‘Loud budgeting’, la nueva forma viral de ahorrar
El loud budgeting (en castellano, presupuesto ruidoso) es una tendencia que consiste en hacer público tus gastos y tu presupuesto en redes sociales, como Tiktok
Foto: Freepik
Comentarios
El ‘loud budgeting‘ o presupuesto ruidoso (en castellano) es una tendencia que se ha viralizado en redes sociales, principalmente en Tiktok.m Consiste en exponer tu presupuesto y gastos en videos o fotos con el propósito de ahorrar.
Los usuarios de internet comparten sus financias generando interés en otros que buscan ahorrar algo de dinero. La transparencia en esta ‘moda’ es un factor clave para quienes planifiquen sus presupuestos con base en otras experiencias.
Un ejemplo de la tendencia es el caso de Katie Thompson, una usuaria de Tiktok que trabaja como paraprofesional (similar a educadora) a tiempo completo y aparte tiene un trabajo a medio tiempo.
En un video publicado el pasado febrero, contó que su sueldo anterior fue de 1,331 dólares y que lo gastará en deudas, la factura del agua y gas, suscripciones en plataformas de streaming, cuidado personal y entretenimiento. La usuario creó incluso una sección donde semanalmente ha subido un video mostrando los avances en su objetivo de ahorrar.
Lo bueno del ‘loud budgeting’ es que permite normalizar el hablar del dinero de forma abierna, sabiendo que no todos tienen el lujo de presumir y llevar un alto nivel de vida.
Esta tendencia, incluso, ha surgido como una propuesta contraria al lujo silencioso o silent luxury (en inglés), que apunta a no ostentar los lujos, sino a ser elegante y reservado.
El presupuesto ruidoso también desincentiva el consumo excesivo, algo que comúnmente se promueve en internet.
Beneficios
Una ventaja del ‘loud budgeting’ es que permite fijar límites en tus finanzas, consiguiendo que te puedas ceñir a tu presupuesto en tu vida diaria, como ha explicado la asesora financiera Chloe Moore al portal Business Insider.
Esto conlleva a que hagas algunas acciones para evitar las compras espontáneas, como cancelar tus suscripciones, eliminar métodos de pago, entre otros.
Otro beneficio es que priorizas lo que necesitas de verdad en lugar de gastar por el simple gusto de hacerlo. Es necesario preguntarse si es que los artículos que quieres comprar servirán o solo llenarán un vacío o moda.
Como tercer beneficio, se encuentra la diferencia entre no tener dinero y no querer gastarlo. Se trata de pensar en lo último, reconociendo que cada cosa en tu vida diaria tiene un presupuesto.
