector Bancario Español, organizada bajo el título ‘Oportunidades y retos a los que se enfrenta el Sector Bancario Español’ por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie).
En esta mesa redonda, el Ivie ha reunido a representantes de los grandes bancos españoles. Además de Sicilia en representación del BBVA, también han participado en esta conferencia Tomás Riestra, director del Servicio de Estudios a cargo del Sistema Financiero del Banco Santander y Oriol Aspachs, director de Economía Española de CaixaBank, en una charla que ha dirigido Joaquín Maudos, director adjunto de Investigación del Ivie.
Preguntados específicamente por el impuesto a la banca aprobado por el Congreso de los Diputados, con los 178 votos a favor del Gobierno y sus socios, en el marco de la reforma fiscal del Ejecutivo, que estuvo en vilo hasta el último momento, y que transforma en permanente el impuesto a la banca, Sicilia ha afirmado que «los juristas dicen que sí hay visos de tumbar este impuesto en los tribunales».
El economista jefe del Grupo BBVA y director de BBVA Research ha calificado de «disparate» este gravamen, desde ahora permanente, porque «el propio concepto de beneficios extraordinarios es muy extraño«. «Antes no se hablaba de pérdidas extraordinarias, se asumía. Además, los beneficios no son simétricos.», ha añadido en este sentido.
«Obviamente, la banca ya paga impuestos y cuanto más gana más paga», ha continuado Sicilia, que ha expuesto que este impuesto «da lugar a equívocos en la señal de lo que significan los beneficios». En esta línea, ha defendido que, si tan espectaculares fueran estos beneficios, habría más interés sobre el sistema financiero: «Yo no he visto ningún operador queriendo entrar en el sector bancario. No hay beneficios que justifiquen ese tipo de inversión», ha dicho sobre este punto.
Igualmente, ha criticado que este gravamen «está mal diseñado«. «En realidad, está gravando ingresos, no beneficios extraordinarios. Y se puede tener muchos ingresos y muchas más pérdidas. Cuando se quiere poner impuestos especiales, siempre se piensa en que ese sector implica daños, como en el caso del cambio climático, el tabaco, el consumo de azúcares… Pero no en un sector que es una cadena de transmisión de la economía y que funciona de manera bastante eficiente», ha expuesto el representante de BBVA.
En este sentido, ha reivindicado que «los tipos de crédito son mucho más bajos en España que en el resto de Europa, es un sector que contribuye al crecimiento económico y que tiene externalidades positivas».
Impacto sobre el 0,9% del PIB para gravar un 0,1%
«No hay ningún académico respetable ni ningún organismo internacional que avale este impuesto. A lo mejor es ilegal y lo van a tener que devolver», ha denunciado el economista jefe del Grupo BBVA.
Además, ha continuado, «se ha diseñado por tamaño, por lo que están desincentivando el tamaño en un momento en el que los costes tecnológicos van a ser muy elevados».
Sicilia ha puesto de relieve también que «un impuesto permanente a la banca diseñado para recaudar un 0,1% del PIB afecta en un decrecimiento del PIB del 0,9%». Además, ha concluido, «muchísimo del negocio que generan los bancos se genera en otros países, en los que ya pagan impuestos».
Cuestionados por los riesgos reputacionales que afrontan los bancos en la sociedad española, Tomás Riestra, del Santander, ha comentado que la banca «siempre ha estado muy castigada en el imaginario popular». «Hemos crecido viendo Mary Poppins y Qué bello es vivir«, ha bromeado, para añadir que, además, «la crisis financiera y el rescate hizo muchísimo daño a la confianza hacia el sector en la población».
Sin embargo, considera que tener oficinas «a pie de terreno» ayuda al Banco Santander a «dar soluciones mucho más rápidas» y esto repercute en la satisfacción de la población. Pese a todo, y relacionado con lo expuesto por su compañero de BBVA, ha lamentado: «La necesidad de que la banca sea rentable no permea en la sociedad. Es la primera línea de defensa del sistema bancario».
Riesgos geopolíticos
Antes de abordar el impuesto a la banca, Maudos ha expuesto que «ya queda muy atrás el golpe al sector financiero tras la crisis de 2008″ y ha reivindicado que la banca «hizo los deberes, se reestructuró y cuando el horizonte se iba despejando apareció la pandemia», por lo que el sistema financiero español pasó «unos años de desierto de tipos negativos».
«Después se subieron los tipos y ahora afrontamos nuevas bajadas que pueden afectar a la rentabilidad. La banca española es más eficiente que la europea, aunque en solvencia estamos en el último puesto. Hay fortalezas, pero también debilidades», ha desgranado el representante del Ivie.
Igualmente, ha destacado «riesgos geopolíticos» como el conflicto en Oriente Próximo, las elecciones en Estados Unidos, «el desapalancamiento que no termina en las empresas», los «riesgos climáticos» que crecen como se ha visto con la DANA en Valencia o los riesgos reputacionales. Por el contrario, también hay oportunidades, como los fondos Next Generation.
Tipos de interés en el 2%
Jorge Sicilia ha cogido el testigo para afirmar que ya se ha «tocado techo» en las subidas de tipos de interés y la pregunta es, ha añadido, «a dónde vamos a llegar con esta caída de rentabilidad».
«El sistema financiero va a seguir teniendo rentabilidad por la composición de los depósitos, ya que hay un exceso muy significativo de liquidez; por el crédito, que va a crecer en los últimos años; el exceso de liquidez en el sistema financiero, que evita buscar financiación mayorista, que suele ser más cara; la contención de costes, ya que el sistema financiero español es extraordinariamente eficiente; porque la morosidad es baja…», ha expuesto el representante de BBVA.
Oriol Aspachs, de Caixabank, ha agregado que «hay vientos que no van a favor, como el inicio de la bajada de tipos» y ha asegurado que esta entidad bancaria espera tipos en el 2% para el segundo semestre de 2025.
Tomás Riestra, de Sabadell, ha explicado que la banca española «va al sector minorista, se dedica a lo que se denomina la banca aburrida». Sin embargo, precisamente esto ayuda a que, «ante un escenario muy severo económico, los bancos españoles responderían mucho mejor que sus competidores europeos».
Baja morosidad, gran ahorro de los mayores y crecimiento de España al 2%
El economista jefe del Grupo BBVA ha aventurado además es que el escenario central que contemplan es que «la mora no va a ser un problema para el sistema bancario español».
«Con el proceso muy agresivo de tipos que hemos vivido la mora no se ha deteriorado. Los tipos pesan mucho menos que el mercado laboral y su comportamiento ha sido muy positivo en estos años. Además, las entidades van a seguir siendo muy cautelosas en la concesión de crédito«, ha agregado.
Igualmente, ha advertido que en las familias hay un «crecimiento del ahorro fortísimo», aunque ha precisado que «está aumentando mucho más en los segmentos de edad más altos».
Sobre el escenario económico, BBVA «no tiene previsiones de que el crecimiento de España vaya a bajar del 2% en los próximos dos años ni que el mercado laboral se vaya a deteriorar».
«El riesgo que más me preocupa es que en Europa la productividad ha caído mucho porque ha habido mucha retención de trabajadores. Aun así, España está mucho mejor colocada que el resto de países europeos», ha zanjado en este tramo de análisis.
Caixabank no aumentará el coste de la financiación en zonas inundables
Preguntados por el impacto del cambio climático, especialmente tras la devastadora DANA que ha arrasado gran parte de la provincia de Valencia, Aspachs ha comentado que «la banca tiene que estar ahí, liderando el cambio hacia una economía más sostenible».
«Una pieza clave en todo este proceso son los datos. Son eventos que es muy difícil predecir dónde se van a producir o con qué severidad. Todos los bancos estamos trabajando con mapas de riesgos climáticos. Hay un compromiso de Caixabank y Santander de descarbonizar las carteras para 2030. También se debe hacer un acompañamiento a todos los clientes en este proceso de descarbonización», ha desarrollado el director de Economía Española de CaixaBank, que igualmente ha subrayado que el sector financiero «ve una oportunidad en la financiación de la transición hacia la sostenibilidad en la economía».
Con ello, Aspachs ha apuntado que «cada vez que ocurre un shock de este tipo, es un aprendizaje para la banca» pero, pese a este impacto, ha asegurado que en Caixabank no se plantean aumentar los costes de los créditos en zonas inundables.
En relación a la DANA, las entidades han explicado que están actuando con varios tipos de ayudas, como los créditos especiales a través de las líneas ICO, las moratorias a los préstamos de empresas y particulares o el adelanto de las ayudas para la compra de vehículos. Los ponentes confían en que los 5.000 millones de los créditos previstos en las líneas ICO se puedan utilizar, aunque, por el momento, la demanda no es muy elevada.
En otro plano de acciones de apoyo se sitúan las actuaciones de voluntarios impulsadas por las propias entidades o el trabajo de análisis de datos que están realizando respecto al impacto de la catástrofe en el consumo, como ejemplo, que pueden servir de base para construir las políticas de reconstrucción.
La oferta de vivienda «empieza a despertar»
Oriol Aspachs ha analizado también la situación del sector inmobiliario en España, sobre el que prevé que «va a coger más fuerza y dinamismo en los próximos años».
«La oferta de vivienda empieza a despertar después de varios años de cifras bajas de inicio de nuevas viviendas. Esto ganará dinamismo para cerrar el gap entre oferta y demanda» y «esto va a empujar al incremento del crédito», ha zanjado el director de Economía Española de CaixaBank.