La patronal del sector citrícola ve «inasumible» la subida salarial propuesta por los sindicatos
El Comité de Gestión de Cítricos carga contra UGT y CCOO por anunciar una huelga en diciembre tras solo cuatro reuniones y después de las destrozas ocasionadas por la DANA
El Comité de Gestión de Cítricos (CGC) ha cargado contra los sindicatos por anunciar una huelga para las primeras semanas de diciembre. La patronal critica esta decisión, tomada tras haberse reunido solo en cuatro ocasiones, y después de las destrozas que ha ocasionado la DANA, que han provocado que se pierdan tres semanas de recolección y comercialización por las lluvias, además de tachar de «inasumible» las subidas salariales propuestas por UGT y Comisiones Obreras.
La convocatoria se produce en relación con la negociación del Convenio Colectivo de Manipulado y Envasado de Cítricos, que regula las condiciones laborales de más de 55.000 trabajadores en la Comunitat Valenciana, y que tiene un impacto significativo en todo el sector, ya que desde la región se expiden el 70% de los cítricos frescos del país.
«Tras suspender la parte social hasta dos citas, en este tiempo hemos sufrido el mayor desastre natural del presente siglo. Los sindicatos no quieren negociar, han demostrado que quieren aprovecharse de las circunstancias y debilidades del conjunto del sector», ha subrayado Inmaculada Sanfeliu, presidenta del CGC.
Asimismo, la patronal remarca que la principal solicitud de la parte empresarial, la posibilidad de trabajar sábados y algunos festivos respetando los descansos legales y la jornada de 40 horas, ha sido rechazada por los sindicatos. Un punto que consideran «esencial» para mantener la competitividad frente a países como Egipto, Marruecos y Sudáfrica, cuya oferta tiene costes mucho menores.
Demandas salariales «inasumibles»
Las negociaciones han avanzado rápidamente. El 3 de octubre, los sindicatos presentaron su plataforma, y el 21 de octubre lo hizo la patronal. Sin embargo, dos reuniones (28 de octubre y 4 de noviembre) fueron canceladas por la parte social, explican.
Tras la DANA, el CGC propuso el 11 de noviembre un acuerdo centrado en un incremento salarial anual durante los cuatro años del convenio y en medidas de flexibilidad laboral (trabajo en sábados y festivos). Sin embargo, los representantes de los trabajadores rechazaron esta propuesta tras consultar con sus bases y exigieron retomar las conversaciones a partir de su tabla reivindicativa, además de anunciar la huelga.
Así, hasta ahora, los avances se han centrado en la discusión sobre remuneraciones. La parte social no presentó una propuesta concreta, afirman, pero sí que rechazó todas las modificaciones de la patronal y solicitó incrementos salariales significativos para ciertas categorías, con aumentos desde el 69% al 14%.
Además, exigieron una subida del 11% para todos los trabajadores el primer año, seguida de un 3% anual los dos siguientes, junto con una cláusula de revisión salarial por el IPC y un 3% adicional por turnicidad. También demandaron que las horas estructurales, actualmente con un recargo del 15%, pasen a pagarse al 25%.
Desde el CGC consideran estas demandas «inasumibles». Según sus cálculos, algunos incrementos salariales supondrían encarecimientos de hasta el 217% en horas estructurales y entre un 14% y un 93% en horas ordinarias.
«Si tras cubrir los descansos legalmente establecidos, los almacenes no pueden tampoco trabajar los sábados y festivos, es imposible asumir tales incrementos. No es que lo decidamos nosotros, es la gran distribución europea la que lo exige: o estamos dentro o nos quedamos fuera. Si no lo hacemos nosotros, lo harán otros», ha remarcado Sanfeliu.
Mes clave para la campaña
Por otro lado, CGC recuerda que diciembre es «crucial», pues en este mes se comercializan las variedades principales del país: la naranja navelina y la clementina de Nules. También se preparan los envíos para la campaña navideña. Las lluvias recientes han complicado la situación, dejando pendientes miles de toneladas de cítricos por recolectar, manipular y enviar a la gran distribución europea, que absorbe el 85% del producto fresco español.
«Hacer una huelga en esas fechas es irresponsable porque supondrá perder una importante parte de nuestra producción y poner en bandeja el suministro a nuestros competidores -Marruecos en clementinas/mandarinas y Egipto, en naranjas- con costes laborales y de producción hasta diez veces más bajos que los nuestros», ha alertado Sanfeliu.