¿Qué es, para qué sirve y cómo se crea una unidad de recuperación?
El sistema operativo Windows 11 nos brinda la posibilidad de recuperar todo el contenido de nuestro ordenador en caso de error del disco duro
Dentro de todos los problemas con los que podemos toparnos en lo relativo al uso de nuestro ordenador, los fallos en el disco duro son, por norma general, el problema más recurrente, además de uno de los más complicados de solucionar, especialmente para todas aquellas personas que guardan en su disco duro información importante.
Es cierto que hay muchas opciones para minimizar los fallos en caso de que el disco duro de nuestro dispositivo sufra cualquier problema, siendo una copia de seguridad uno de los imprescindibles. Sin embargo, si junto al disco duro también se han dañado algunos archivos del sistema, la herramienta de Windows llamada unidad de recuperación puede ser un auténtico salvavidas. Y aquí te explicaremos qué es, cuál es su fin y, por supuesto, cómo crearla.
La importancia de una unidad de recuperación en cualquier dispositivo de Windows
En resumidas cuentas, la finalidad de crear una de estas unidades de recuperación consiste en la posibilidad de devolver nuestro ordenador a su estado de fábrica cuando el disco duro sufra un fallo grave en su funcionamiento. Un hecho que puede resultar sumamente útil a la larga, ya que es la vía idónea para que nuestro ordenador no quede inutilizado en caso de sufrir uno de estos problemas.
Se trata de una unidad personalizada, pensada para hacer posible la recuperación de nuestro sistema, junto a todos los archivos o programas que sea posible. Una forma de salvaguardar nuestro sistema de arranque en Windows, así como de todos los drivers necesarios para que esto sea posible. Y lo mejor de todo es que para llevarla a cabo tan solo necesitaremos un USB de 16 GB con espacio libre.
Eso sí, es recomendable prevenir antes de curar, y llevar a cabo esta tarea antes del fallo, ya que a posteriori, aunque es posible recuperar gran parte de nuestro sistema, es más que probable que perdamos algunos elementos fundamentales. Pero ahora sí, vamos al grano: ¿Cómo crear una unidad de recuperación en Windows 11?
En primer lugar, simplemente tendremos que seleccionar la opción Crear una unidad de recuperación al llevar a cabo la búsqueda en nuestro dispositivo. Una tarea para la que nos pedirán la clave de usuario de nuestro ordenador, si es que lo tenemos protegido. Una vez seleccionada esta opción y conectado el dispositivo USB, tendremos que seleccionar la unidad USB en cuestión y hacer clic en siguiente.
Posteriormente, Windows ofrece la posibilidad de realizar una copia de seguridad de los archivos personales en la propia unidad de recuperación. Algo recomendable si en caso de sufrir algún inconveniente con el disco duro quisiéramos recuperar nuestro dispositivo de forma íntegra. Después, simplemente tendremos que hacer clic en Finalizar, y, tras unos minutos, la unidad de recuperación estará creada.
Ahora bien, es importante también saber cómo usar esta unidad para restaurar nuestro equipo. En primer lugar, tendremos que conectar la uidad en cuestión al dispositivo. Una vez encendido el ordenador, tendremos que pulsar en la tecla del menú de arranque (generalmente F12 o F10), y seleccionar la opción para arrancarlo desde la propia unidad de recuperación.
Posteriormente, solo tendremos que seguir paso a paso las instrucciones, que nos guiarán paso a paso para llevar a cabo esta acción de forma sencilla, práctica y, sobre todo, segura.