El precio de la vivienda en Valencia recupera el ritmo de subida del boom de hace 20 años

El mercado inmobiliario de la Comunitat Valenciana ha registrado un incremento interanual del 16,3% en agosto de 2024, el aumento más alto de la serie situando el precio medio de la vivienda en 1.971 euros por metro cuadrado, según el Índice Inmobiliario Fotocasa.

Este ritmo de subida de precios es el que tenía la vivienda valenciana hace 20 años, en pleno boom inmobiliario. El informe que entonces hacía la auditora KPMG con el patrocinio de la CAM (Caja Mediterráneo ahora integrada en el Sabadell) cifró que en 2004 el precio medio de la vivienda subió un 17% en España y un 14% en la Comunidad Valenciana. Entonces, el precio medio se situaba en 1.215 euros.

Pasadas dos décadas, con un precio más de un 50% superior, la preocupación se centra en la asequibilidad de la vivienda puesto que se está produciendo un gradual incremento en las subidas de precios. No sólo se eleva el precio sino que las alzas son cada vez mayores. En agosto de 2023, el crecimiento del precio de la vivienda fue del 11,2%. Una de las diferencias entre una etapa y otra es que hace 20 años la Comunitat Valenciana tenía precios muy debajo de la media nacional e incluso crecimientos de los precios inferiores al resto de España. Ahora, es la tercera región que más inflacción inmobiliaria sufre.

Alicante desbanca a Valencia

A nivel provincial, Alicante ha experimentado el mayor incremento con un 17,7%, alcanzando los 2.302 euros/m², superando incluso a la ciudad de Valencia, donde los precios han subido un 12,1%, situándose en 1.756 euros/m².

El director del Observatorio de la Vivienda de la UPV, Fernando Cos-Gayón, resaltó que el mercado valenciano lleva más de siete años enfrentando un fuerte desequilibrio entre oferta y demanda, lo que ha disparado los precios. «El precio de la construcción sigue aumentando y también lo están sufriendo los promotores», afirmó Cos-Gayón.

«Estamos fabricando Lamborghini a precio de Škoda»

Fernando Cos-Gayón, director del Observatorio de la Vivienda de la UPV

Sobre todo, apuntó que la falta de suelo disponible está en las zonas donde la gente desea vivir y que, además, las características de las viviendas son demasiado exigentes para el público al que se dirige: «Estamos fabricando Lamborghini a precio de Škoda», criticó, llamando a rebajar algunas normativas, como la eficiencia energética, para abaratar los costes.

Este enfoque pretende aliviar la presión sobre los precios del mercado libre, especialmente en áreas como Alicante, donde municipios como Mutxamel y El Verger han experimentado incrementos de hasta el 74,2% y 59,6%, respectivamente: "Siempre nos llenamos la boca con Viena, pero no construyo su parque público con viviendas de lujo como estamos haciendo aquí", destacó el director del Observatorio.

El reto del agua y la mano de obra también encarece la construcción

El precio de la vivienda no solo está impulsado por la demanda, sino también por los costes de construcción, que han aumentado más del 60% en los últimos años. Begoña Serrano, directora del Instituto Valenciano de Edificación, explicó que el coste por metro cuadrado ha subido de 877 euros en 2012 a más de 1.048 euros en 2022. Además, la escasez de mano de obra especializada y el incremento en el coste de materiales como el cobre han contribuido a encarecer el proceso de edificación.

Para Serrano, otro factor crucial es la falta de ayudas a la promoción de vivienda asequible y la necesidad de unificar criterios a nivel nacional para fijar precios máximos. "En 2023 y 2024, estamos hablando de 2.400 euros por metro cuadrado para una vivienda de 70 u 80 metros, un precio inalcanzable para muchos", señaló.

Ante estos desafíos, el nuevo decreto de VPP pretende ofrecer un marco de actuación que, con el apoyo de promotores y políticas de fomento del acceso a la vivienda, busca hacer frente al panorama alcista del mercado inmobiliario en la Comunitat Valenciana, donde la brecha entre la oferta de vivienda y la capacidad adquisitiva de los ciudadanos continúa ampliándose.

En este contexto, el gobierno valenciano ha anunciado un nuevo decreto de Viviendas de Protección Pública (VPP) como respuesta para frenar la escalada de precios y garantizar el acceso a la vivienda para colectivos vulnerables.

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha subrayado que este nuevo reglamento busca "corregir la preocupante situación del mercado inmobiliario valenciano", marcado por un desequilibrio entre oferta y demanda.

La situación actual del mercado inmobiliario está sido especialmente perjudicial para los jóvenes y familias de rentas bajas, quienes encuentran cada vez más dificultades para adquirir una vivienda ante el rápido incremento de precios. Ahora, el nuevo decreto prevé una reserva mínima del 40% de las viviendas para estos colectivos y recupera la liberalización de las VPP a los 15 años, dependiendo del tipo de suelo.