OpenAI se planta contra la desinformación: así frenará la difusión de imágenes creadas por IA

Hace poco más de un año, ChatGPT revolucionó por completo internet. La llegada de un chatbot conversacional no cambiaba por completo la concepción que tenía la mayoría de la Inteligencia Artificial, sino que hizo a muchos comprender el infinito abanico de posibilidades que se abría ante sí de la mano de una herramienta de estas características.

Desde entonces, han sido muchos los usos que ha recibido la plataforma de OpenAI. Hasta el punto de que muchos han abogado por poner ciertas limitaciones a esta Inteligencia Artificial. Sin embargo, por el contrario a lo que muchos piensan, los creadores de ChatGPT no han llegado para hacer crecer el contenido falso generado por IA. Y la última medida de OpenAI lo demuestra.

OpenAI marca el límite con las imágenes creadas por Inteligencia Artificial

Lo cierto es que el desarrollo de esta Inteligencia Artificial es una gran noticia para todas aquellas personas que tratan de complementar cualquier tipo de trabajo con la ayuda de este tipo de herramientas. Sin embargo, es un arma de doble filo, ya que también es el prototipo perfecto para desinformar y dar un uso nocivo a estas herramientas. El ejemplo perfecto de ello es la creciente propagación de imágenes falsas o, por otro lado, los ya conocidos DeepFakes.

Una serie de iniciativas con las que desde OpenAI no están en absoluto de acuerdo, pues podrían llevar a eliminar la delgada línea que existe entre la realidad y la ficción, en un panorama en el que internet es la plataforma perfecta para propagar información falsa. Y para poner fin de una vez por todas a esto, concretamente en el ámbito de las imágenes, los creadores de ChatGPT han dado vida a la herramienta idónea para ello.

En resumidas cuentas, se trata de un clasificador avanzado de imágenes, el cual es capaz de determinar con un simple vistazo si una imagen es real o se trata de una creada a partir de su Inteligencia Artificial generativa, DALL-E. Un clasificador que, además, en sus primeras pruebas ha arrojado magníficos resultados, con un acierto del 98’8% en el reconocimiento de imágenes estudiadas.

Para ello, la novedosa herramienta de ChatGPT hace uso de algoritmos basados en la IA que son capaces de analizar todas y cada una de las características que componen una imagen, llegando así a la conclusión de si han sido creadas por DALL-E o no. Y no solo en lo relativo a la composición de la propia imagen, sino que detecta también todo tipo de modificaciones, tales como los recortes, los cambios de color o la compresión de la propia imagen.

Una herramienta con la que desde OpenAI buscan luchar contra la desinformación creada precisamente por el desarrollo de estas plataformas de Inteligencia Artificial. Un tipo de tecnología que llegó a nuestras vidas para amplificar nuestras posibilidades, pero que ha sido utilizada por muchos como un arma de doble filo con fines maliciosos. Sin embargo, plataformas como OpenAI, más allá de desarrollar este tipo de herramientas, buscan también acabar con esa problemática, y esta innovadora herramienta lo demuestra.